El procesado, supuestamente, atropelló de forma intencionada al trabajador y luego le golpeó con una barra de hierro La víctima sufrió graves heridas que le han dejado secuelas
Era temprano, cerca de la siete de la mañana, cuando se dirigía a su puesto de trabajo en la empresa municipal de limpieza Limasa. Un hombre le pidió ayuda para mover su vehículo que estaba averiado, pero se la negó. Le explicó que no podía detenerse porque se dirigía al trabajo. El conductor,
contrariado y molesto por la negativa del trabajador, comenzó a insultarle. Minutos después volvió a encontrarse con el operario y en represalia lo atropelló presuntamente de forma intencionada y luego le propinó varios golpes con una barra de hierro. El agresor huyó y dejó a la víctima malherida en el suelo.
El supuesto autor de la agresión se enfrenta ahora a una importante condena. La Fiscalía le acusa de un delito de intento de asesinato y pide que se le imponga una pena de once años de cárcel. El juicio se celebrará próximamente en la Audiencia Provincial.
El suceso ocurrió el 26 de julio de 2008 en la capital, en concreto en la calle Leonora, situada en el Puerto de la Torre. Sobre las 6.45 el empleado de Limasa, de 56 años, se dirigía a su puesto de trabajo cuando el acusado le pidió ayuda para mover su vehículo que estaba averiado.
Según el fiscal, el operario le dijo al conductor que no podía detenerse porque iba a trabajar, por lo que el conductor se molestó y comenzó a insultarle. Cuarenta y cinco minutos más tarde, el procesado, que ya iba conduciendo, volvió a encontrarse con la víctima, que se encontraba en ese momento trabajando en las tareas de limpieza de la calle, y estaba de espaldas.
«Como represalia por no haberle prestado la ayuda y con el propósito de acabar con su vida», asegura el Ministerio Público, el procesado lo atropelló «de forma intencionada». Acto seguido paró el coche, se bajó y con una barra de hierro de considerables dimensiones supuestamente comenzó a golpear en la cabeza al trabajador, que estaba en el suelo conmocionado por el atropello previo. Luego, el acusado huyó del lugar.
Detenido en su domicilio
Agentes de la Policía Local se personaron en el lugar de los hechos y dieron aviso al Servicio de Emergencias Sanitarias 061, que trasladó a la víctima al Hospital Clínico Universitario, donde quedó ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Tras investigar los hechos, los funcionarios localizaron el vehículo implicado, que en esos momentos era conducido por un familiar del presunto autor del atropello y la posterior agresión. Este fue encontrado en su domicilio, donde fue detenido. Tras pasar a disposición judicial, el conductor, que carece de antecedentes penales, ingresó en prisión.
Debido al atropello, la víctima sufrió traumatismo torácico y, por la agresión con la barra, traumatismo craneal y fracturas, lesiones de las que tardó en curar 270 días. Las graves heridas le han dejado al trabajador varias secuelas en cuanto a movilidad y perjuicio estético.
Para el fiscal, los hechos constituyen un delito de asesinato en grado de tentativa, por el que solicita, además de los 11 años de prisión, la prohibición de acercarse a la víctima en un radio de 500 metros y de comunicarse con ella durante 12 años. Además, pide que el acusado pague como indemnización al trabajador 10.000 euros por las secuelas físicas y más de 16.000 euros por los días de curación.
No es la primera vez que operarios de Limasa son objeto de una agresión. En febrero de este año un grupo de vecinos de la barriada de La Palma se enfrentaron con los empleados del servicio municipal de limpieza impidiéndoles realizar su trabajo. Los operarios llegaron a encerrarse en los locales de la empresa como medida de protesta. La policía tuvo que escoltar al camión de recogida de basuras a su paso por esta barriada ante las amenazas y el apedreamiento de que fueron objeto los operarios.
