La final de Roma hoy ya que se aplazó por la lluvia

Ahora mismo está jugando Nadal contra Djokovic final del torneo de Roma

El primer set para Nadal por 7-5

Grande Rafa, a ver si gana nuevamente este torneo

Nadal ganador del Torneo de Roma

La evocación resulta irresistible. Es una escena de Gladiator (la película preferida de un tal Rafael Nadal). Es en los sótanos del Circo Máximo, junto al ruedo de arena roja: tan cerca de la arena roja del Foro Itálico. Russell Crowe, Máximo, el gran gladiador, el gran guerrero, confronta a su amo, Próximo, el fenomenal y ya difunto actor Oliver Reed. Máximo-Crowe promete a Próximo-Reed que matará al Emperador Cómodo. Le lanza: "No confías en nadie, pero puedes confiar en mí: mataré a Cómodo". Sarcasmo de Próximo: "¿Por qué iba a querer que mataras a Cómodo, si me hace rico? Yo soy un hombre del espectáculo. Tu mundo son sombras y ceniza".

La tierra. Y tan cerca del Circo Máximo o Coliseo, en la tierra roja y batida del Foro, Rafa Nadal, el gladiador supremo, despachó a ese tirano, Novak Djokovic, que puede ser duro como un emperador déspota y tan histriónico o showman como un hombre del espectáculo.

Rafa sumergió al hombre del espectáculo, el camaleónico serbio, en un mundo descarnado: el resto de Nadal redujo a cenizas el segundo servicio de Novak, que sólo ganó ahí un 37% de puntos. La defensa de Nadal era salvaje: así que Djokovic escogió no arriesgar su fino revés paralelo... porque le volvían casi todos los golpes de riesgo. Y, tras tiroteos mortales para cualquier otro no llamado Nadal, Novak, con la pista achicada, fallaba remates fáciles: total, 41 errores no forzados.

Con 5-4 para Djokovic en el primer set y 30-30 bajo saque de Nadal, un línea cantó mala una bola buena de Djokovic. Se corrigió y se repitió el punto... que ganó Rafa. Ahí derrapó el equilibrio mental de Novak: el showman sufría ante el muro y reventó su raqueta contra un poste. Y ahí, Nadal, el muro ambulante, selló entre orgullo y recuperaciones imposibles un parcial de 5-0 que volcó la final: 7-5, 2-0. Una doble falta del abrumado Djokovic selló el 7-5 y 6-3, el título Masters número 21 para Rafa, que recobra el número dos del mundo cuando llega Roland Garros: sombras y ceniza para Novak Djokovic.

El número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, consideró hoy tras su derrota en la final en el Masters 1.000 de Roma ante Rafael Nadal, que el español "no jugó sumamente bien", mientras que él cometió "muchos errores".

"En mi opinión él no ha jugado sumamente bien y yo he cometido, además, muchos errores", declaró Djokovic durante la rueda de prensa posterior al encuentro, que se decidió a favor de Nadal por 7-5 y 6-3.

Con todo, se mostró satisfecho con el juego que ha exhibido durante su participación en el torneo romano y aseguró que irá a Paris con un "buen nivel de confianza".

"He tenido muchas oportunidades pero ante un jugador como Rafa, el mejor en tierra de todos los tiempos, cuando no aprovechas las oportunidades, él toma el control del partido. Eso ha sido lo que ha sucedido al final del primer set. Después he cometido muchos errores, pero creo que en general, durante toda la semana, he jugado muy bien, especialmente las últimos tres partidos antes de París y esto me hace feliz", manifestó el serbio.

Manifestó que Nadal es el favorito contra cualquiera cuando juega sobre tierra, aunque recordó que él le ganó el año pasado en dos ocasiones, en Madrid y en Roma. "Creo que es el favorito también si juega contra mí. Incluso si le ganara siete veces seguidas, él seguiría siendo el favorito sobre arcilla. Es el mejor jugador del mundo sobre esta superficie y es muy difícil de batir, especialmente en el mejor de cinco (sets)", declaró el tenista de Belgrado en alusión a la próxima cita de Roland Garros.

Explicó que sus dos victorias del año pasado ante Nadal en tierra (en Madrid y en Roma) le dieron "confianza" e "incluso el partido de hoy, que fue bastante igualado".

