1.- La persona elegida por los propietarios del Málaga para suceder a Jesualdo Ferreira en el banquillo, el chileno Manuel Pellegrini, llegará acompañado de su segundo, Rubén Cousillas, que siempre ha estado junto a él, y del preparador físico José Cabello. Los tres coinciden en la tesis de que los entrenamientos son la base del éxito de un equipo, sobre todo porque en las sesiones preparatorias se consigue implantar el estilo y alcanzar el sello futbolístico que el conjunto debe ofrecer. Es extraño encontrar a un solo jugador al que no le gusten los métodos de trabajo del ex entrenador del Villarreal y el Real Madrid, porque la variedad de entrenamientos es enorme. Es extraño que se repitan. El objetivo del cuerpo técnico es evitar la rutina y Cabello se afana en lograrlo. Pero además, para más satisfacción de los futbolistas, todos los ejercicios son cortos, muy intensos (otra de las claves para Pellegrini) y, sobre todo, con balón.
El juego en las bandas con los extremos no existe
2.- Es tal vez el concepto más conocido de Pellegrini: no le gustan los extremos. Y es el más importante, porque el Málaga cuenta con futbolistas de esas características. El chileno prefiere contar con futbolistas que se mueven por dentro (como Santi Cazorla, Riquelme y Cani) o con futbolistas que jueguen a pierna cambiada (por ejemplo, un zurdo en la derecha). Así consigue superioridad por dentro y también deja vía libre para que los laterales suban o para que un punta caiga a la banda.
El fútbol arranca desde atrás
3.- Pellegrini huye del pelotazo. No le gusta que el equipo opte por el envío en largo, aunque tenga un sentido lógico, bien para sacar al equipo de atrás, bien porque se trate de un acción orientada a sorprender a la cobertura rival. El juego del equipo arranca desde la zaga, tal como Ferreira pretendía inculcarle al equipo. Es una propuesta innegociable del chileno, que realiza ejercicios específicos para trabajar esta faceta y así encontrar salida tanto con los centrales como con los laterales.
La presión facilita la posesión
4.- Otra de las máximas de Pellegrini es la importancia de la presión. Siempre destaca que sin ella no es posible lograr la posesión. Esa va a ser una prioridad para el chileno, porque el Málaga se ha visto a merced de sus rivales casi siempre debido a que era incapaz de robar el balón con facilidad. Del 4-3-3 se pasará a un 4-4-1-1 o a un 4-2-3-1. El chileno recuperará la figura del medio punta, que no existía para Ferreira, fundamental en la primera línea de presión, en campo contrario.
Los centrocampistas le dan identidad al equipo
5.- «Los centrocampistas son los que hacen a un equipo ofensivo o defensivo», suele decir el chileno. En otras palabras, los centrocampistas le dan identidad al equipo. Futbolistas como Josico o Marcos Senna fueron fundamentales en su Villarreal, porque no solo brillaban en el orden táctico y en la contención, sino que además tenían ambición. Quiere que sus centrocampistas den un paso adelante, y con ellos la defensa, para jugar más tiempo en campo contrario.
La victoria como prioridad sea cual sea el rival
6.- La ambición debe ser colectiva. Ese afán de que los jugadores vayan siempre hacia arriba y busquen la portería contraria se sustenta en que el equipo debe buscar el triunfo sea cual sea el rival. La apuesta de los propietarios del Málaga por el chileno como sustituto de Ferreira no debe sorprender: se trata de dos entrenadores ganadores y con mentalidad ofensiva. Pellegrini exprime al máximo al jugador con la intención de ir en busca de la victoria en cada encuentro.
El mensaje debe calar entre los jugadores
7.- Pellegrini es un tipo culto e inteligente que sabe transmitir de maravilla sus ideas a los futbolistas. El mensaje debe calar entre los jugadores y lo consigue con una pasmosa facilidad. «Es un entrenador de prestigio, contrastado, y al que lo que le gusta y lo que propone es lo que gusta mucho en Málaga, pero también es lo que le gusta al futbolista», confesó ayer el ex malaguista Calleja a este periódico. Sin duda, el más claro ejemplo de que el chileno supo transmitirle sus ideas en el Villarreal.
La prensa: respeto y distancia
8.- A Pellegrini le da igual que digan que no es muy mediático. Es tremendamente respetuoso con la prensa, pero siempre mantiene las distancias. Le gusta hablar de fútbol, aunque no le agradan las entrevistas.