PD. A ese trabajor lo saludaba a diario en una zona del Puerto de la Torre, espero que no le quede mucha secuelas
http://www.diariosur.es/20091104/malaga/piden-once-anos-para-20091104.html
Era temprano, cerca de la siete de la mañana, cuando se dirigía a su puesto de trabajo en la empresa municipal de limpieza Limasa. Un hombre le pidió ayuda para mover su vehículo que estaba averiado, pero se la negó. Le explicó que no podía detenerse porque se dirigía al trabajo. El conductor,
contrariado y molesto por la negativa del trabajador, comenzó a insultarle. Minutos después volvió a encontrarse con el operario y en represalia lo atropelló presuntamente de forma intencionada y luego le propinó varios golpes con una barra de hierro. El agresor huyó y dejó a la víctima malherida en el suelo.
El supuesto autor de la agresión se enfrenta ahora a una importante condena. La Fiscalía le acusa de un delito de intento de asesinato y pide que se le imponga una pena de once años de cárcel. El juicio se celebrará próximamente en la Audiencia Provincial.
El suceso ocurrió el 26 de julio de 2008 en la capital, en concreto en la calle Leonora, situada en el Puerto de la Torre. Sobre las 6.45 el empleado de Limasa, de 56 años, se dirigía a su puesto de trabajo cuando el acusado le pidió ayuda para mover su vehículo que estaba averiado.
Según el fiscal, el operario le dijo al conductor que no podía detenerse porque iba a trabajar, por lo que el conductor se molestó y comenzó a insultarle. Cuarenta y cinco minutos más tarde, el procesado, que ya iba conduciendo, volvió a encontrarse con la víctima, que se encontraba en ese momento trabajando en las tareas de limpieza de la calle, y estaba de espaldas.
«Como represalia por no haberle prestado la ayuda y con el propósito de acabar con su vida», asegura el Ministerio Público, el procesado lo atropelló «de forma intencionada». Acto seguido paró el coche, se bajó y con una barra de hierro de considerables dimensiones supuestamente comenzó a golpear en la cabeza al trabajador, que estaba en el suelo conmocionado por el atropello previo. Luego, el acusado huyó del lugar.
Detenido en su domicilio
Agentes de la Policía Local se personaron en el lugar de los hechos y dieron aviso al Servicio de Emergencias Sanitarias 061, que trasladó a la víctima al Hospital Clínico Universitario, donde quedó ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Tras investigar los hechos, los funcionarios localizaron el vehículo implicado, que en esos momentos era conducido por un familiar del presunto autor del atropello y la posterior agresión. Este fue encontrado en su domicilio, donde fue detenido. Tras pasar a disposición judicial, el conductor, que carece de antecedentes penales, ingresó en prisión.
Debido al atropello, la víctima sufrió traumatismo torácico y, por la agresión con la barra, traumatismo craneal y fracturas, lesiones de las que tardó en curar 270 días. Las graves heridas le han dejado al trabajador varias secuelas en cuanto a movilidad y perjuicio estético.
Para el fiscal, los hechos constituyen un delito de asesinato en grado de tentativa, por el que solicita, además de los 11 años de prisión, la prohibición de acercarse a la víctima en un radio de 500 metros y de comunicarse con ella durante 12 años. Además, pide que el acusado pague como indemnización al trabajador 10.000 euros por las secuelas físicas y más de 16.000 euros por los días de curación.
No es la primera vez que operarios de Limasa son objeto de una agresión. En febrero de este año un grupo de vecinos de la barriada de La Palma se enfrentaron con los empleados del servicio municipal de limpieza impidiéndoles realizar su trabajo. Los operarios llegaron a encerrarse en los locales de la empresa como medida de protesta. La policía tuvo que escoltar al camión de recogida de basuras a su paso por esta barriada ante las amenazas y el apedreamiento de que fueron objeto los operarios.
PD. A ese trabajor lo saludaba a diario en una zona del Puerto de la Torre, espero que no le quede mucha secuelas
http://www.diariosur.es/20091104/malaga/piden-once-anos-para-20091104.html