Comentad que os ha parecido el partido

yo no pude ir al estadio ,pero por lo que escuchao en la radio, el malaga hizo una muy buena primera mitad, en la segunda regular y duda muy fallon en los cornes y faltas hay que mejor aun queda mucho

A mi no me ha disgustado nada el equipo en este partido.
La primera parte a mi parecer, ha sido buena, el equipo ha dominado al Bilbao y en momentos puntuales hasta lo ha arrinconado en su campo sin dejarlo ni reaccionar.
Nos falló la puntería eso si.

En la segunda, se vé que el Caparrós les ha leido la cartilla a los suyos y han salido con ganas, el Málaga bajó el nivel que ofreció en la primera mitad y el partido se volvió un poco loco, con alternativas en el mando del partido entre ambos equipos.
Nos siguió fallando la puntería en la definición de las jugadas.

Destaco las actuaciones de Albert Luque, Pablo Barros , Weligton y Arnau, aunque en general ha estado bien todo el equipo.
El único que ha estado un poco fallón ha sido Duda en los saques de esquina, pero bueno, ha jugado mas o menos bien depues de todo.

Y bueno, esa es la impresion que me he llevado yo del equipo, la verdad que el equipo me ha inspirado confianza.

Ah y como anecdota, el videomarcador marcaba que ha habido 25200 espectadores.

Totalmente de acuerdo con "el9" ;)

Gran cronica el9, has dado de pleno en el clavo, desde mi punto de vista.

Mejoría insuficiente para compensar las limitaciones (0-0)

El Málaga se mostró más firme atrás y ofreció movilidad arriba hasta el descanso, pero pagó la falta de un organizador y el empeño en jugar por la izquierda. El Atlhetic tuvo varias ocasiones y fue claro dominador en la segunda mitad



Más que preocupación, resignación. Los rostros de los aficionados reflejaban ayer una mezcla de esperanza y conformismo, de confianza y al mismo tiempo realismo. La leve mejoría del Málaga resultó insuficiente para compensar las diversas carencias en su juego. Al menos, la lealtad, esa virtud característica de la masa social en los últimos años, permite asumir de antemano el sufrimiento que se avecina para transformarlo en optimismo simplemente con el atisbo de mejoría observado ante el Athletic en la primera parte.

La pobre imagen del estreno liguero, en el Calderón, quedó en el olvido simplemente con la aparición en escena de un futbolista: Luque. El público estaba ansioso por verlo en acción. En su primera intervención ya provocó el murmullo de los aficionados, conscientes de que con él se consigue el necesario salto de calidad.

La entrada de Luque en el equipo provocó un efecto dominó. Baha vio retrasada su posición y Duda quedó escorado a la derecha. Sin embargo, al mismo tiempo Antonio Tapia incluyó una variante en la medular. Prescindió de Lolo -hace nada ensalzado por su papel en algunos encuentros de la pretemporada- y apostó por el brasileño De Barros como acompañante de Miguel Ángel.

La clave en el fútbol actual es la movilidad. Las fuerzas están muy equilibradas y sólo la rapidez (física o mental) decide los partidos. Un futbolista puede tener más recursos técnicos que el resto, pero sólo se traducen en calidad si tiene más chispa para tocar, desmarcarse o rematar. Luque siempre los tuvo, sólo que le faltó una pizca de continuidad. Y también una gran dosis de sacrificio. Ayer La Rosaleda asistió a una prueba de su madurez. Hasta que se quedó sin fuerzas, entrada la segunda mitad -que ya la comenzó con el piloto de reserva encendido- pidió el balón constantemente, basculó a las bandas para tratar de sacar a los centrales y forjó pasillos para los compañeros.

El Málaga comenzó excesivamente estático hasta que un movimiento de Luque provocó desorden en la cobertura visitante. Arrastró a los centrales y dejó a Duda en la frontal del área a la altura del punto de penalti con Iraola como único oponente. El disparo del portugués fue inocente, pero al menos los atacantes blanquiazules comprobaron cuál era el camino.

Superioridad

Durante quince minutos la movilidad del cuarteto provocó diversas situaciones de superioridad. Baha aprovechó el trabajo de Luque y volvió a ser aquel futbolista incisivo, con una vertiginosa irrupción desde atrás. El marroquí olvidó ese papel de islote al que se había visto relegado por las continuas ausencias de Salva y cogió confianza. Gracias a ello se sacó un disparo a la media vuelta cruzado al otro palo respondido con una no menos espectacular despeje de Iraizoz.