"Hoy he perdido en dos sets pero sentía que tenía buenas oportunidades para ganar el primero. El partido fue bastante equilibrado. Vamos a París y veremos. Roland Garros dura dos semanas y hay que estar muy concentrado", agregó.

Sobre la nueva rotura de su raqueta al final del primer set, Djokovic señaló que fue un reflejo de sus emociones en la pista: "Demuestro mis emociones buenas y mis emociones malas. Es quien soy, es lo único que puedo decir".

Lamentó que ayer no se pudiera jugar a causa de la lluvia, sobre todo por los espectadores que habían acudido al Foro Itálico, pero recalcó que "no se daban las condiciones" y que existía el riesgo de lesiones.

El español Rafa Nadal dijo hoy que la final del Masters 1.000 de Roma que ganó al serbio Novak Djokovic fue un partido "de muy buen nivel tenístico".

"Ha sido un partido en el que ha habido alternativas, en el que él ha dominado por momentos, en el que yo he dominado por momentos. Creo que ha sido una muy buena final", dijo el español, que tras su victoria de hoy escala del tercer al segundo puesto del ránking ATP.

Nadal valoró así el encuentro de hoy, después de que Djokovic considerara en rueda de prensa que el de Manacor "no había jugado sumamente bien", pero que él había cometido "muchos errores".

El español destacó que hay que "analizar las cosas con perspectiva" y afirmó: "Yo en Australia perdí. Creo que fue una gran final. Yo creo que hoy ha sido una buena final. Es verdad que ha habido momentos en que él ha cometido algún error, pero creo que he aguantado bien en todo momento".

"¿Que habría podido jugar mejor? Sí y no. Las finales son muy complicadas. Yo estoy muy contento de cómo he jugado ésta, de cómo he jugado el torneo y creo que sería de una arrogancia terrible decir que no he jugado bien cuando he ganado el torneo sin perder ningún set", dijo.

A este respecto, aseguró también que no se considera a sí mismo "tan bueno" para poder hacerlo "mucho" mejor.

Nadal subrayó, además, que se va de Roma con una gran satisfacción y con "la felicidad" de haber ganado un torneo "importante" para él, "ante un rival muy complicado" como Djokovic.

Sobre su escalada en el ránking ATP, donde ha reconquistado el número dos tras perderlo en favor del suizo Roger Federer, después de que el helvético se impusiera en el torneo de Madrid, Nadal dijo que se encuentra en una posición "correcta".

"Estoy en la posición correcta en el ránking, soy número dos también en el'Race''", aseveró.

Preguntado por la importancia a nivel psicológico de la victoria de hoy, Nadal señaló que "ganar es importante".

"Cuando pierdes juegas con dudas", comentó el tenista español, quien agregó que la confianza llega cuando se juega "a un buen nivel" y que espera seguir jugando como hasta ahora.

El tenista español Rafa Nadal iniciará la conquista de su séptimo título en Roland Garros, segundo 'grande' de la temporada, contra el italiano Simone Bolelli, tras el sorteo celebrado este viernes, que dejó un camino 'agradable' al balear hacia las semifinales.

Así, el manacorí, segundo cabeza de serie, evitó en su lado del cuadro al suizo Roger Federer, campeón en 2009 y finalista el año pasado, y a otros rivales peligrosos como el checo Tomas Berdych, el argentino Juan Martín del Potro o el francés Jo-Wilfried Tsonga.

El ganador en Montecarlo y Roma, que ostenta un récord de 45-1 en París, con la única derrota ante Robin Soderling hace tres años, ha ganado en sus dos anteriores enfrentamientos contra Bolelli, ambos en pista dura.

En caso de superar este choque, en octavos se podría medir con el canadiense Milos Raonic o el argentino Juan Mónaco, y en cuartos con Nicolás Almagro o el serbio Janko Tipsarevic, por lo que hasta las 'semis', donde podrían estar Andy Murray o David Ferrer, el recorrido es bastante amable.

Por su parte, el de Jávea, otra baza para reinar en la capital francesa, se estrenará ante el eslovaco Lukas Lacko, mientras que Almagro también tendrá rival italiano en la figura de Paolo Lorenzi. Murray debutará ante el japonés Tatsuma Ito, pero en su camino hacia los cuartos está el francés Richard Gasquet, que recientemente le eliminó en el Foro Itálico.

Federer, en el camino de Djokovic

En cuanto a los otros favoritos, Novak Djokovic, que aspira a su primera final de Roland Garros, y Roger Federer, que tendrán un camino más duro por la presencia de otros serios aspirantes a brillar en el segundo 'grande' del año.

