NOVEAS EL COTE INGLES ANEGADO.

Seguimos en alerta naranja

Aqui diluviando otra vez

Esta mañana me fui un rato a ver el estado de la playa.

Le ha dado por llover los fines de semana, de lunes a viernes hará sol

Joder. Como está la playa

Las imágenes son impresionantes

Ya parece que nos abandonan las lluvias de momento. Y se está despejando. Incluso las calles ya están secas.

El sábado y domingo parece que lloverá nuevamente

Las presas están al 88% - Recogidos más de150 litros de lluvia por metro cuadrado en el entorno de la capital

Miguel Ferrary Los embalses de la provincia han recibido en dos días 40,6 hectómetros de agua, lo que ha elevado al 88% de su capacidad sus reservas actuales y se han empezado a programar el desembalse puntual en Casasola y La Concepción en previsión de recibir nuevas lluvias. La espectacular cifra de agua recogida por los embalses malagueños es casi el equivalente al gasto de agua en la provincia en los meses de julio y agosto, precisamente cuando se producen los consumos más altos en Málaga por la afluencia de turistas, con cerca de 50 hectómetros en dos meses.

Sólo con estos dos días de lluvia, Málaga aseguraría su suministro de agua para todo 2013 y parte de 2014, aunque ya contaba con sus reservas recuperadas con las lluvias recibidas desde mediados de septiembre, que además han asegurado que se hayan recuperados las reservas de agua subterráneas en diversos puntos. De hecho, el pasado octubre la lluvia recibida en Málaga aumentó un 260% con respecto al mismo periodo de 2011.

El delegado provincial del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, que aportó los datos de recogida de agua de los pantanos de la provincia, apuntó que todavía se están recibiendo escorrentías de las lluvias del pasado sábado, por lo que no descarta que se sigan incrementando las reservas de agua a lo largo de esta semana.

Precisamente, y en previsión de que haya más lluvias en las próximas semanas, las presas de Casasola y La Concepción, que han alcanzado su máximo nivel de llenado, están aliviando agua de manera controlada para dejar espacio a nuevos aportes de agua.

En los próximos días y en función de la evolución por la llegada de escorrentías, esta operación podría llevarse a cabo en otras presas para garantizar un nivel de seguridad mínimo en caso de que vuelvan a producirse lluvias tan intensas como las vividas este fin de semana.

El delegado del Gobierno andaluz en Málaga destacó el impacto positivo de la red de embalses de la provincia, por un lado por las amplias reservas de agua con las que cuenta, pero también por evitar las avenidas de agua y que se produzcan daños más importantes en los arroyos.

La importancia de las lluvias caídas en la provincia ha superado las marcas de los últimos años, llegando a los 187,2 litros por metro cuadrado en el punto de recogida pluviométrica de la Red Hidrosur en Santón Pitar (Montes de Málaga), entre el sábado a las 7.00 horas de la mañana y el domingo a las 18.00 horas. Este es el punto con mayores índices de recogida de agua, seguido Benamargosa (161,8), El Atabal (157,2) y Casasola (133,4). De estos cuatro puntos, tres están en el entorno de la capital malagueña.