A esa movilidad también se sumaron Calleja y Duda con sus cambios de posición, aunque a la postre no impidió que el Málaga, como sucedió durante todo el partido, jugara con uno menos en las situaciones de ataque. Es un lujo que el equipo cuente con un lateral ofensivo como Jesús Gámez y que su participación sea casi nula. Durante el partido dio la impresión de que Caparrós le había ordenado a su extremo izquierdo, David López, ser el defensor, y no el atacante. Estuvo más pendiente de taponar las subidas del fuengiroleño que de encararlo. Claro que el malaguista irrumpió una vez por el costado y Duda lo ignoró. El portugués hizo la necesaria temporización y a la hora de la verdad buscó el movimiento hacia adentro, al embudo que pretendía el Athletic.

El Málaga sólo atacó por la izquierda. No hubo una sola aparición por el otro flanco. El lateral zurdo del Athletic, el joven Balenziaga, tenía aprendida la lección y se limitó siempre a tapar su lado más débil, el derecho, arropado por Amorebieta y Javi Martínez o Iturraspe. El juego local era tan previsible que a la media hora se secó el pozo. La cobertura visitante hizo las oportunas correcciones. Mientras, sólo Yeste sacaba partido a la corpulencia de Llorente para intentar sorprender a Arnau.

El Málaga se marchó al descanso con un bagaje escaso acorde a la movilidad, la intensidad y el derroche de ganas ofrecidos. Pero las buenas sensaciones quedaron en el vestuario. La segunda mitad fue casi un monólogo del Athletic y sin pisar el acelerador. Sólo al final a raíz de la entrada de Adrián se buscó la machada. Sin convicción, sin recursos y hasta sin fuerzas.

Sin proponérselo

El Athletic aprendió la lección de la primera parte. Adelantó la defensa, acompasó los movimientos de sus líneas y presionó más arriba. Al Málaga pudo costarle un disgusto. La falta de un futbolista que saque el balón desde atrás ya provocó el huracán del Atlético hace quince días. Y ayer el conjunto vasco dominó de cabo a rabo durante más de un cuarto de hora casi sin proponérselo. Le bastó con apretar un poco y aprovechar la manifiesta incapacidad local para trasladar el balón a los atacantes. El equipo estaba partido en dos, con una distancia abismal.

Al Málaga le faltan recursos; al Athletic, fe. Resulta incomprensible que los pupilos de Caparrós no aprovecharan el recital de Llorente, espectacular en las dejadas. Recibía un melón y lo convertía en una opción de ataque. Dado que Cuadrado lo tenía bien sujeto para impedir que pudiera rematar se limitó a trabajar para los demás. Sólo Susaeta sacó partido, aunque Arnau rectificó sobre la marcha para atajar un disparo peligroso.

Los minutos pasaron sin que el Málaga pusiera en peligro a Iraizoz. Además, Duda volvió a estar desacertado en los córners y las faltas laterales. Ni siquiera la entrada de Eliseu mejoró el panorama. El Athletic tenía bien cerrada esa banda. Sí cambió ligeramente con Adrián, que hasta se atrevió un par de veces por el otro costado. También insuficiente. Como la mejoría ofrecida. Queda mucho por trabajar para paliar las limitaciones.

MÁLAGA 0 - ATHLETIC 0

Alineaciones

Málaga: Arnau (2); Jesús Gámez (1), Cuadrado (2), Weligton (2), Nacho (1) -Eliseu (1), minuto 59-; Miguel Ángel (1), De Barros (1), Duda (1), Baha (1) -Cheli (s. c.), minuto 86-, Calleja (1), y Luque (1) -Adrián (1), minuto 76-.

Athletic: Iraizoz (1); Iraola (1), Aitor Ocio (2), Amorebieta (1), Balenziaga (1); Iturraspe (2) -Ion Vélez (s. c.), minuto 76-, Javi Martínez (1); Susaeta (1), Yeste (1), David López (0) -Gurpegui (s. c.), minuto 90-, y Llorente (2) -Gabilondo (s. c.), minuto 88-.

