Tras haber arrancado esta madrugada en el cuadro de dobles, junto a David Nalbandián, ganando a la pareja Andújar-García López, Rafa Nadal abrirá mañana su participación individual en el Brasil Open. El torneo se disputa en Sao Paulo, en las pistas cubiertas de tierra batida del Ginasio Ibirapuera, que han recibido fuertes críticas, así como las bolas. El sorteo ha metido a Nadal (primer cabeza de serie) directamente en octavos de final, donde Rafa se medirá mañana al vencedor del encuentro que jugarán hoy Rubén Ramírez Hidalgo y el brasileño Joao Souza.

"Soy lo que soy con un mismo estilo. Cambiar drásticamente ese estilo es imposible. Podemos aspirar a mejorarlo en todas las superficies. No puedo saber cómo evolucionarán las cosas, pero aspiro a prolongar mi carrera", razonó Nadal en rueda de prensa. Nicolás Almagro reaparece como cabeza de serie número dos, y puede cruzarse con Horacio Zeballos, el verdugo de Nadal en Viña del Mar.

Rafa Nadal jugará mañana (horario por determinar) su primer partido en el cuadro individual del ATP 250 de Sao Paulo. Será contra Joao Souza, que derrotó a Rubén Ramírez Hidalgo por 7-6 (6) y retirada del alicantino. El brasileño, de 24 años, 140º del ránking y natural de Río de Janeiro, nunca se ha enfrentado al español.

Nadal fue recibido como un ídolo por la 'torcida' el martes, cuando junto a David Nalbandián consiguió levantar dos puntos de partido a Pablo Andújar y Guillermo García López para avanzar en el dobles por 6-3, 3-6 y 11-9. Se lo agradeció en portugués y alabó al ídolo Guga Kuerten. En segunda ronda se las tenían que ver con Horazio Zeballos, su verdugo en la final de Viña del Mar, y Oliver Marach. La expectación en el torneo es máxima y ya se han vendido todas las entradas para los cuartos de final, semifinales y final, con precios que van desde los 22 euros hasta los 115.

Nadal, que ganó el torneo en 2005, sufrió una caída en el partido de dobles. A los jugadores no les está gustando la tierra batida del Ginasio Ibirapuera, con capacidad para 9.000 espectadores. Filippo Volandri fue el más beligerante, e hizo ver a la ATP que la pista tenía muchas irregularidades.

Mientras, Albert Montañés selló su paso a la segunda ronda al derrotar a Paolo Lorenzi por un doble 6-4.

El tenista español Rafa Nadal ha firmado un cómodo triunfo (6-3, 6-4) ante el brasileño Joao Souza en su debut en la segunda ronda del Abierto de Brasil, que se celebra sobre tierra batida en la ciudad de Sao Paulo, con lo que se medirá en cuartos de final al argentino Carlos Berlocq.

Nadal, que disputa su segundo torneo después de regresar la pasada semana en Viña del Mar tras siete meses de lesión, no tuvo problemas en su estreno en el individuales brasileño. Souza, verdugo del español Rubén Ramírez Hidalgo en primera ronda, intentó la gesta en el segundo set pero el mallorquín no dio opción a su rival para seguir adelante con su rodaje.

Con buenas sensaciones en el servicio y la derecha rompedora, el tenista de Manacor no tuvo problemas para sellar el primer set ante un Souza poco exigente. En el sexto juego, Nadal acumuló tres bolas de ''break'' y, aprovechando la última, sumó una ventaja que a la postre resultó suficiente para ponerse por delante (6-3). En el segundo acto, el tenista local mejoró pero no lo suficiente.

Aún así, el brasileño incrementó sus prestaciones en el resto y puso en más apuros al número dos del mundo. De hecho, en el cuarto juego Souza gozó de la primera bola de ''break'' en el partido, pero Nadal la solventó evitando dar alas a un Souza que buscaba el aliento de la grada. Poco a poco el cabeza de serie número uno en Sao Paulo mostraba parte de su repertorio, dejando pinceladas de sus golpes preferidos.

Aún así, el servicio de Nadal bajó enteros y el nivel de su rival, despojado de los nervios iniciales, aumentó. Sin embargo, tras firmar el 4-4, el tenista mallorquín vio el momento de apretar el saque de su rival y lo hizo de forma primorosa y contundente (5-4, sin dejarle sumar un punto). El partido estaba visto para sentencia y Nadal lo cerró a continuación con su saque.

Nadal ganador en el torneo de Brasil

Rafa Nadal levantó un trofeo 251 días después. No fue el de Roland Garros, como el 11 de junio del año pasado, sino el del ‘modesto’ ATP 250 de Sao Paulo, que ya ganara en el 2005 con 18 años: 6-2 y 6-3 a David Nalbandián, tras remontar un 0-3 en la segunda manga. No hubo brillo tenístico, pero el título tiene mucho peso en lo mental, en la lucha que ha emprendido Nadal por volver a ser él.