El serbio debutará también ante un rival transalpino, Potito Starace, y hacia la penúltima ronda podría tener obstáculos serios como el austriaco Jurgen Melzer, que le dejó fuera en 2010, el español Fernando Verdasco, o el francés Jo-Wilfried Tsonga.

El de Basilea, cinco veces finalista, se estrenará con el alemán Tobias Kamke, pero en segunda ronda podría medirse al argentino David Nalbandián, y en cuartos, Juan Martín del Potro y el checo Tomas Berdych también se vislumbran como los favoritos para estar en esa ronda.

En cuanto al cuadro femenino, la actual campeona, la china Na Li, empezará la defensa del título ante la rumana Sorana Cirstea, y la número uno del ranking, la bielorrusa Victoria Azarenka, debutará con la italiana Alberta Brianti. La rusa Maria Sharapova inicia Roland Garros con Alexandra Cadantu y la estadounidense Serena Williams con la francesa Virginie Razzano.

Además, Anabel Medina Garrigues comenzará con un duelo nacional ante Silvia Soler-Espinosa, María José Martínez con un rival de la previa, la canaria Carla Suárez con Tamarine Tanasugarn, Lourdes Domínguez Lino con Marina Erkovic, y Laura Pous Tio con Chanelle Scheepers.

Los teóricos emparejamientos de cuartos de final de Roland Garros

Novak Djokovic (SEB, 1) - Jo-Wilfried Tsonga (FRA, 5)

Rafael Nadal (ESP, 2) - Janko Tipsarevic (SEB, 8)

Roger Federer (SUI, 3) - Thomas Berdich (CHE, 7)

Andy Murray (GRB, 4) - David Ferrer (ESP, 6).

ya ha comenzado Roland Garros

Alejandro Delmás | 28/05/2012

La portada de L'Équipe magnifica la imagen del abrazo final entre Novak Djokovic y Rafael Nadal, justo tras la reciente final del Foro Itálico, en Roma: Classés historiques es el título. Algo así como 'Clasificados para lo histórico'. Con un matiz: 'Son reclamados para lo imposible'.

Sí que Nadal afronta una misión totalmente imposible hasta ahora, pero claramente a su alcance: el séptimo título en Roland Garros. Y Novak Djokovic mira, en efecto, a otro reto histórico, pero que sí fue posible para el propio Nadal, Federer, Agassi, Emerson, Fred Perry y, por supuesto, Budge y Laver: cerrar el circuito del Grand Slam, firmando el cuarto y último título, ese que el serbio aún no ha alzado en París.
Un sueño.

Djokovic repite: "Roland Garros es mi sueño, mi prioridad". E insiste: "Nadal es el favorito". Dicho esto, y con Federer a la vista en una eventual semifinal, Novak inicia hoy la ruta hacia su particular Grial: a las 14:30 horas ante el italiano Potito Starace (pareja de Flavia Pennetta) y en la inmensa Pista Philippe Chatrier. En octavos podría tocar cruce entre Djokovic y Verdasco, que ayer despachó con solvencia a Darcis y que se decanta así por Nadal: "Si tuviera que apostar por alguien, lo haría por Rafa: por la temporada que viene haciendo". El celestial Roger Federer opaca el destello de Djokovic y va con Nadal: "Rafa es el favorito y antes o después ganará su séptimo Roland Garros". Si lo dice Roger

El fino revés a una mano del italiano Simone Bolelli (Bologna, 1985, 111 del mundo) mide hoy el estreno del campeón de Roland Garros: el campeón es Rafael Nadal Parera, claro, y el detalle del 'fino revés' no es nimio. Bolelli arrancó un set a Nadal sobre la pista ultrarrápida de Rotterdam en una de las dos derrotas que lleva ante Rafa (0-2)... pero es un hecho que los tenistas con revés a una mano lo tienen crudo ante la derecha cruzada y acorazada de Rafa.

A Nadal le resisten esos tipos altos, de 1,90 y con revés a dos manos (Djokovic, Soderling,) que pueden atacar en su zona los adoquines liftados que cruza el golpe diestro de Nadal. Además, Bolelli (1,83) no es un gigante. Eso le añade problemas. Todo comenzará hacia las 15:00 (Cuatro) en el tercer turno de una Philippe Chatrier endurecida y más rápida por el calor de París: en torno a 30 grados.