Árbitro

Clos Gómez (aragonés). Llevó el partido de forma excelente y apenas tuvo errores de apreciación (si acaso, una falta a Duda en el centro del campo).

Amonestados

Mostró la tarjeta amarilla a Cuadrado, Miguel Ángel y Amorebieta.

Campo

Magnífica entrada en La Rosaleda con 25.200 espectadores en tarde muy calurosa, lo que hizo mella en los futbolistas durante la segunda parte. Terreno de juego en pésimo estado, impropio de un equipo de la Primera División. A pesar del empate, el público despidió con aplausos al equipo blanquiazul mientras los jugadores agradecían desde el centro del campo el apoyo recibido.

El mejor: Weligton

Volvió a ser el líder en la defensa. Formó una pareja compacta y sólida con Cuadrado, y supieron frenar los movimientos de Llorente y Yeste. Los errores defensivos llegaron más por descuidos de sus compañeros. En un cómputo global del partido también Arnau y el ariete visitante Llorente estuvieron notables.

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«Lo bueno es que empezamos a ser un equipo equilibrado»



«Conseguimos sumar un punto y hacer un buen partido, con algunos peros, aunque en general se dio una buena imagen. Hicimos una primera parte aceptable,y luego perdimos la posición en el arranque del segundo tiempo. Al final se apretó y pienso que esta es la línea a seguir. El césped no está en su mejor estado, pero tampoco es cuestión de hablar de eso. Espero que en el próximo partido esté mejor. Más que el resultado lo importante es que empezamos a ser un equipo equlibrado. Se defendió bien la estrategia, se juntaron mejor las líneas y se crearon ocasiones, pienso que tres o cuatro en el primer tiempo y dos o tres en el segundo. Luque y De Barros estuvieron en la línea del resto del equipo, muy comprometidos, y eso que habían jugado apenas medio partido en Antequera con nosotros. ¿El cambio de Cheli por Baha?: En los últimos minutos el equipo ha jugado bien y tuvo dos ocasiones de Adrián y una de Eliseu.

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«Es una pena que el Málaga tenga este césped»

JOAQUÍN CAPARRÓS

«Tuvimos una primera parte en la que nos costó adaptarnos al terreno de juego y pegamos muchos pelotazos, pero afortunadamente ellos no tuvieron ocasiones y dominamos la zona de rechaces. En la segunda jugamos lejos de la portería y nos ha faltado una pizca. Tuvimos posesión, pero es una pena que con este pedazo de estadio el Málaga tenga este césped. Los perjudicados son los futbolistas».

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Luque: «Se ha visto una actitud muy buena»

Luque debutó en su segunda etapa en el Málaga. «La gente ha respondido, y se ha visto una actitud muy buena. en todo momento buscamos la portería contraria», dijo. «No hemos marcado, pero se ha dado buena imagen y, además, se dejó la portería a cero. Eso sí, en el Málaga las ocasiones que hay tenemos que aprovecharlas», mantuvo.

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Calleja: «Poco a poco se mejorará en ataque»

El extremo izquierdo no se mostró muy preocupado por la sequía realizadora del equipo: «Las ocasiones más claras las tuvimos nosotros. Ellos sólo tiraron un par de veces con claridad. Pienso que poco a poco iremos mejorando en las tareas ofensivas». «Ahora tenemos que superarnos partido a partido. Esto es muy largo y el Málaga va a ir a más», añadió.

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Miguel Ángel: «Hay que felicitar al equipo»

«No cabe la menor duda de que hay que felicitar al equipo, porque se ha hecho un despliegue enorme y si algún equipo se ha merecido ganar ese ha sido el Málaga», reconoció el medio centro sabadellense al término del choque. «Pienso que así vamos a llegar muy lejos. En Primera la casa hay que hacerla por abajo, y ese es el trabajo que estamos haciendo».

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Cuatro malaguistas pasaron para hablar

De los catorce jugadores del Málaga que actuaron ayer sólo cuatro -Calleja, Luque, Miguel Ángel y Duda- atravesaron la zona mixta tras el partido para hablar para los medios de comunicación. El balance contrasta con el del Athletic, en el que todos sus efectivos recorrieron este pasillo. La mayoría de sus rivales, en cambio, optaron por el silencio.