Nadal ha vuelto ahora a la gira sudamericana, con 26 años, para ascender la escalera que debe llevarle a la planta VIP donde le esperan Novak Djokovic, Andy Murray, Roger Federer y David Ferrer. Tras siete meses parado por una rotura del tendón rotuliano y hoftitis en su rodilla izquierda, decidió capturar sensaciones y seguridad en la arcilla de Sudamérica que le vio explotar. No en el cemento. Tras caer en la final de Viña del Mar con Horacio Zeballos (71º) en su retorno, derrotó en el Open brasileño al ‘Rey David’, un jugador con más galones que lo que indica su puesto 93º del ránking y que, pese a llevar desde agosto pasado sin jugar, había eliminado al campeón en 2012 Nicolás Almagro.

“No soy favorito”, había advertido Nadal antes de ganar el título que hace el 51 en su carrera, el 37 sobre tierra (37-5 en finales en esta superficie). Las pequeñas bolas Wilson, los hoyos de la pista, la altitud (más de 700 metros) y la condición indoor del torneo hacían la cancha “más rápida que la del US Open y Australia”, dijo. Pero más que eso, lo que frenaba a Nadal eran las sensaciones que le transmitió su rodilla frente a Martín Alund, ante el que cedió un set en semifinales. “No respondió bien. Y así no puedo atacar la pelota, no puedo moverme bien”.

En la final, con el título a tiro, Nadal se olvidó a ratos de esa rodilla y dio fogonazos. Discontinuos, pero esperanzadores. En el primer set, dos breaks para 4-2 y 6-2 con Nalbandián pesado y descolocado. Sin ser el de estos días. Él, también con dudas. Dudas que se acentuaron al inicio del segundo, cuando el argentino se colocó 3-0. Entonces, el número cinco del mundo se reencontró con aquel tenista fuerte de mente que siempre ha sido. Sacó un mejor tenis. Metió profundidad a la bola y endosó tres roturas seguidas para anotarse seis juegos del tirón.

En sólo dos torneos, Rafa ha vuelto, aunque aún le quede mucho camino. 251 días después. Próxima parada, en dos semanas Acapulco, donde por ejemplo estará David Ferrer. Otro escaloncito hacia la cima.

Siete meses de calvario, ocho de travesía por el desierto. Rafael Nadal se impuso por 6-2 y 6-3 al argentino David Nalbandian y se proclamó campeón del Abierto de Brasil, el primer torneo que gana en su retorno al tenis tras la dura lesión de rodilla que le alejó de las pistas de tenis. [Narración]

Aun lejos de su mejor nivel, el manacorí demuestra tener talento suficiente para llegar a las rondas finales de estos torneos de menor categoría. Pese a sufrir en los partidos anteriores a la final, Nadal no falló en la segunda final que disputaba. Sao Paulo puede ser, como él mismo dijo en la ceremonia posterior al encuentro, "un nuevo buen comienzo".

El destino quiso que Nalbandián, su compañero en el torneo de dobles, fuese su rival en la final. Ambos acordaron no continuar en el cuadro, con el fin de reservar fuerzas para el individual. Tanto el argentino como el español vienen de una lesión, por lo que para los dos era un partido muy especial.

Nadal, actual número cinco del mundo, no tuvo dificultades con Nalbandian en la primera manga, que ganó por 6-2 y en la que mostró algunos destellos de su mejor tenis. Las cosas se le pusieron un poco más difíciles en el segundo set, en cuyo inicio el argentino intentó una reacción, que a la postre resultó en vano.

Tras llegar a estar empatados 3-3, el mallorquín se repuso, pasó a controlar el juego otra vez y acabó imponiéndose por 6-3. El último punto fue producto de un error no forzado del tenista argentino, que lanzó la pelota fuera por milímetros. Nadal alzó los brazos en señal de victoria y fue aclamado por las tribunas del gimnasio Ibirapuera de Sao Paulo, que desde el primer partido de este torneo le habían sido absolutamente incondicionales.

El español había alzado un trofeo por última vez en junio del pasado año, cuando ganó su séptimo Roland Garros, y poco después surgió la lesión en el tendón rotuliano de la rodilla izquierda que le impidió jugar hasta hace 15 días, cuando regresó al tenis en el torneo ATP de Viña del Mar (Chile). En ese campeonato alcanzó la final, pero perdió ante el argentino Horacio Zeballos, quien se impuso por 6-7 (2), 7-6 (6) y 6-4.

El español Rafael Nadal (5) y el argentino Juan Martín Del Potro (7) han recortado distancias con respecto a sus rivales en el ''top ten'' tras ganar los torneos de Sau Paulo (Brasil) y Rotterdam (Holanda) respectivamente; Federer ha perdido puntos y se aleja de Djokovic en su lucha por el número uno de la ATP.

