Interesándose uno por la fragilidad de los jugadores del Málaga, busca y rebusca datos y encuentra estadísticas nada halagüeñas, es más, estadísticas que hacen incluso cuestionarse la eficacia y profesionalidad de los servicios médicos del Málaga C.F. Si además uno pregunta a periodistas veteranos o afcionados de interés en este asunto, se obtiene la misma respuesta: "No merece la pena hablar de los servicios médicos, eso en el Málaga es incriticable y poco menos que un tema tabú".
Sin embargo, un servidor no se fía de la palabra simplemente de periodistas o aficionados y decide ahondar un poco más, y es comprobable el negro historial médico del Málaga: plazos que casi nunca se cumplen, recaídas injustificantes, inadvertencia de alguna lesión de poca entidad... Históricamente y por coger algunos de los casos más reseñables, hemos rescatado tres muy claras, la primera de ellas y posiblemente la más sonada, la de Romero, una lesión aparatosa que a pesar de ser muy delicada fue más allá y se convirtió en un auténtico calvario para el uruguayo, los servicios médicos fueron criticados en aquel entonces, y es que lesiones como la de El Gato se han dado muchas veces en el fútbol español y pocas veces en el Málaga, y para una que se dio el resultado no pudo ser peor. Otro ejemplo son las contínuas recaídas de Edgar, el portugués tenía molestias cada tres semanas, algo impropio de una lesión bien tratada, y sin embargo, en su segunda etapa en el club esto fue su pan de cada día. Otro ejemplo podría ser el jugador Pato, que lesionado en el conjunto blanquiazul no se consiguió ue se recuperase de una simple rotura fibrilar, estuvo más de cuatro meses de baja por esa lesión común en un futbolista, lesión que al cambiar de club, desapareció de su parte médico. Posiblemente el caso más escandaloso pudiese haber sido el del canterano Calderón, que aquejado de molestias y dolores en la rodilla, los servicios médicos del Málaga no peudieron detectarle la lesión de menisco que un médico de cabecera le tuvo que tratar, no volvió a tener problemas en el Jaén.
Mirando a la actualidad, el portugués Duda ultima su recuperación, que sin explicación pasó de un margen de dos meses a cerca de tres y medio por su lesión de pubis (si volvemos la vista atrás, Valcarce se perdió casi medio año por la misma lesión, lesión susturable en un plazo de 1 a 4 meses según su gravedad). Por seguir con la cuenta, esta semana pasada hemos vivido un nuevo episodio de la extraña manera de proceder de los servicios médicos, Rondón estaba lesionado en el cuádriceps de su pierna derecha el jueves, los servicios médicos del club le examinaron y decidieron que podría entrenar el viernes para ver si evolucionaba o no, el resultado fue que Rondón entrenó y ahora tiene para tres semanas, es bastante impropio de un médico que ante la existencia de un riesgo se exponga al jugador a él, sin embargo esto no es más que un "suma y sigue" en el parte médico del Málaga.
En la medicina, como en cualquier aspecto de la vida, el error es algo puntual que e sposible que se de, sin embargo lo ya contado, unido a las tropecientas recaídas de Apoño, a las molestias contínuas de jugadores que "han salido de lesiones" y a la en general mala salud del equipo en este sentido, hace que algunos apuntemos a los servicios médicos como un elemento a sustituir dentro del club, unos servicios médicos integrados por malaguistas, pero a veces eso pasa a un segundo plano y prima más la categoría de este servicio. Para acabar les lanzo una pregunta, ¿cuándo fue la última vez que vieron la enfermería del Málaga vacía?. Seguiremos informando.
Fuente: Sentimiento Bokerón