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La preocupación está en el ataque

El Málaga es ya, junto al Betis, el único equipo que no ha marcado un gol en el presente campeonato



Sin que las cifras sean especialmente significativas a estas alturas del campeonato, no deja de ser cierto que el Málaga es ya, junto con el Betis, el único conjunto de la categoría que todavía no ha visto puerta. Si en el Vicente Calderón el cuadro blanquiazul mostró una imagen pobre en defensa y en ataque, ayer al menos el equipo estuvo más eficaz en la presión y sufrió menos en su área, pero mantuvo preocupantes sensaciones ofensivas.

Mucho se habló durante la pretemporada de que el Málaga podría tener un importante poder en las acciones a balón parado, una de las facetas del juego a las que Antonio Tapia le gusta poner más énfasis en el trabajo con sus jugadores. La plantilla se completó con especialistas en el golpeo, como José Juan Luque y Duda, pero las dos primeras jornadas ligueras han dejado un flojo balance en este aspecto, al menos en ataque.

Tapia ni siquiera convocó a José Juan Luque, y Duda no se ha mostrado muy preciso en sus lanzamientos, ni los de saque de esquina, ni las faltas laterales. Su mejor oportunidad estuvo ayer en una acción de estas últimas y que no tocó nadie, por lo que Iraizoz se vio obligado a meter la mano in extremis por si acaso, y se provocó un córner. De momento casi ningún envío suyo ha dado lugar a un remate.

Desventaja por alto

Otro de los problemas es que tampoco el Málaga se muestra peligroso por alto con los jugadores -Cuadrado, Weligton y los puntas-, más allá de que los servicios no sean precisos. «Está claro que hay que mejorar, pero el Athletic tampoco nos ha creado problemas ahí», comentó al respecto Tapia ayer en rueda de prensa.

Al margen del juego a balón a parado, el equipo no acumula muchas ocasiones. Ayer tuvo más llegada, pero sin oportunidades excesivamente claras -las que más, sendos remates de Baha, Luque, Adrián y Eliseu-. Frente al 4-2-3-1 del primer partido, el técnico probó frente al Athletic con dos puntas, Baha y Luque, que no exhibieron una gran compenetración en sus movimientos, algo hasta cierto punto lógico, ya que el catalán lleva poco tiempo trabajando con el Málaga.

Duda y Calleja se intercambiaron muchas veces sus puestos, pero apenas fueron doblados por los laterales. La pareja de medios centro (Miguel Ángel y De Barros) se desfondó, pero no asegura una salida clara del balón. El resultado, un Málaga espeso.

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Nula capacidad de ataque

ANTONIO Tapia y Joaquín Caparrós se admiran. Se parecen en muchas cosas. Es más, en sus libros de la teoría futbolística el espectáculo como tal tiene muy poco espacio, ni siquiera una página... Por eso, esperar y ver un buen partido con dos entrenadores con un concepto tan cicatero de este deporte era como pedir que llueva en Málaga en agosto, o sea algo que puede ocurrir, pero que es extrañísimo que suceda. Por eso, nada más que por la concepción pelotera de ambos técnicos, era más que previsible el resultado final de empate, un 0-0 justo a tenor de lo visto, en el que el Málaga perdió mucho más que su contrario. Y es que el Málaga desperdició una gran oportunidad de ganar ante el que posiblemente sea el peor Athletic de su historia, y no lo hizo porque su capacidad ofensiva es nula, no sólo por un ataque excesivamente romo, sino porque la laguna que hay entre la defensa y el ataque es todo comodidad para los defensas rivales, que navegaron en aguas tranquilas, salvo en los arreones finales de los locales. La prueba del algodón de lo que digo es que en los segundos 45 minutos el Málaga no tiró ni una vez entre los palos de los vascos, y así es difícil, muy difícil ganar. Pero es que además, el centro del campo malaguista no crea juego.

El resultado de los dos encuentros disputados hasta la fecha en la vuelta a la Liga de las Estrella no es bueno, ni mucho menos, aunque al menos ayer en casa ante el Athletic el Málaga mantuvo cierto orden, pero con esta simpleza no basta para mantenerse en la máxima categoría del fútbol español. El Athletic, sabedor de que el Málaga mantenía más un orden defensivo que ofensivo, decidió adelantar sus líneas tras su timorato primer tiempo y las mejores ocasiones fueron de los visitantes, quienes sin embargo, por sus propias carencias, que también son muchas, como las del Málaga, nunca buscaron con fe la victoria. El juego destructivo de los dos equipos se impuso con una rotundidad pasmosa.