Clasificación ATP:

1. Novak Djokovic (SRB) 12.960 puntos

2. Roger Federer (SUI) 9.855

3. Andy Murray (GBR) 8.480

4. David Ferrer (ESP) 6.865

5. Rafael Nadal (ESP) 5.755

6. Tomas Berdych (CZE) 4.485

7. Juan Martín del Potro (ARG) 4.410

8. Jo-Wilfried Tsonga (FRA) 3.515

9. Janko Tipsarevic (SRB) 3.125

10. Richard Gasquet (FRA) 2.880

11. Nicolás Almagro (ESP) 2.540

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24. Fernando Verdasco (ESP) 1.525

35. Marcel Granollers (ESP) 1.125

45. Pablo Andújar (ESP) 900

47. Feliciano López (ESP) 870

55. Albert Ramos (ESP) 785

27. Roberto Bautista Agut (ESP) 780

58. Daniel Gimeno-Traver (ESP) 778

84. Guillermo García-López (ESP) 614

90. Albert Montañés (ESP) 575

95. Tommy Robredo (ESP) 545

96. Rubén Ramírez Hidalgo (ESP) 543

Rafael Nadal, tras ocho meses apartado de la competición por una lesión en el tendón rotuliano de su rodilla izquierda, ha sumado 205 puntos tras conquistar el torneo de Sao Paulo que le sirven para afianzarse en el quinto puesto de la clasificación mundial con 5.755 puntos además de acercarse a su compatriota David Ferrer que acumula 6.865 puntos, los mismos que la semana pasada, y se mantiene en la cuarta plaza.

Por su parte, Juan Martín Del Potro ha recogido 200 puntos en el torneo de Rotterdam tras vencer en la final al francés Julien Benneteau con lo que se mantiene en el séptimo puesto y se acerca al checo Tomas Berdych, sexto clasificado, que ha perdido 90 puntos con respecto a la semana anterior.

El suizo Roger Federer ha sido el máximo perjudicado dentro de las diez mejores raquetas del circuito ya que ha perdido 450 puntos con respecto a la semana pasada tras caer ante Benneteau en cuartos de final del torneo de Rotterdam en el que defendía título y se sitúa en la segunda posición con 9.855 puntos alejándose así de la lucha por el número uno frente al serbio Novak Djokovic, que se mantiene a la cabeza de la clasificación con 12.960 puntos.

A pesar del baile de números en el ''top ten'', la clasificación se mantiene sin variaciones en los 12 primeros puestos con respecto a la semana pasada.

El primer cambio en la clasificación ha sido el experimentado por el canadiense Milos Raonic (14) que, a pesar de haber ganado por tercer año consecutivo el torneo de San José (Estados Unidos), se mantiene con los mismos puntos dado que defendía título y pierde una posición que cede al francés Gilles Simon, que se sitúa en la décima tercera posición con 2.370 puntos.

Con respecto a los tenistas españoles, al margen de Rafael Nadal y David Ferrer, asentados en la cuarta y quinta posición respectivamente, y Fernando Verdasco que se mantiene en el puesto 24, Pablo Andújar (45) y Feliciano López (47) han subido una posición, Daniel Gimeno-Traver (58) dos, Roberto Bautista Agut (57) cinco y Albert Ramos (90) seis.

Por otra parte, Marcel Granollers (35) ha caído un puesto, Albert Ramos (55) tres, Guillermo García-López (84) uno y Rubén Ramírez Hidalgo cinco.

El tenista catalán Tommy Robredo se ha incorporado al ''top 100'' de la clasificación ATP y se coloca en el puesto 95 con 545 puntos.

En una entrevista concedida a Lancenet, Rafa Nadal aseguró que cambiaría ahora sus títulos "por recuperar la rodilla". "Aunque espero no tener que cambiar ninguno Creo que mi rodilla va por buen camino y soy positivo. Mi sueño es estar perfecto y poder competir y entrenarme todo lo que quiera. Después, deseo competir al máximo nivel por muchas semanas", añadió.

Nadal jugará la próxima semana en Acapulco, sobre tierra batida, pero aún no ha decidido si lo hará en Indian Wells y Miami, sobre cemento, una superficie donde sufre mucho más su rodilla. "No sé si dejaré de competir en ese tipo de pistas, porque no puedo pronosticar el futuro. Sólo pienso en la recuperación para competir como lo he hecho durante toda mi vida".

Nadal también dijo que "actualmente es improbable" pensar en ganar a Djokovic, Federer o Murray, "pero no imposible". "Hace dos semanas era impensable ganar a Nalbandián. Y hace tres era impensable llegar a la final de Viña del Mar. Ya conseguí vencerles en el pasado. Si todo va bien, por qué no voy a poder".

Victorias. Mientras, Buenos Aires empezó con buen pie para los españoles. Nicolás Almagro ganó al argentino Guido Pella por 6-3 y 6-2; Albert Ramos, al italiano Flavio Cipolla por 6-1 y 6-0; y Robredo, al portugués Gastao Elias por 6-3 y 6-0.

De madrugada jugaron entre sí Pablo Andújar y Albert Montañés. También debutó Gimeno Traver. Ferrer, García-López y Rubén Ramírez lo harán hoy.

Nadal y Ferrer finalistas en Acapulco

Nadal ganador del torneo de Acapulco

Clasificación:

1. (1) Novak Djokovic (SRB) 13.280.

2. (2) Roger Federer (SUI) 9.535.

3. (3) Andy Murray (GBR) 8.180.

4. (4) DAVID FERRER (ESP) 6.665.

5. (5) RAFA NADAL (ESP) 6.105.

6. (6) Tomas Berdych (RCH) 4.740.

7. (7) Juan Martín Del Potro (ARG) 4.410.