En la Chatrier, Djokovic invirtió ayer dos horas y cuatro minutos para tumbar a un tipo duro, el también italiano Potito Starace: 7-6 (3), 6-3, 6-1, con primer set de 59 minutos. "Roland Garros se gana en la primera semana; lo hace quien menos se desgasta", dijo cierta vez Andre Agassi. Federer y Djokovic ya hablan de la dureza y rapidez de las pistas. También debaten sobre las rocosas bolas de Roland Garros y apuntan (como Nadal) a que deberían unificarse para toda la temporada de tierra. Mientras, el fino revés de Bolelli se cita hoy con una granizada de adoquines.

Como en una operación militar hacia el corazón de los Internacionales de Francia y de París. Rafael Nadal, David Ferrer y Nicolás Almagro apisonaron a Simone Bolelli, Lukas Lacko y Paolo Lorenzi sin permitir un set a ninguno de los tres rivales. Junto a la Porte D'Auteuil y entre el canto de las chicharras parisinas, Rafa, David y Nico fueron como la punta de lanza de un Tercio de Flandes o de aquella División Lecrerc que reconquistó París en 1944, llena de españoles.

En su pista talismán, la acalorada planicie roja de la Philippe Chatrier, Nadal trituró a Bolelli por 6-2, 6-2 y 6-1 en hora y 58 minutos: justo el mismo tiempo que Ferrer invirtió para laminar al esloveno Lacko: 6-3, 6-4, 6-1. Almagro pasó con 6-3, 7-5 y 6-4 a Lorenzi.

Perdió Serena. Y Serena Williams cayó por primera vez en una ronda inicial de Grand Slam, rota por la francesa Razzano: 4-6, 7-6, 6-3. Williams mandaba por 5-1 en la muerte súbita del segunda set y Razzano dominaba por 5-0 en la manga decisiva, que sólo se solucionó tras el demoledor noveno juego, el último del partido. Todo acabó al octavo match point para Razzano, tres minutos más allá de las tres horas de juego, entre un temblor de los cimientos de la Chatrier similar a un pequeño seísmo.

Mientras, y a cinco días de cumplir 26 años, Rafael Nadal Parera va de récord en récord casi con cada triunfo. El éxito sobre Bolelli le lleva a un balance de 46-1 en Roland Garros, el mejor porcentaje victorioso: Borg cerró en 49-2. Además, Nadal se convierte en el tenista más joven que suma 150 triunfos en Grand Slam.

Mañana, en segunda ronda (hay algún vaticinio de lluvia), Nadal se ocupará de Denis Istomin, el pegador moscovita con pasaporte de Uzbekistán. Ayer, Rafa, de rosa granate, fue recibido en la Chatrier con chillona algarabía 'a la americana': grititos acallados por aplausos. Pronto, a espaldas de Nadal y en el fondo de la presidencia, Ion Tiriac se retrepaba en su palco: analizaba con lentes ahumadas y sobre tierra roja al chico-récord de Manacor. Cuando Nadal masacró el delicado revés de Bolelli y sentenció el partido con un parcial de 8-0 (de 2-2 a 6-2 y 4-0), Tiriac giró su atención al teléfono. Y, tras merendarse el revés de Bolelli, Nadal reflexionó con los periodistas sobre cremas protectoras y los guiñoles de King Kong. ¿Batía tantos récords King Kong...?

El serbio Novak Djokovic aumentó su cuenta de victorias consecutivas en el Grand Slam a 23 al superar hoy al esloveno Blaz Kavcic, por 6-0,6-4 y 6-4 en la segunda ronda de Roland Garros.

El número uno del mundo, campeón de Wimbledon y del US Open el año pasado, y del Abierto de Australia en este, continúa sin ceder un set este año en París, tras deshacerse primero del italiano Potito Starace, y hoy de Kavcic, 99 del mundo, para ser el primero en lograr la tercera ronda.

El jugador esloveno llegó a París tras hacer una gran campaña en Brasil al ganar el challenger de Sao Paulo, ser finalista del de Florianopolis y semifinalista en Blumenau, todos ellos en tierra, donde se desenvuelve con seguridad.

Djokovic se enfrentará ahora con el ganador del encuentro entre el francés Nicolas Devilder o el alemán Michael Berrer.