Este Málaga tiene que mejorar mucho para conseguir su anhelo, que no puede ser otro que la permanencia. Tiene que mejorar en su concepto de fútbol ofensivo, y para ello ha de buscar remiendo a la soledad de Luque y Baha o de quien juegue, que da lo mismo. El primero demostró ganas, pero se le nota corto de forma, y el segundo se vio muy vigilado por los rivales. De los jugadores malaguistas que han 'regresado', poco que decir, más bien nada, salvo que Miguel Ángel y Duda anduvieron muchos minutos en terreno de nadie; respecto a De Barros, que alguien me explique qué tiene mejor que Carpintero, y a lo mejor me convence. De Cuadrado digo lo mismo respecto a Hélder. Vamos, que la cosa no está para tirar cohetes, aunque, eso sí, tenemos los mismos puntos que el Barcelona...

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Problemas de acceso al estadio en Fondo



Los 25.200 espectadores en el partido, según cifra oficial ofrecida ayer por el club, supone un récord de asistencia tras la remodelación del estadio si se excluye el partido del ascenso, contra el Tenerife. Pocos minutos antes del choque hubo problemas de acceso a la grada de Fondo, en las puertas 13 y 15, en las que se formaron grandes aglomeraciones de gente.

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Málaga y Athletic consiguen sus primeros puntos (0-0)

Los locales se estrenaron en su regreso en Primera ante su afición con un encuentro igualado en el que lograron asegurar un punto.

El Málaga volvía como local a Primera División, tras dos temporadas, y logró su primer punto de la temporada tras igualar a cero ante el Athletic de Bilbao, equipo que también inaugura su casillero de puntos tras un partido igualado y de dominio alterno.

El técnico del Málaga, Antonio Tapia, optó por dos delanteros, el franco-marroquí Nabil Baha y el reciente fichaje Albert Luque, que dejó Ámsterdam por Málaga, y además incluyó a otra de las contrataciones, el mediocentro brasileño Pablo de Barros, que debutó para dirigir y conducir el balón.

Una alineación ofensiva más que la mostrada por su homólogo en el banquillo del Athletic de Bilbao, Joaquín Caparrós, que utilizó solamente como referente en ataque al renqueante Llorente, con problemas físicos, y por detrás, de enlace, al excelente Yeste.

El primer lanzamiento con intención del Málaga llegó en el minuto trece. Fue el portugués Duda, que recogió un pase de su compañero Calleja, en la frontal, se volvió y su disparo, flojo y centrado, lo atajó el guardameta Iraizoz.

El único equipo que buscó el gol fue el Málaga. Calleja, se escoró a la izquierda y su golpeo salió rozando el poste izquierdo de la portería del Iraizoz. El conjunto bilbaíno movió el balón, aunque los acercamientos al área malaguista fueron escasos.

Los minutos transcurrieron y el Málaga buscó el primer gol en su regreso a Primera División. Lo tuvo el delantero Baha, quien cogió un balón dentro del área y su disparo lo despejó Iraizoz en el minuto 26.

Cuatro minutos después, Yeste, con gran calidad, elevó con astucia el balón cuando estaba escorado y dentro del área pequeña y Arnau tuvo que intervenir por el extraño que hizo el esférico.

La primera parte se consumió, pero antes Luque tuvo una ocasión, de las más claras, pero su lanzamiento se fue fuera por muy poco.

Al descanso un 0-0 con un equipo, el Málaga, que mereció un gol, al buscarlo más que un oponente que mostró un oficio de equipo de Primera División.

Ese oficio lo demostró en el inicio de la segunda parte. El Athletic de Bilbao cogió el mando del partido y Javi Martínez, Iturraspe y Susaeta se impusieron en el centro del campo.

El Athletic de Bilbao estuvo mejor pero el gol no llegó. El Málaga, muy cansado, en los primeros veinte minutos ni se acercó a la portería de Irazoz, por lo que Tapia movió el banquillo.

El rápido centrocampista portugués Eliseu Pereira sustituyó al lateral izquierdo Nacho Pérez para buscar rapidez por las bandas e intentar desnivelar el marcador.