8. (8) Jo-Wilfried Tsonga (FRA) 3.660.

9. (9) Janko Tipsarevic (SRB) 3.125.

10. (10) Richard Gasquet (FRA) 2.880.

11. (12) NICOL?S ALMAGRO (ESP) 2.570.

12. (11) Marin Cilic (CRO) 2.535.

13. (13) Gilles Simon (FRA) 2.390.

14. (14) Juan Mónaco (CAN) 2.180.

15. (15) John Isner (USA) 2.125.

16. (16) Kei Nishikori (JAP) 2.100.

17. (18) Milos Raonic (CAN) 2.050.

18. (17) Stanislas Wawrinka (SUI) 1.915.

19. (19) Tommy Haas (ALE) 1.860.

20. (20) Andreas Seppi (ITA) 1.765.

Rafael Nadal Parera, el mejor tenista de todos los tiempos sobre tierra batida, desmanteló a David Ferrer, actual número cuatro del mundo, en la final del Abierto Mexicano de Acapulco: un 6-0 y 6-2 a través de 65 minutos de tenis pasional sentenció el segundo título para Nadal en 2013. Nadal sube a un porcentaje de 93,04% de victorias en tierra (266 triunfos, 20 derrotas) y se aleja del segundo en esta lista: Bjorn Borg: 86,3%. Tras reeditar en Acapulco el título que conquistó en 2005, Nadal agrupa 38 títulos en tierra batida: segunda marca tras los 45 del argentino Guillermo Vilas, en activo hasta los 37 años.

Desde el break de salida, Nadal abrumó a Ferrer, que ya había sufrido en semifinales ante Fognini. En los planes del equipo técnico de Ferrer (Javier Piles), era vital que David conectara largos reveses paralelos tras encerrar a Nadal en el rincón del golpe de derecha. No hubo caso: Nadal tiroteó el servicio de Ferrer, que sólo ganó el 55% de puntos con primeros saques y un bajísimo 22% con segundos. La insistencia de Ferrer en tocar el revés de Nadal facilitó que Rafa entrara en ritmo por esa zona. Con restos largos y saques intencionados, Nadal llevó la iniciativa y ganó el 81% de puntos con primeros servicios más un demoledor 77% de puntos (14/18) con restos como adoquines sobre los segundos saques de Ferrer. A finales del devastador primer set, y a un mes de cumplir 31 años, Ferrer se quejó a micrófono abierto: "No hay (revés) paralelo y así no hay manera".

Exhibición. En la segunda manga, Nadal tuvo bola para 3-0, pero Ferrer llegó hasta 2-1 y restó para 2-2. David no concretó. De vuelta, en el quinto juego, Nadal explotó en latigazos a babor y estribor que produjeron el 4-1. David se rindió psicológicamente. Nadal remató su último servicio en blanco: 6-0, 6-2 en 65 minutos y 500 puntos ATP para Rafa. Ferrer, tricampeón en Acapulco entre 2010 y 12, cede 250 puntos. El barco de Nadal parte hacia la travesía estadounidense en pistas duras: hoy, exhibición en Nueva York. Después, Indian Wells y Miami. Ese barco de Rafael Nadal, Master&Commander, es la casa del mejor tenista de todos los tiempos en tierra batida.

El tenista español Rafael Nadal, que estuvo alejado de las pistas durante siete meses por una lesión, dijo hoy en Nueva York que intentará estar en unas condiciones "muy cercanas al cien por cien" para el Masters 1.000 de Montecarlo en abril próximo.

Así lo declaró hoy el quinto clasificado mundial en una conferencia de prensa posterior al partido de exhibición que jugó en el Madison Square Garden neoyorquino frente al argentino Juan Martín del Potro, quien se impuso al mallorquín por 7-6 y 6-4 en una hora y 35 minutos.

"La prioridad es que la rodilla se recupere y después intentar llegar en unas condiciones muy similares o muy cercanas al cien por cien en Montecarlo", dijo el tenista sobre ese torneo en tierra batida, que se celebrará entre el 13 y el 21 de abril.

Nadal volvió a la competición hace un mes tras superar una lesión en la rodilla izquierda, que "todavía no está al cien por cien" pero que siente "mejor a diario", lo que le hace pensar que seguirá "por la misma línea de dolor controlado, pero no descontrolado como antes".

"Es un dolor que me permite moverme bien, que me permite correr sin tener que pensar en la rodilla y eso es lo más importante para mí a día de hoy", dijo el tenista, quien confió en que, si sigue así durante unas semanas, podrá volver a entrenarse al máximo para recuperar la forma física.

Nadal reconoció que "es prioritario" que su rodilla se recupere, pero que, tras siete meses sin competir, "y no hay que engañarse, entrenando muy poquito", su cuerpo no está "al cien por cien preparado, ni al nivel aeróbico, ni a nivel de velocidad, ni de potencia". "Necesito todas estas cosas que me las da la competición y el entrenamiento fuerte", afirmó.

Sobre su partido de exhibición frente a Del Potro en Nueva York, que ha supuesto su primera toma de contacto con la pista dura este año, dijo que "no ha habido mucho cambio" frente a la pista de tierra, aunque advirtió que "hay que ver cómo responde" cuando la someta a la máxima competición.