El jueves en la quinta jornada del Abierto de tenis de Francia 2012, destaca en el cuadro masculino el partido de segunda ronda entre el defensor del título, el español Rafael Nadal (N.2), ante el uzbeco Denis Istomin en la pista Suzanne Lenglen de Roland Garros.

Gotitas de lluvia refrescaban París, la Ciudad de la Luz, en la atardecida de ayer: justo como avisaban los pronósticos tan ponderados por Rafa Nadal y su equipo. El refrescón arroja incertidumbre sobre el cruce de segunda ronda que Rafa debe negociar hacia las 15:00 horas (cuatro) ante Denis Istomin, en la Pista Suzanne Lenglen. Ahora, y tras la derrota de Serena Williams, Nadal es el único campeón de Grand Slam en activo, hombre o mujer, que no ha perdido en primera ronda de un gran torneo: allí donde un tal Federer ha caído seis veces.

"Me siento con ilusión y frescura diferentes (), con menos nervios. Interiormente me siento más cómodo". Así se psicoanaliza el mismo Nadal, en vísperas de chocar con los tiros planos de Istomin, que el martes barrió al ruso Kunitsyn: 6-2, 6-1 y 6-2. Istomin, moscovita y madridista, también debería ser ruso, pero se pasó a Uzbekistán. Viaja con su madre Klaudiya: es su entrenadora.

Nadal ha vencido a Istomin las dos veces que han jugado. Le cedió un set sobre la hierba del Queen's, una tarde húmeda en la que Rafa casi se lesiona. Pero jugar en la pastosa y densa Lenglen es casi otro deporte, comparado con la hierba de Londres o el cemento de Nueva York. Ya lo verá Istomin...

Tenemos a cuatro españoles en los octavos de final de Roland Garros

El español Rafael Nadal tendrá que eliminar a su íntimo amigo Juan 'Pico' Mónaco en octavos de final de Roland Garros si quiere seguir en la carrera para levantar el domingo su séptima Copa de los Mosqueteros.
El partido, que se disputará en la pista Suzanne Lenglen hacia las 15.30 hora de París (13.30 GMT), no debería deparar demasiadas sorpresas y seguirá un guión exigente. O al menos, así piensa Nadal. "Es de los jugadores que más aprecio del circuito y con el que me llevo mejor. Nos conocemos personalmente y tenísticamente, hemos entrenado mucho juntos y sabemos cada uno lo que vamos a intentar hacer: jugar agresivo y poner un ritmo superior", explicó el mallorquín tras deshacerse en tercera ronda del argentino Eduardo Schwank por un contundente 6-1, 6-3 y 6-4.
Con ese triunfo, Nadal sumó su victoria número 250 en tierra batida y su 48ª en Roland Garros. Antes, había enterrado al uzbeco denis Istomin (6-2, 6-2 y 6-0) y al italiano Simone Bolelli (6-2, 6-2 y 6-1). "Día a día, las cosas están saliendo bien y queda mejorar porque las cosas que vienen ahora son más complicadas. En la primera (semana) no se gana un Grand Slam, solo se puede perder", comentó el mallorquín, que ayer celebró sin grandes aspavientos su vigésimo sexto cumpleaños.
Incuestionable favorito
A priori, Nadal tiene todo de cara. La estadística le coloca como incuestionable favorito. Más allá de que muchos le consideren el mejor tenista sobre tierra batida de la historia y que esté luchando por romper la igualdad de seis títulos de Roland Garros que comparte con el sueco Bjorn Borg, el historial de partidos entre Mónaco y Nadal es claramente favorable al español.
Ambos tenistas se han enfrentado en cuatro ocasiones y la única victoria de Mónaco data de 2007, cuando el mallorquín tuvo que abandonar por lesión en el Masters 1.000 de Cincinnati cuando jugaba contra el de Tandil. Los otros tres cruces, siempre en polvo de ladrillo, se los apuntó el español, cuya última victoria sobre Mónaco se remonta a la última final de la Copa Davis, cuando Nadal le endosó al argentino un 6-1, 6-2, 6-2.
Mónaco, de 28 años, es consciente del gran reto al que se enfrenta y de que necesitará adaptar su juego para hacer daño a su rival, que cree que el argentino está "en el mejor momento de su carrera". "Tengo que ajustar un montón de cosas para enfrentar al mejor de la historia en polvo de ladrillo, no va a ser para nada fácil. Es uno de los partidos mas duros que puedo llegar a tener", añadió el de Tandil tras derrotar en tercera ronda y a cinco sets al canadiense Milos Raonic.
El argentino cuajó un partido sólido, largo y táctico en el que no se resintió de su maltrecho tobillo, a pesar de emplear más de cuatro horas y media para deshacerse de su rival, uno de los mejores sacadores del circuito. Antes, el 15º mejor tenista del mundo había eliminado al checo Lukas Rosol y al francés Guillaume Rufin. Al colocarse en octavos de final ha igualado ya su mejor registro en Roland Garros (2007) y en cualquier otro Grand Slam.
El ganador del Nadal-Mónaco se enfrentará en cuartos de final contra el vencedor del duelo entre el serbio Janko Tipsarevic (8) y el español Nicolás Almagro (13).

