Hoy habrá una reunión entre el vicepresidente y el ex presidente, en la que darán carpetazo al ´asunto Al Sahoud´, estudiarán cómo queda el consejo, y el consejero delegado atribuirá de más funciones al madrileño, que ha estado en un segundo plano
El nuevo director general del Málaga CF, José María Fernández Mochón, ha propiciado un acercamiento entre el actual vicepresidente, Abdullah Ghubn y el ex presidente, Fernando Sanz, que ayer acudió a La Rosaleda a ponerse a disposición para una jornada ajetreada en materia de fichajes y salidas de jugadores, y que fue la antesala de la reunión que llevarán a cabo hoy.
En esta cita habrá numerosos temas pendientes. A lo largo de las últimas semanas, Fernando Sanz ha estado relegado a un segundo plano, en gran parte porque ha preferido mantenerse al margen en numerosas decisiones que afectaron al futuro del club.
No obstante, la decisión de Ghubn, hombre de confianza del jeque qatarí, de situar a Mochón de nuevo en el cargo de director general, en detrimento de Yasmín Al Sahoud, ha dado más fuerza a la futura vinculación de Sanz con la entidad de Martiricos.
Desde la adquisición de las acciones por parte de Abdullah Bin Nasser Al Thani, Sanz ha pasado prácticamente inadvertido. El protagonismo en cada uno de los fichajes y de otras cuestiones de relevancia ha correspondido a Abdullah Ghubn y, en menor medida, a Al Sahoud.
Cuestión de fidelidad
El vicepresidente dará hoy carpetazo al ´asunto Yasmín Al Sahoud´, estudiará la composición del nuevo consejo de administración, con la continuidad de Taysir Al Sahoud –padre de Yasmín– en el aire, y atribuirá de más funciones a Fernando Sanz, quien en su día apostó por Mochón, que ayer corroboró la fidelidad que le tiene.
«Tengo muy claro que Fernando (Sanz) es patrimonio de la entidad en muchos aspectos, y una persona muy útil, que conoce el fútbol perfectamente y lo domina. Es un lujo prescindir de talentos, poderes o capacidades de determinada persona», indicó ayer en alusión a Fernando Sanz en el programa ´La Jugada´ de Canal Sur Radio.
Aunque no hay información oficial al respecto, a partir de ahora Sanz podría encargarse de representar al Málaga CF en las reuniones tanto con la Liga de Fútbol Profesional (LFP) como con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), algo que ya hacía como miembro de su junta directiva. Todo ello, al margen de su cargo de asesor de la presidencia y de la vicepresidencia.
Aunque tenga menor peso específico en la entidad de Martiricos a raíz de haber vendido sus acciones y las de su esposa, Ingrid Asensio, a Abdullah Bin Nasser Al Thani, a partir de ahora vuelve a tener mayor protagonismo. Su rol había dado un giro de 180 grados, pero desde ahora será menor. Su vasto conocimiento acerca del club será tenido más en cuenta, aunque, como es obvio, la capacidad de decisión obrará en poder de Abdullah Ghubn, que tiene por parte del jeque qatarí la potestad de ejecución en todo tipo de asuntos malaguistas.
Mochón también hizo referencia ayer al hecho de que no existe preocupación en el club albiceleste por las recientes declaraciones de Yasmín Al Sahoud en relación a la viabilidad económica de la entidad malaguista.
Y es que a Daniel Pastor, que es el encargado de supervisar la gestión del convenio de acreedores tras el procedimiento concursal, se le ha visto últimamente en La Rosaleda en repetidas ocasiones, cuando asimismo había abandonado la Fundación desde que el Málaga CF cuenta con nuevo propietario. Ghubn ya señaló anteayer que hay liquidez.
Fernando Sanz, el pasado sábado, en el palco junto a Abdullah Ghubn y José María Fernández Mochón.
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