El tenista arrolló el pasado sábado a su compatriota David Ferrer, cuarto del mundo, en la final del Abierto Mexicano de Tenis y ahora se dirige al primer Masters 1000 de la campaña, el de Indian Wells (en California), que se juega del 7 al 17 de marzo.

ya ha comenzado el torneo de indian wells

Nadal ya está en octavos de Indian Wells

Primero, las pistas de Indian Wells temblaron. Un terremoto de 4,7 grados en la escala de Richter (las primeras mediciones indicaban 5,2) con epicentro cerca de Palm Springs sacudió a los jugadores. “¡De locos estar en la cama y que se mueva todo, por suerte ha sido un susto!”, expresaba Marcel Granollers.

A continuación, Leo Mayer, que iba a ser rival de Rafa Nadal, se retiró por molestias en la espalda antes de salir a pista. “He tenido mucho miedo. Es la primera vez que siento un terremoto y mis piernas temblaban”, reconoció Rafa, a quien el seísmo pilló vendándose los dedos. El caso es que el español pisa ya los octavos de final, que tendrá que jugar contra Ernest Gulbis, que viene de ganar Delray Beach y que derrotó a Andreas Seppi por 7-5, 3-6 y 6-4. Buena noticia a medias, porque Nadal necesita minutos de rodaje en pista rápida antes de afrontar partidos más serios.

También en octavos de final está ya Garbiñe Muguruza. La joven jugadora vasca, de 19 años, arrolló a la rusa Magdalena Rybarikova por 6-4 y 6-0. Procedente de la previa, Garbiñe se enfrentará ahora a la alemana Angelique Kerber. En esa ronda estaba ya Lara Arruabarrena, tras impornerse a la italiana Roberta Vinci por 2-6, 6-4 y 6-4.

El tenista mallorquín Rafa Nadal luchará por su octava victoria en el Barcelona Open Banc Sabadell 2013-61º Trofeo conde de Godó que se disputará en el Real Club de Tenis Barcelona 1899 del 20 al 28 de abril próximos y que hoy se ha presentado hoy en el Ayuntamiento de Barcelona.

El acto ha contado contará con la presencia del Presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal, del Secretario General de l’ Esport de la Generalitat de Cataluña, Iván Tibai; el alcalde de Barcelona, Xavier Trias; el presidente de Banc Sabadell, Josep Oliu; don Javier Godó, Conde de Godó; el presidente del Real Club Tenis Barcelona 1899, Albert Agustí, y el director deportivo del torneo, Albert Costa.

Cardenal ha destacado que “el torneo es el reflejo de la pujanza del deporte en la ciudad de Barcelona y en Cataluña en general y que tiene una alta proyección internacional”.

Albert Agustí ha destacado alguna de las novedades de esta edición, en la que se cumple el centenario de la distinción de Real al club Tenis Barcelona por parte de S.M. el Rey Alfonso XIII, “Se rendirá homenaje a Juan Carlos Ferrero, que se realizará en la misma pista central que le vio ganar el título en el año 2001 frente a Carlos Moyá. El legendario jugador estadounidense Stan Smith, será el invitado especial al torneo este año”, ha destacado.

Junto a Nadal, ahora número 5 del mundo y que ha vuelto a la competición, tras siete meses de inactividad, con una victoria en Sao Paulo (Brasil), estará su gran rival, el alicantino David Ferrer (actual número 4), finalista en 2008, 2009, 2011 y 2012, perdiendo siempre ante Nadal. Después de las victorias logradas este año en Auckland y Buenos Aíres, este año buscará su primera victoria en Barcelona.

También destaca la presencia del checo Tomas Berdych, número 6 del mundo y tercero de los cinco Top Ten de este año. Fue clave para que la República Checa ganase a España en la final de la Copa Davis del año pasado aunque tiene cuentas pendientes con Ferrer. Los otros dos son: el serbio Janko Tipsarevic (nº 9), ganador este año en Chennai (India) y el francés Richard Gasquet (nº10)

En el cuadro de 48 jugadores de esta edición también están: Niicolás Almagro (11), Juan Mónaco (ARG, 14), Kei Nishikori (JAP, 16), vencedor Memphis; Milos Raonic (CAN, 17), ganador en San José, y Alexander Dolgopolov (UKR, 22).

Fernando Verdasco (29), ganador del torneo en 2010; Marcel Granollers (33) finalista en dobles el año pasado; Feliciano López (34), Thomaz Bellucci (BRA, 38), Horacio Ceballos (ARG, 39), ganador en Viña de Mar; Nikolay Davidenko (RUS, 43), Pablo Andújar (46), Jurgen Melzer (AUT, 48), Roberto Bautista (51), Daniel Gimeno Traver (52), Albert Ramos (58), Tommy Robredo (69), vencedor del torneo en 2004, Guillermo García-López (86) y Albert Montañés (95)

El Barcelona Open Banc Sabadell ha reconocido a cinco entidades que han colaborado desde siempre con el torneo: El Grupo Godó, Segura Viudas, Televisión Española, Coca Cola y Televisió de Catalunya (TV3)

El aumento del cinco por cien de su dotación económica con respecto a la pasada edición, tanto en el torneo individual como en el de dobles, coloca al torneo entre los primeros su categoría en ofrecer mayores premios en metálico para los jugadores con un total de 1.708.875 euros.