El español Nicolás Almagro se quitó de en medio al serbio Janko Tipsarevic por 6-4, 6-4 y 6-4 para avanzar a los cuartos de final de Roland Garros.

Poco después de que David Ferrer hiciera lo propio ante Marcel Granollers, el jugador murciano sentenció su victoria ante Tipsarevic en dos horas y 13 minutos, con una formidable derecha cruzada, para lograr los cuartos por tercera vez. En esa ronda se las verá con el ganador del encuentro entre el español Rafael Nadal (2) y el argentino Juan Monaco (13).

La confianza de Almagro parece de hierro. Levantó un 0-3 en el primer parcial sin inmutarse, de la misma forma que luego fue mandando en el marcador en los dos siguientes, con calma, templando su formidable revés, bien cruzado o paralelo, y minando poco a poco las reservas de Tipsarevic con quien se enfrentaba por primera vez.

Sigue Almagro sin ceder un set en París en cuatro partidos, como Ferrer, y en nueve en total, contando su victoria en Niza. Esta naturalidad en su juego es la que le llevó hoy a romper cinco veces el servicio del serbio y a disfrutar, también con calma, y un beso al cielo, de una merecida victoria, rubricada con una firma especial en la cámara de televisión: "Mazinger", así se siente Almagro.

Rafael Nadal está un paso más cerca de ganar su séptimo Roland Garros. El balear, si no lo tenía ya, ha demostrado su favoritismo al arrollar a Juan Mónaco para acceder a los cuartos de final del evento parisino. Nicolás Almagro, a quien ha ganado en todos sus precedentes, será su próximo escollo.

Rafa Nadal firma un bagaje de 49-1 sobre la arcilla de Roland Garros. Su última víctima ha sido su amigo, el argentino Juan Mónaco, al que ha conseguido doblegar por un marcador global de 6-2, 6-0 y 6-0 tras una hora y cuerante y siete de juego en un choque disputado en la pista Suzanne Lenglen. Nadal empezó como el día, frío (12ºC) y a la expectativa de lo que podía ofrecer su rival sobre el tapete. Mónaco saltó sin complejos a la pista y se presentó como un rival incómodo, agresivo, dispuesto a tomar riesgos y a poner en aprietos a su amigio. Rafa tardó en carburar, pero una vez que lo hizo fue una máquina perfecta de ejecución. Dio un paso al frente para poder llevar el dominio en los intercambios y comenzó a soltar latigazos con su derecha. Abrió ángulos imposibles y castigó con insistencia el físico de Mónaco, ahora limitado a correr de lado a lado de la pista. Entre tantos kilómetros el tandilense cedió dos veces su servicio y por ende la primera manga.
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Así vivimos el partido entre Juan Mónaco y Rafa Nadal

A pesar de que Mónaco estaba haciendo un buen tenis, el chaparrón que le estaba cayendo encima era para maldecir a los demonios. Rafa, intratable sobre todo en los momentos clave de cada set, enlazó 17 juegos consecutivos ante el número 15 del mundo para firmar dos roscos en el segundo y tercer set -la primera vez que lo consigue en su carrera- donde fue dominador de principio a fin. Desde el fondo, subiendo a la cinta, en la transición defensa-ataque... estaba en todos los lados y devolvía todas las pelotas. Una lección de juego que pondrán un día en las escuelas de tenis. Mientras Mónaco se mostraba desesperado ante el vendaval español, Nadal se mostraba tan concentrado como siempre, sabedor de lo importante que es economizar esfuerzos, tanto físicos como mentales, en un evento de tanta exigencia como un Grand Slam.