La capacidad de respuesta de una ciudad ante una tromba de agua es imprevisible, pero sobre lo que deben caber dudas es de la importancia de acometer con antelación las actuaciones necesarias en materia de infraestructuras para evitar males mayores. En el caso de Málaga, los 112 litros por metro cuadrado que cayeron en apenas tres horas y media sacaron a flote sus principales carencias, resumidas en la necesidad de tener a punto los arroyos (tanto en limpieza como en ampliar la capacidad de drenaje de los embovedados) para minimizar el riesgo de desbordamiento y en las deficiencias que presenta la red de alcantarillado, que no está dimensionada para evacuar con garantías cuando las nubes aprietan más de lo habitual. Y eso que la capital está bastante mejor preparada que en las inundaciones de 1989.
La primera solución exige la implicación de la Junta a la hora de retirar la vegetación de los cauces y la permanente vigilancia del Ayuntamiento para hacer lo propio con los residuos urbanos; la segunda, obviamente, por la ampliación de la capacidad de absorción de las tuberías, lo que requiere una macroinversión que, solo en el polígono Guadalhorce y el resto de áreas industriales de su entorno, rondaría los 60 millones de euros, según el Consistorio.
Pero hay otros puntos negros, que se reparten fundamentalmente por el Centro y Carretera de Cádiz, como quedó patente el sábado con grandes avenidas convertidas en ríos que anegaron inmuebles e hicieron imposible la circulación. Un mal endémico que se extiende por las zonas más antiguas de la ciudad, en donde las aguas fecales y las pluviales comparten tuberías, y que no se da en las urbanizaciones más recientes porque desde hace años se están instalando redes independientes.
La posibilidad de separar las conducciones ni siquiera se la plantean en el Ayuntamiento por el elevado coste que conllevaría levantar la ciudad para crear dos redes paralelas bajo tierra, pero en lo que si que llevan dos meses trabajando técnicos de la Empresa Municipal de Aguas (Emasa) y de la Gerencia de Urbanismo es en un proyecto que permita canalizar el agua de lluvia para distribuirla hacia los ríos y arroyos de forma que viertan directamente al mar en vez de sobrecargar la red de saneamiento. De momento, aún está en fase de estudio -el informe definitivo podría estar listo en el primer semestre del próximo año-, pero ésta es la solución que se antoja más factible para el Centro y otras zonas bajas de la capital como la confluencia de la avenida Juan XXIII con Héroe de Sostoa -que también quedó anegada al igual que la calle Hilera y aledañas-, ya que estos colectores distribuirían el agua hacia distintas salidas para que no confluyan todas en un mismo punto.
Otra opción que se ha barajado es la construcción de estanques de tormentas como los de Madrid o Barcelona, que son depósitos subterráneos que recogen el agua en caso de fuertes precipitaciones a través de distintos colectores. Sin embargo, su capacidad sería limitada por lo que sus ventajas no compensarían la importante inversión que, en la Ciudad Condal, contó con dinero de los gobiernos central y autonómico.
Riesgo en el Guadalhorce
Más avanzados están los planes para evitar que los accesos a los polígonos Guadalhorce, Santa Teresa y Santa Cruz queden impracticables cada vez que llueve con intensidad. El Ayuntamiento tiene listo el proyecto desde hace un año, pero permanece en el cajón porque su presupuesto superaría los 60 millones de euros. En este caso, a la insuficiencia de las alcantarillas se une el hecho de que el área industrial se encuentra enclavado en la zona más peligrosas de inundaciones, la cuenca del Guadalhorce, con puntos incluso por debajo del nivel del mar.
Mientras tanto, los dos grupos de la oposición han aprovechado para reclamar al equipo de gobierno que adopte medidas para corregir estas deficiencias en el alcantarillado. El PSOE lo hizo el mismo sábado pidiendo un plan de acción que ponga fin a la fragilidad de la red, mientras que IU solicitó ayer la reforma del sistema de saneamiento, además de un diagnóstico del estado de los arroyos.

El mal tiempo nos dará una tregua. Eso sí, los paraguas no permanecerán demasiado encerrados en casa. Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la semana comenzará con cielos despejados en la provincia, un azul que solo quedará empañado con pequeños bancos de nubes a lo largo de la jornada. Para hoy, Aemet prevé que la probabilidad de lluvia se reduzca a un insignificante 5%, un porcentaje que se mantendrá a lo largo de mañana, cuando se espera que el sol regrese con fuerza a las calles de la capital para alivio de muchos. Eso sí, habrá que sacar los abrigos, pues el pronóstico apunta a una bajada de temperaturas, que oscilarán entre los 10 grados de mínima y los 19 de máxima en Málaga.
A partir del miércoles la situación se complica con cielos bastante nubosos y una posibilidad de precipitaciones que se eleva hasta el 30% y que el jueves seguirá al alza hasta llegar al 40%. No obstante, no será hasta final de semana, el viernes, cuando puedan llegar de nuevo las lluvias. Para ese día, Aemet prevé la entrada de un nuevo frente que, aunque no tendrá nada que ver con el de estos últimos días, como matizan desde su centro provincial, sí que dejará más agua con una probabilidad del 65%.

El próximo rival del Unicaja en la ACB, el Caja Laboral, estrenará técnico ante el conjunto malagueño. Su presidente , Josean Querejeta, anunció ayer la decisión de prescindir de Dusko Ivanovic tras la derrota ante el Blusens. La «mala imagen» de un equipo que juega «cada día peor» y unos jugadores «estresados» han sido la razones para llevar a cabo el relevo tras la tercera derrota, según Querejeta. Pesic, Spahija e incluso Obradovic eran algunos de los técnicos que ayer por la noche se vinculaban al conjunto vasco. Lo que sí está claro es que en la próxima jornada no se podrá disfrutar del duelo Ivanovic-Repesa, dos de los técnicos más firmes de la Liga.

ya ha salido el sol, de momento

Pues si crack, aguantará segun dicen hasta el fin de semana, veremos....

Bok1977 escribió:El próximo rival del Unicaja en la ACB, el Caja Laboral, estrenará técnico ante el conjunto malagueño. Su presidente , Josean Querejeta, anunció ayer la decisión de prescindir de Dusko Ivanovic tras la derrota ante el Blusens. La «mala imagen» de un equipo que juega «cada día peor» y unos jugadores «estresados» han sido la razones para llevar a cabo el relevo tras la tercera derrota, según Querejeta. Pesic, Spahija e incluso Obradovic eran algunos de los técnicos que ayer por la noche se vinculaban al conjunto vasco. Lo que sí está claro es que en la próxima jornada no se podrá disfrutar del duelo Ivanovic-Repesa, dos de los técnicos más firmes de la Liga.