El ganador del cuadro individual se llevará una suma en efectivo de 389.300 euros (88.150 euros más que el año anterior) y el finalista, 177.500 euros (25.870 más). De la misma manera, los ganadores del cuadro de dobles recibirán un premio de 121.460 euros, lo que supone un aumento de 27.060 euros, y los finalistas 54.810 euros (7.260 más respecto al año anterior).

Como ya se anunció a principios de enero, el torneo reduce el cuadro de 56 a 48 jugadores con el objetivo de mejorar la participación de aquellos tenistas que se encuentran entre el puesto 10 y 30 del ranking mundial.

"Ello conllevará", como ha comentado Albert Costa, director técnico del torneo, "que los tenistas de ranking intermedio puedan ganar más puntos y más premios en metálico. Además los jugadores siempre han destacado el trato que reciben en Barcelona y esto nos llena de orgullo”.

Tras un combate durísimo de dos horas y 35 minutos, Nicolás Almagro (número 11 del mundo) sufrió la tercera derrota de su carrera ante el veterano alemán Tommy Haas, que ya se había impuesto en los dos anteriores duelos directos. Haas (número 19) cumple 35 años el próximo 3 de abril y pasó a octavos de final con tanteo de 6-3, 6-7 y 7-6. Con 5-4 y saque en el tercer set, Almagro (que cedió la primera manga con un solo punto de ‘break’), tuvo ‘match point’ a favor, pero Haas salió de las cuerdas con la sangre fría de un veterano y se impuso en el ‘tiebreak’ definitivo, tras sellar su saque directo número 14.

“No quiero jugar con esta raqueta, cinco semanas lo llevo diciendo”, se lamentaba Almagro, que sólo acertó con el 49% de primeros servicios, a 31 grados en el desierto californiano de Palm Springs. Almagro firmó once saques directos y decantó el ‘tiebreak’ del segundo set con sendos ‘aces’ a 223 y 225 km/h.

La eliminación de Almagro deja a Rafa Nadal como único español en el cuadro individual del Masters 1.000 de Indian Wells. Nadal, que pasó a octavos tras la retirada del argentino Leo Mayer, tiene turno en octavos (hacia las 01:30 de la madrugada) ante uno de los hombres más en forma del ATP Tour: el letón Ernests Gulbis, flamante campeón en Delray Beach y ganador de 13 partidos en los últimos 17 días. “Creo que puedo ganar a Nadal. Tuve problemas con Seppi porque intenté destruirme a mí mismo. Pero antes o después ganaré a alguno de los que están arriba y ganaré algún gran torneo”, declara Gulbis, que ha perdido sus cuatro citas con Rafa, aunque le ganó un set en tres de esos encuentros. En el torneo femenino, Lara Arruabarrena estuvo a dos puntos de ganar el primer set a Maria Sharapova (5-4, 15-30)… pero acabó perdiendo por 7-5 y 6-0.

No hace falta ser el representante de Dios en la tierra para darse cuenta de que la recuperación de Rafa Nadal va a por buen camino, para ver que en poco o más de un mes ha dado un paso de gigante. Pero quizá sí hay que tener un don divino o algo parecido para hacer lo que ha hecho Nadal en tan poco tiempo. Ante un tenista peligrosísimo como Gulbis, el primer examen de verdad sobre cemento, el español ganó -por 4-6, 6-4 y 7-5- mucho más que un partido de octavos de final de Indian Wells: demostró que está de vuelta.

Además, confirmó que ha regresado mostrando los síntomas que lo han hecho un deportista irrepetible: esa pasión y esa garra que transporta por todos los rincones del mundo. En un partido en el que le costó encontrar su sitio, el balear fue capaz de darle la vuelta al marcador ante un jugador como el letón que, si sigue así, no tardará mucho en estar entre los quince mejores del mundo. Ahora, en cuartos de final, tiene la prueba definitiva para calibrar su nivel: Roger Federer.

Pronto se vio que Nadal no quería intercambios con el revés de Gulbis, su golpe más temido junto a su servicio. El balear sabía que tenía que guiar el partido hacia la derecha del letón y a partir de ahí ir edificando el partido. El problema es que a su rival no le sorprendió en exceso. Gulbis, ese tipo de jugadores capaz de ganar a cualquiera, lo contrarrestó con una agresividad que incomodó al número cinco del mundo.

Los tiros del manacorense fueron poco a poco virando hacia el revés de Gulbis. Mal asunto. Además, el de Manacor no peleaba cada punto como si fuese el último –como suele hacer-. Si el juego estaba muy cuesta arriba, rápidamente se la jugaba. Cosas del nuevo Nadal. Mientras tanto, su servicio –lo peor del partido para Nadal- tampoco funcionaba. A la comodidad del letón con su segundo saque había que sumarle la falta de velocidad de su primero. Y el número 67 del mundo no se achantó en la primera manga. Se le vio cómodo, estuvo fino con su derecha, la velocidad de sus tiros era mucho mayor, no concedió ninguna bola de rotura y aprovechó la única que tuvo para cerrar la primera manga.