En cuartos de final Nadal tendrá que verse las caras con Nicolás Almagro, que se impuso a Janko Tipsarevic en tres mangas. Balear y murciano se han medido en siete ocasiones hasta la fecha, siempre con victoria para Rafa.

Atormentados en la Chatrier y la Lenglen, Djokovic y Federer pisaban tierra del infierno. Y mientras, los tres españoles que casi colman la segunda parte de los cuartos de final vivían un día tranquilo, vísperas de batalla: combate frontal Nadal-Almagro, hacia las 16:00 horas en la Philippe Chatrier y, a la misma hora, en la Lenglen, choque entre David Ferrer y Andy Murray.

Almagro nunca ha vencido a Nadal (0-7) y perdió sin ganar un set los dos turnos de cuartos que ya les midieron aquí, en 2008 y 2010. "Aún no he ganado a Rafa, pero estoy listo para la pelea, sé que puedo hacerlo: ya tuve match point a favor en París-Bercy y estoy más fuerte que en aquellos otros partidos aquí en Roland Garros", recuerda Almagro, que en su momento quiso vender su casa con la siguiente declaración de intenciones: "Tal como está el mercado, es igual de difícil ganar a Rafa Nadal que vender tu casa". El ilustre Brad Gilbert proclama: "El revés a una mano de Almagro es el mejor golpe de su clase en el juego de hoy". En fin...

Primer saque. Con serenidad, Nadal (que ya sólo se entrena con el zurdito junior portugués Frederico Silva) musita: "El primer saque de Almagro es muy fuerte. Él está muy fuerte". Palabras que recuerdan a aquellas que lanzó Joe Frazier a Muhammad Ali en la agonía tropical de Manila: "Viejo Frazier, yo pensaba que ya estabas acabado", soltó Ali a Frazier. "Alguien te ha informado mal, chico guapo", replicó sombríamente Frazier, mientras asestaba ganchos que hubieran derribado paredes

Y en la Lenglen, David Ferrer se alzará ante Murray (guiado por Ivan Lendl) casi a la misma hora en que el gancho cruzado de Nadal golpea el revés de Almagro. Ferrer cultiva el espíritu casi como cantaba Gardel: "Ya todo está en calma, el músculo duerme, la ambición descansa". Ferrer perfecciona el inglés, lee a Paulo Coelho y estudia la biografía de Napoleón. Pero Ferrer ha jugado con Murray tres veces en tierra batida y ganó las tres. A Murray le espera un pequeño demonio (little beast, pequeña bestia o bestezuela, llama Gilbert a Ferrer) que sólo ha cedido 25 juegos. Si la disciplina de Lendl sirve de algo a Murray, de hoy no puede pasar. Aguarda 'Little Beast' Ferrer.

Con su victoria número 50 en los Internacionales de Francia, Rafa Nadal se planta en su séptima semifinal de Roland Garros: una más que Bjorn Borg, El Vikingo de Hielo. En Roland Garros, Nadal ya está 50-1. Borg se quedó en 49-2. En el 68 aniversario del Desembarco en Normandía, Nadal tomó la playa de esa séptima semifinal blindándose ante los latigazos que le soltaba Nicolás Almagro, que barría el arenal de la Chatrier con metralla de saque y revés. Pero, tras dos horas y 46 minutos de combate, se alzó el puño de Nadal al aire denso de la Chatrier: 7-6, 6-2, 6-3.

Y en su séptima semifinal en París (casi como siete oleadas de desembarco en Normandía), el asalto de Nadal se va a topar con una trinchera humana: David Ferrer, que debuta en las semifinales de Roland Garros, aunque no en torneo de Grand Slam: Ferrer ya ha jugado semifinales en Australia y en el US Open, además de la final de la Masters Cup. Todos estos últimos éxitos en pista dura, algo que no termina de explicarse el propio Ferrer, que ayer sepultó a Andy Murray (y a su consejero Ivan Lendl) en una variedad de trampas y zanjas móviles.

Tras una suspensión por lluvia de 30 minutos, el sensacional restador que es Ferrer vació de contenido el servicio de Murray, enfrentado a 19 puntos de break con su servicio, que en tantas ocasiones le ha salvado la vida. Ferrer fracturó el saque del escocés en diez de esos 19 puntos que negociaron. Por esa sima desapareció Murray, condenado a ir a remolque y a pasar bolas. Ferrer le firmó su billete de regreso a Londres tras 225 minutos de carreras agonísticas en la mojada Pista Suzanne Lenglen: 6-4, 6-7, 6-3, 6-2. "No he jugado mal, pero sé que él me rompía mi servicio cada vez que yo era capaz de quebrar el suyo. Nada podía hacer con eso", resumió tristemente Murray.

