Manuel Pellegrini empieza su etapa en el Málaga con un difícil objetivo: ajustar el equipo a los objetivos requeridos por los dueños. Para ello, el chileno cuenta con un equipo un tanto desordenado, desarmado y donde tendrá que trabajar bastante para romper la racha de resultados negativos y la de goles encajados, y una plantilla justa de efectivos en según que posiciones no parecen los mejores mimbres para el técnico sudamericano.
Con la palabra de la directiva de que tendrá hasta cinco refuerzos en invierno, se debe suponer que el entrenador contará con un mínimo de dos meses de confianza, pero hasta entonces necesitará apoyarse en la plantilla que Jesualdo Ferreira hiciese en verano, una plantilla con un importante déficit en el centro del campo y con una necesidad imperiosa de orden defensivo y un seguro cambio de sistema que puede hacer que el Málaga vuelva al ya sabido 4-4-2, aunque este sistema puede hacer que se note más aún la carencia de jugadores en el centro del campo.
En la portería, Pellegrini tendrá las cosas algo más fáciles, con Rubén asentado durante los partidos que jugó, el técnico chileno únicamente tendrá que escoger entre Arnau o Galatto para los partidos ante Hércules, Levante y Español (si es él quien dirige al equipo.
En la defensa es donde pueden empezar a llegar los cambios, con los números tan nefastos que arrastra el Málaga puede que el entrenador comience la criba desde atrás, donde tan solo el central Kris Stadsgaard se salva de las malas actuaciones de los últimos partidos, aunque es dudoso que cambie al resto de zagueros, posiblemente esta línea se vea alterada, Manolo y Malagueño son los principales recambios que vienen pisando fuerte, puede tener una segunda oportunidad el lateral Manu Torres, sentenciado por Jesualdo tras su monumental error y mal partido en Pamplona. La principal tarea de Pellegrini más que cambiar jugadores es ajustarlos mejor y juntar líneas, hay que recordar que salvo Kris, los otros tres defensas son los mismos defensas del año pasado, cuando el Málaga no llegó a perder ningún partido por más de dos goles y acabando la Liga siendo el sexto equipo que menos goles encajó en el cómputo global de la competición.
En el centro del campo es donde el entrenador tendrá sus mayores dolores de cabeza y es que la plantilla del Málaga cuenta con 7 mediocentros, (contando a Eliseu) entre los que está Duda, que hasta dentro de dos o tres semanas no estará apto para jugar, con ello, Pellegrini tendrá que jugar con bandas abiertas, algo que no es del todo del agrado del chileno, si no quiere hacerlo puede optar por jugar con Juanito y Fernando, señalados por la afición, o Apoño y Sandro Silva en doble pivote, sin descartar la entrada en escena del canterano Edu Ramos, cuya subida al primer equipo parece a día de hoy algo prematura pero que no achanta al joven canterano que está deseoso por hacerse un hueco en el equipo, siendo uno de los más competentes en el partido contra la Real Sociedad. Otra de las opciones puede ser incluir a Quincy en banda, y es que en el más que posible cambio de sistema, será difícil encontrar asentamiento en un mismo once a los tres delanteros que habitualmente empleaba Jesualdo, algo que es puede ser factible si los inluye en las bandas a la espera de jugadores del agrado del nuevo entrenador.
Arriba, Manuel Pellegrini tendrá donde elegir, y es que se espera que el chileno siga fiel a su filosofía y apueste por solo dos delanteros, lo que mandaría al banquillo a alguno d elos integrantes de la delantera o a la banda, según los ajustes que decida el ex-técnico del Real Madrid. Hay que decir que Manuel Pellegrini es un hombre al que le gusta los delanteros técnicos y fuertes por encima de los veloces, lo que puede hacer ganar enteros a Seba Fernández, que hasta ahora parecía el suplente de Quincy, Eliseu y Rondón, probablemente el venezolano sea la pareja de ataque preferida por delante incluso de los ya nombrados Quincy y Eliseu, algo que posicionaría muy bien también a Juanmi e incluso a Portillo. Esta última cualidad destacada del que fuese entrenador del Villarreal, la de primar la técnica a la velocidad, ha sido factor predominante en sus equipos, algo reacio a extremos rápidos y más fiel a interiores desbordantes. Además Pellegrini tiene en Chile y sobre todo en Argentina fama de ser un entrenador que prima mucho el aspecto defensivo, quizá demasiado, algo que no estará de más en este Málaga tan frágil atrás, esta característica le trajo al chileno muchos problemas en River Plate, aunque sus experiencias en Villarreal y Madrid no confirmen esta teoría, en el caso de su etapa en el club amarillo si es cierto que destacaba por su gran equilibrio, equilibrio que inluía una capacidad defensiva considerable.
Llega a Málaga un gran entrenador, un entrenador que va a necesitar tiempo y apoyo de la afición, pero sin duda, un grandísimo profesional. Suerte Pellegrini, tu suerte es la nuestra.
Fuente: Sentimiento Bokerón