Tras tocar a rebato en el primer set, no se detuvo en el comienzo del segundo. Nadal jugaba a ráfagas. Tan pronto encadenaba dos tiros buenos como se veía lastrado por su servicio. Sin embargo, fue poco apoco cogiéndole el aire al partido. Y la luz del faro del letón se apagó en el tramo final del segundo acto. Ya sea porque ganar Nadal mejoró notablemente el nivel del primer set, le vino grande o pagó el desgaste, el caso es que se descosió. Obviamente, lo pagó con un parcial que dio aire al balear.

Una vez regresado al partido Gulbis, el tercer acto despegó con mucha igualdad. Los servicios dominaban –en menor medida el del español-. La derecha de Nadal aparecía con más asiduidad. El revés del letón hería al español mientras su derecha hacía aguas por momentos. Al tiempo que la mano de Gulbis sangraba literalmente, ambos se aferraban a su saque combinándolo con espectaculares intercambios. Hasta el 5-5 de la manga definitiva. Ahí, donde se agigantan los grandes jugadores, brilló Nadal. Mejoró sus prestaciones, quebró a Gulbis y cerró una importante victoria.

A partir de ahora comienza la prueba de fuego para el balear en Indian Wells. Al español le espera en cuartos de final un Federer al que volvió a perdonar la vida por enésima vez su compatriota Wawrinka –el número dos del mundo venció por 6-3, 6-7 y 7-5-. A partir de ahora, comprobaremos donde se encuentra Rafa Nadal.

Nadal-Federer cuartos de final en Indian Wells

Vamos nadal

Rafael Nadal firma su octava semifinal consecutiva en el Masters 1.000 de Indian Wells tras golpear duramente en cuartos a Roger Federer: 6-4, 6-2 en hora y 24 minutos. Nadal solucionó el partido con un parcial de 6-1 en juegos entre el final del primer set y el comienzo del segundo, que arrancó con 3-0 para Rafa. Aún se registró una pequeña reacción de Federer, que recuperó hasta 3-2 al lograr su único ‘break’ sobre el servicio de Nadal. Tras ese 3-2, Rafa cerró las puertas a Roger y ganó los tres juegos siguientes, que fueron los últimos del partido.

Federer se mostró bastante tieso y muy escaso de movilidad, quizá a raíz del problema de espalda que sufrió en dieciseisavos ante Ivan Dodig. En octavos, el suizo había necesitado batallar durante dos horas y 20 minutos para superar en tres duros sets a su compatriota Wawrinka. Pero Nadal, mucho más comodo que ante Gulbis en octavos, no titubeó a la hora de someter a Roger Federer con su habitual instrumento de tortura: la bola alta y pesada como un obús o adoquín rodante sobre el delicado revés de Federer a una sola mano. Ante invitados tan distinguidos como Rod Laver, Andre Agassi, Kevin Spacey o Gavin Rossdale, la artillería de Nadal encerró a Federer en esa trinchera del revés… y ahí quedaron reducidas a cenizas las opciones del poco móvil campeonísimo de Basilea. Un ‘break’ en el séptimo juego, tras subidas suicidas de Federer, lanzó a Nadal hacia el éxito en la primera manga: 6-4 en 47 minutos, al cuarto punto de set. Nadal, que había tenido dos bolas para resolver el set con 5-3 sobre saque de Federer, ganaba a esas alturas el 82% de puntos con sus primeros servicios. Después de ganar a Gulbis, Nadal dijo que su rodilla había estado 'así, así'. "Aunque he peleado cada bola, yo siempre peleo cada bola", observó Rafa.

La pérdida del primer set abrumó a Federer, que habitualmente se aturde y agobia bastante en presencia de Nadal. Es como si el imperial Roger se dijese ‘¿qué hago yo aquí de nuevo ante estos bolazos altos de este tipo, que me van haciendo brincar de lado a lado…?’ Aturdido, agobiado y presionado por Nadal, Federer se fue aquietando más y más… y Nadal escapó hasta el 3-0 del segundo set tras ganar ocho de los nueve primeros puntos. Rafa tuvo una bola para 4-0, pero Federer, en su canto de cisne, ajustó algo su revés, cargó en la red y llegó hasta 3-2… sólo para que Nadal le sumergiera, a él y su delicado revés, en una oleada final de tres juegos devastadores como un ‘tsunami’. El error no forzado de revés número 16 de Federer puso fin al partido: 6-4 y 6-2. Es la victoria número 19 de Nadal sobre Federer en 29 duelos directos.

Cifras: Nadal dictó 19 golpes ganadores, por 13 de Federer, que cometió 30 errores no forzados en total (Nadal, 13). Federer logró cuatro saques directos y Nadal, uno, pero Rafa dominó el 77% de puntos con sus primeros servicios… y el 52% con segundos saques, departamento donde Federer, acribillado por los restos de Nadal, sólo consiguió el 29% de puntos. Nadal manejó once bolas de ‘break’ sobre servicios de Federer y decidió siete a su favor (7/11). Federer (64% de primeros saques) rompió una sola vez a Nadal de dos oportunidades (1/2). Nadal (67% de primeros servicios) ganó un total de 73 puntos, 19 más que los 54 de Federer.