Los mejores. El propio Murray (que cierra su racha como semifinalista en Grand Slam) sentencia que en las semifinales de mañana están "los cuatro mejores jugadores del mundo en tierra batida". Aunque, apostilla el escocés, "probablemente el favorito sea Rafa Nadal". "Visto lo que se está viendo, creo que Nadal puede ganar el torneo sin perder un solo set", analiza Ion Tirac. Ahora queda Ferrer como penúltima trinchera entre la máquina bronceada de Manacor y una nueva leyenda: el séptimo Roland Garros de Rafa Nadal.

Hoy la final de Roland Garros entre Nadal y Djokovic

Hoy termina de jugar Nadal la final aplazada

Rafael Nadal puede ser el mejor tenista del mundo en tierra batida. Sobre una marisma de lodo rojo, la cosa se empantana. Tras tres horas exactas de juego real, la final de Roland Garros quedó aplazada por primera vez desde 1973 (acabó jugándose el martes el Nastase-Pilic), con ventaja para Nadal ante Novak Djokovic: 6-4, 6-3, 2-6 y 1-2. Hay empate total a juegos ganados (15) y puntos (97), aunque Nadal ocupa el puente de mando: Rafa está a sólo cinco juegos de apuntarse su séptimo Roland Garros y Djokovic necesita diez. Pero Nadal entró con un servicio perdido en todo el torneo y Djokovic ya le ha quebrado siete veces (7/10), tantas como Rafa a Novak: 7/15.

Con 2-1 para Djokovic al comienzo del cuarto set, el serbio reanudará el juego a las 13:00 horas de hoy sirviendo para consolidar el break que logró sobre el servicio de Nadal en el juego inicial de esa cuarta manga.

Sombra. Ese break no parece demasiado relevante. La incógnita es qué encarnación de Nadal volverá a la mojadísima Chatrier: el purasangre que arrancó al galope con 3-0 y bola para 4-0 y que controló los dos primeros sets o la sombra granate a la que Djokovic martirizó con cañonazos planos, rumbo a un devastador parcial de 0-8: de 2-0 para Nadal en el tercer set, a 2-6 para Novak, más 0-2 en la salida del cuarto. El tercer ace de Nadal, a 201 km/h, puso el torniquete en la hemorragia. En 2007, Federer endosó un 10-0 a Nadal para hacerse con el título de Hamburgo.

Cuando el juez-árbitro, Stefan Fransson, decretó la suspensión, Nadal le habló así: "La pista es la misma que hace una hora, y entonces no hemos parado. Contigo siempre es lo mismo". Rafa había enviado una bola mojada al árbitro de silla, Damien Dumusois. En vestuarios, Toni Nadal se quejó de que no se hubiera tapado la pista durante un primer parón de 34 minutos, con 6-4 y 5-3 para su sobrino Rafael.

"El parón le va a venir bien a Rafa para salir adelante. La pista empapada rebaja el efecto a sus tiros y permitía a Djokovic golpear a la altura de la cintura", resumió Albert Costa, capitán español de Davis, cuando la familia Djokovic ya descorchaba Moet Chandon en la zona de jugadores de la Chatrier. Hoy vuelven todos a la Chatrier. Y se anuncia tempestad en París.
La probabilidad de precipitación supera el 90%

La reanudación de la final de Roland Garros, a partir de las 13:00 horas de hoy en la Philippe Chatrier, también corre peligro según las predicciones del tiempo, que dan para hoy más del 90% de probabilidad de lluvia en París. El director del torneo, Gilbert Ysern, insistió: "Había tiempo de sobra para jugar la final. Con estas mismas predicciones, otra vez mantendría la misma hora".
El juez árbitro: "Pueden hablar, pero yo decido"

Stefan Fransson, juez árbitro del torneo, fue concluyente: "Los jugadores pueden hablar, pero yo soy quien toma la decisión de las suspensiones". Fransson eludió comentar las palabras de reproche que le dirigió Rafa Nadal. Es la cuarta vez que Nadal y Djokovic aplazan en 24 horas el desenlace de una final. Anteriores: US Open 2010 y 11, y este mismo año, en el Masters 1.000 de Roma.