El club esperará el cierre de la operación sólo hasta el final de esta semanaMantiene su planificación inicial, ya que siempre contempló la opción de que finalmente no llegara el jeque
ANTONIO GÓNGORA agongora@diariosur.es.-
La posible venta del Málaga no se clarifica de una forma definitiva. Ayer era uno de los días clave de las negociaciones, pero al final no hubo grandes novedades. Las conclusiones finales de los asesores, según ha podido saber este periódico, están redactadas y sus planteamientos los conocen ya las partes, si bien continúa sin definirse una operación que se caracteriza por los típicos altibajos de este tipo de conversaciones. Las opciones de éxito, de esta forma, se mantienen inalterables, pero los retrasos y las pequeñas discrepancias juegan cada vez más en contra del acuerdo.
El club malagueño mantiene la ilusión en este proyecto encaminado a ofrecer un salto de calidad a una afición que lleva algunos años de cierto sufrimiento. Pero la espera tiene un límite muy definido para el club, pues la planificación de la plantilla debe concretarse lo antes posible. De ahí que la solución final, ya sea positiva o negativa, deberá llegar antes de que acabe la semana, con el objetivo de cerrar algunos fichajes y decidir la pretemporada a partir del lunes.
La entidad de Martiricos todavía está a tiempo de acudir al mercado con ciertas garantías en busca de refuerzos si finalmente llega la inversión del jeque Abdullah ben Nasser Al-thani, pero las dificultades serán mayores si se mantiene vigente el 'plan b', es decir, que todo siga igual que hasta ahora.
De hecho, el club nunca descartó esta segunda opción, pues el propio presidente, Fernando Sanz, advirtió desde el comienzo que esta operación nunca estuvo cerrada y que en unas negociaciones puede ocurrir cualquier cosa, pese a que las perspectivas fuesen inmejorables. Pero es verdad que, por ejemplo, los responsables de los fichajes nunca pararon de trabajar, si bien no podían cerrar ninguno. Todo estaba y, por ahora, sigue pendiente de que los refuerzos sean más o menos asequibles.
Pautas generales
La posible venta del Málaga arrancó tras el viaje de Fernando Sanz a Doha, donde se reunió durante varios días con Ben Nasser. Allí marcaron unas pautas para desarrollarlas después los asesores, sin concretar cifras. A partir de ahí, sólo unos días después, comenzó una duro trabajo para los especialistas encargados por ambas partes para analizar la situación precisa del club.
Las cuentas del Málaga están claras, pero no así sus posibilidades económicas. Como ocurre en casi todos los equipos del fútbol, la entidad de Martiricos nunca será un gran negocio. Esta circunstancia suele chocar a los expertos economistas, que sólo analizan los ingresos, gastos, patrimonio y rentabilidad. Este asunto también puede ser un problema en la operación.
Durante la semana anterior ya quedó claro que el precio de compra del club podría estar en el mínimo posible, sin beneficios para el propietario actual. Pero esta aparente facilidad puede que tampoco sea suficiente para cerrar el acuerdo. La operación, además, también cuenta con otras dos condiciones por parte malaguista: el comprador tendrá que ofrecer una inversión progresiva que permita a la entidad dar el mencionado salto de calidad y también deberá mantenerse en el cargo de una forma remunerada el actual presidente.
Las condiciones de la operación, a grandes rasgos, disponen de una acuerdo pleno de las partes, pero lo que no acaban de cerrar son las cifras aplicables a algunos de estos capítulos. Pero la negociación está abierta y la 'fumata blanca' puede aparecer en cualquier momento. Lo que no llegó ayer, sin embargo, fue la clarificación de la operación, algo que estaba previsto tras el retraso del arranque de la semana.
La operación continúa abierta, pero los trabajos de los asesores y hasta las conversaciones finalizaron ayer. Ahora sólo queda que llegue la decisión final. Incluso, tampoco se descarta que se reabra en el último instante algún punto de los analizados. Ahora los contactos se prevén al máximo nivel. Los especialistas ya han dado su opinión y deberá ser el propio Fernando Sanz y Ben Nasser los que definan una operación que encarrilaron en Qatar hace un par de semanas.
La petición del club para cerrar la operación antes de que acabe la semana no responde a una exigencia fruto del capricho, sino que está directamente relacionada con la planificación de la plantilla. Sanz es consciente de que el equipo no puede esperar más sin concretar las altas y las bajas, pues la pretemporada está a la vuelta de la esquina.