Pasa revista Jesualdo Ferreira. Sabe que las cosas no marchan como esperaba y deseaba. Tiene deudas pendientes: "Le debemos victorias a La Rosaleda". Lo dice porque la afición está a muerte con el equipo y les despide con aplausos a pesar de las cuatro derrotas en casa: "El público está espectacular y todos en el equipo estamos muy agradecidos por ello. Pero nuestro público es latino, esto no es Inglaterra. Si aplauden es porque saben que los jugadores lo dan todo". Para devolver todo ese calor urgen victorias. Triunfos que sólo llegarán con una mejora sustancial. Ferreira admite algunos de los problemas de su Málaga: "No me ha defraudado nadie. No han tenido tiempo. Llevamos siete jornadas... Es verdad que necesito más agresividad. En el centro del campo y en todas las líneas. Pero creo en este grupo, claro".

"En mi carrera, la base de mis equipos es que defendían muy bien y les hacían pocos goles", prosiguió Ferreira, que añadió: "Nos falta agresividad e intensidad en defensa. Hay que obligar a los jugadores a aumentar sus capacidades individuales".

Ferreira no cree, de cualquier modo, que lo visto en estas siete jornadas sea significativo: "Tenemos 31 jornadas más para hacer el análisis. Nada me hace pensar que no se pueda quedar entre los diez primeros. Creo que el problema es más mental que de sistema. Seremos más fuertes cuando estemos más seguros atrás". Y para reforzar sus teorías, habla de cosas concretas: "Ante el Madrid cambié por las bajas que tenía. También para tapar la salida del Madrid por la izquierda. ¿Sandro Silva? Vino de Brasil, con una sobrecarga de trabajo muy grande. Se ha resentido en el aspecto deportivo, familiar, emocional...". Pero hay dos cosas en las que se moja poco. Fichajes y Mourinho. "Mou y yo nos deseamos suerte para nuestros equipos. Como hacen dos amigos y ya está. De fichajes no hablo. Tengo que decir que estoy contento con lo que tengo en mi plantilla y que son los mejores".