La derrota es muy grave para Roger Federer, que cede 820 puntos en su ranking ATP: defendía 1.000 puntos como campeón de 2012, donde apeó en semifinales a un Nadal recién lesionado en el tendón de la rodilla. Mientras, Nadal ya defiende sus 360 puntos de esa semifinal de 2012. En la semifinal de 2013, el sábado, a partir de las 20:00 horas en España, Rafa se encontrará con el checo Tomas Berdych, que eliminó al sudafricano Kevin Anderson con doble 6-4. Nadal ha ganado a Berdych los once últimos partidos que han jugado: 12-3 en total. Rafa no pierde con el checo desde 2006. En la jornada de hoy se disputan en Indian Wells los dos turnos restantes de cuartos de final: Murray-Del Potro y Djokovic-Tsonga.

Rafa Nadal se mostró satisfecho tras su victoria ante Roger Federer (6-4 y 6-2) en los cuartos de final de torneo de Indian Wells (Estados Unidos), primer Masters 1.000 de la temporad.

Gran primer set: "He jugado un fantástico primer set, pero el segundo fue algo extraño, creo que Roger no luchó como suele hacer. Probablemente tuvo algunos problemas y no se sentía cómodo para continuar luchando, pero ambos intentamos dar lo mejor de nosotros".

Mejoría: "Mis movimientos fueron hoy mucho, mucho mejores, así que estoy feliz por ello, especialmente por poder competir, tras un partido tan largo, bien 24 horas después".

Impresionante Nadal ganando en Indian Wells

Exultante tras su tercera corona en Indian Wells (EEUU), Rafa Nadal admitió que lo importante y lo que realmente le da "satisfacción personal" no es el trofeo en sí, sino el camino recorrido tras una lesión que le ha mantenido apartado de las pistas durante siete meses.

"Al final uno no puede pensar en los demás. Nunca lo hago. Puede ser que haya rivales mejores que tú, sin duda alguna, o que no puedas alcanzar cierto nivel, pero sí puedes hacer todo lo que esté en tus manos para ser mejor y superarte a ti mismo", manifestó el mallorquín al terminar el partido.

"Depende de ti hacer las cosas lo suficientemente bien para intentar ser mejor. Si uno se supera, eso es lo que te da la satisfacción personal. Desde mi punto de vista, lo que te da la satisfacción no es tener el trofeo aquí a mi lado, sino el camino, todo lo que has hecho para llegar a esta situación", declaró.

"Si no, todo sería fácil y tendría poco valor. Ahora me acuerdo de todas esas horas de trabajo. Son las que te dan esa emoción al ganar un trofeo o ganar un partido", indicó.

Nadal, en una demostración heroica de sus facultades frente a un inmenso rival, se proclamó campeón del primer Masters 1000 de la temporada al superar al argentino Juan Martín del Potro por 4-6, 6-3 y 6-4 en dos horas y 29 minutos.

Es la tercera corona del mallorquín en el desierto californiano tras los títulos obtenidos en 2007 y 2009. Se lleva un premio en metálico de un millón de dólares y 1.000 puntos del circuito ATP. Lleva 14 victorias seguidas tras sus triunfos en Sao Paulo y Acapulco.

"Es bastante sorprendente cómo he conseguido coger el nivel en tan poco tiempo, eso es verdad", dijo. "He llegado fresco de cabeza, con ganas de competir y de tener esa sensación de competir, entrenar, jugar, trabajar con ilusión y felicidad. Las cosas son así menos complicadas. Sea como sea, es algo totalmente inesperado para todos nosotros, especialmente para mí", indicó.

Pero este tiempo alejado de las canchas no ha hecho que redescubra su amor y pasión por el tenis, que han permanecido intactas, contestó.

"Siempre amo el deporte. Cualquiera. El tenis es el que he practicado toda mi vida. Soy de los que viven el deporte con más pasión y cuando llevas tiempo fuera, como ahora, no puedo esconder que tengo quizá más ganas. Todo es más nuevo. La motivación y la ilusión puede con todo lo demás", declaró.

Instantes antes, durante la rueda de prensa oficial, admitió que la victoria frente a Del Potro es "muy emotiva" por todo lo ocurrido en los últimos meses.

"Te acuerdas de los momentos más duros de dudas. Ojalá sean ya cosa del pasado. Los últimos dos meses antes de volver fueron horribles, con mucho trabajo y tratamientos. Sentía que hacía todo lo posible y no conseguía resultados. Es decepcionante. Es duro pensar cuándo y cómo iba a volver. No es un sentimiento bonito", señaló.

Su reencuentro con la victoria en un Masters, el número 22 de su carrera, no le puede saber mejor.

"He echado de menos esto. Los estadios repletos con este ambiente. La sensación de la victoria. Esa adrenalina. Es solo un juego. En la vida hay cosas mucho más importantes. Pero esa sensación es muy difícil de encontrar fuera de esto"