Tormenta en Vitoria!!!

sa equivocado el bok, lo tenia que aver puesto en el post CB.UNICAJA DE MALAGA no aqui

Perdonádme compañeros me he equivocado de post como habéis podido ver.......

qeda perdonao

La monumental tromba de agua que cayó el pasado sábado sobre Málaga capital sólo tiene varios precedentes desde que hay estadísticas meteorológicas y el último fue el fatídico mes de noviembre de 1989, cuando la ciudad sufrió una de las peores inundaciones de su historia. Durante aquel mes de hace 23 años, se recogieron 497 litros por metro cuadrado, el récord absoluto nunca antes alcanzado y casi la misma cantidad que suele ser normal en un año entero. Desde entonces y hasta este año, y a falta de diez todavía para que termine el mes, ninguno se ha aproximado a esa escalofriante cifra y ya son 209 litros por metro cuadrado los caídos en la ciudad.

Hasta ahora el actual mes de noviembre es el sexto más lluvioso de toda la serie estadística desde 1942, según los datos captados por la estación meteorológica del aeropuerto malagueño que se toma como referencia para el conjunto de la provincia. Todos los años anteriores en los que se ha superado esa cantidad son anteriores a 1989 y eso que en el aeródromo apenas cayeron 36 litros por metro cuadrado el pasado sábado frente a las cantidades astronómicas que se recogieron en otros puntos de la ciudad, como los 112 litros por metro cuadrado registrados en la zona de El Atabal o los 106 del puerto de Málaga.

Lo más significativo y lo que más daño provocó fue precisamente la intensidad con la que llovió en tan poco tiempo, como los 56 litros por metro cuadrado caídos en sólo una hora en El Atabal, los 55 de los Montes, los 38 del Limonero o los 34 de la zona este. En dos horas las cantidades de lluvia contabilizadas en la capital oscilaban entre los 53 y los 70 litros por metro cuadrado según las zonas, y sólo una hora más tarde ya se acumulaban casi cien litros por metro cuadrado en numerosos puntos.

Pero ¿qué provocó la intensidad de la fuerte tormenta que el sábado descargó toda su furia sobre la capital? El jefe de predicción del Centro Meteorológico de Málaga, Fausto Polvorinos, se debió a una situación "bastante habitual" en esta zona y en esta época del año.

La clave está en que tan sólo unos días antes la circulación general de vientos de ponientes que dominaba provocó la formación de lo que en términos meteorológicos se denomina meandro y que es una especie de onda que hizo que se descolgara una baja aislada el pasado día 14. Esa depresión entró por Portugal y fue desplazándose hacia el este a partir de entonces, explicó el meteorólogo.

La nubosidad y la inestabilidad atmosférica que traía asociada empezó a notarse ya un día antes. Los modelos meteorológicos, según Polvorinos, "son incapaces de predecir dónde y cuándo exactamente puede descargar con más fuerza". Pero lo que hizo que el fenómeno se fortaleciera en Málaga capital fue la convergencia de vientos que encontró la baja aislada. Es decir, vientos de poniente en las capas altas de la atmósfera y vientos de levante en superficie que favorecieron que la nubosidad se desarrollara más que en otros lugares y se produjeran intensas precipitaciones convectivas o tormentosas que dejaron más de 400 rayos entre las 7:00 de la mañana y las 13:00 de esa tarde, a lo que contribuyó además la acusada orografía que rodea a la capital.

No con tanta intensidad, pero lo ocurrido el sábado se ha convertido en casi la tónica habitual de un otoño que va camino de batir más récord por la cantidad de precipitaciones. Ya septiembre y octubre de este año están considerados como muy húmedos. En el primer caso porque cayeron 61 litros por metro cuadrado cuando la precipitación media normal es de apenas 15 litros por metro cuadrado en ese mes, mientras que en octubre pese a que solamente llovió unos cuantos días se consiguió superar con creces el promedio histórico de 56,5 litros por metro cuadrado del aeropuerto, al haberse recogido 118 litros. Es decir, sólo con el agua caída en esos dos meses, ya se habían logrado acumular 179 litros por metro cuadrado

La combinación de los tres meses, es decir, septiembre, octubre y noviembre es ya significativa. Desde el 1 de septiembre se han recogido 388 litros por metro cuadrado en Málaga y es hasta la fecha el quinto año agrícola más lluvioso desde 1942, muy lejos de los 646 litros que ya habían caído por estas fechas en 1989. La cifra sí es llamativa si se compara con los 539 litros de media que suelen caer durante todo un año normal.

El número podría variar ya que entre el miércoles y el jueves se espera que vuelva a llover, si bien ya no se espera que lo haga con tanta intensidad ni de forma generalizada en la provincia de Málaga.

A partir de mañana llegarán las nubes

Sì, por que hoy esta el dia entre sol y nube.

Parece que lloverá lunes,martes y miércoles

Pues hoy ha estado medio nublao.

mañana parece que si lloverá