El partido bajó de nivel. El cansancio de los jugadores de los dos equipos se notó, aunque el conjunto visitante siguió con ganas aunque sin excesiva eficacia.

La salida del delantero Adrián por Luque ofreció algo más de velocidad a los locales y en los últimos diez minutos, sobre todo a balón parado, buscaron la victoria, pero el gol no llegó y el empate fue el reflejo de lo que se vio en el campo, en el que cada equipo dominó en un período.

Ficha técnica:

0 - Málaga CF: Arnau; Gámez, Weligton, Cuadrado, Nacho (Eliseu, m.59); Duda, Barros, Miguel Ángel, Calleja; Baha (Cheli, m.85) y Albert Luque (Adrián, m.76).

0 - Athletic Bilbao: Iraizoz; Iraola, Amorebieta, Aitor Ocio, Balenciaga; Susaeta, Javi Martínez, Iturraspe (Ion Vélez, m.76), David López (Gurpegui, m.89); Yeste y Llorente (Gabilondo, m. 87).

Árbitro: Clos Gómez (Comité Aragonés). Mostró tarjeta amarilla a los malaguistas Cuadrado (m.54) y Miguel Ángel (m.62) y al visitante Amorebieta (m.72).

Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada de Liga de Primera División disputado en el estadio de La Rosaleda ante unos 28.000 espectadores.


Málaga Hoy

Málaga | Athletic · sala de prensa

"El equipo comienza a estar más equilibrado"

Tapia alaba la mejoría y se lamenta de las ocasiones falladas · "Hemos sumado un punto e hicimos un buen partido", asegura

Más allá del valor del empate logrado por el Málaga ante el Athletic de Bilbao, Antonio Tapia alabó al término del encuentro la "mejoría" experimentada por su equipo. Aunque hace una semana, el baenense solicitó a la afición "un margen de cien días de confianza", ayer apreció los primeros avances: "Más que el resultado, el equipo comienza a estar más equilibrado. Hemos cerrado líneas y hemos creado ocasiones, la pena ha sido que no hemos sabido materializarlas".

Para el técnico, la valoración del encuentro fue positiva: "Hemos conseguido sumar un punto y hacer un buen partido, con algunos peros, pero el Málaga dio una buena imagen". No obstante, Tapia reconoció que su equipo sufrió un bajón en el inicio de la segunda mitad, momento que aprovechó el Athletic para hacerse con el control del balón: "En el segundo periodo hemos estado menos acertados y perdimos la posesión, aunque al final apretamos y tuvimos un par de ocasiones. Esta es la línea a seguir: estamos más equilibrados y pudimos dejar la portería a cero".

A pesar de la mejoría, el Málaga se marchó al vestuario por segunda ocasión consecutiva sin marcar un gol, un aspecto que no le molesta a Tapia: "Me preocuparía que no tuviéramos ocasiones de gol. En la primera tuvimos cinco o seis y en la segunda, dos o tres. Hemos controlado bien el partido y al final no había que darle facilidades al Athletic". De ahí la sustitución de Baha por Cheli cuando el partido ya agonizaba: "El cambio fue eminentemente táctico. Además, hay que tener en cuenta que los cuatro jugadores de arriba se desgastaron muchísimo. Y, además, a partir de ese cambio tuvimos dos ocasiones de Adrián y un disparo de Eliseu".

A pesar de su tono, siempre sosegado, llamó la atención la valoración que el de Baena hizo del posible penalti de Amorebieta sobre Adrián: "El jugador me comenta que hay contacto y me extraña mucho que se haya tirado. Nosotros también somos de Primera, a ver si en el próximo partido nos la pitan".

Cuestionado por la actuación de Albert Luque y de Pablo Barros, que ayer debutaron en La Rosaleda, el técnico blanquiazul reconoció el "compromiso" de los dos jugadores durante todo el encuentro.

Aunque Tapia trufó su valoración del partido de reflexiones positivas, el de Baena reconoció que el equipo todavía tiene un amplio margen de mejora: "Tengan en cuenta que acabamos de empezar".

El estado del césped, muy criticado por el entrenador del Athletic, Joaquín Caparrós, apenas fue valorado por Tapia: "No está en su mejor estado, pero no vamos a hablar de eso. Esperemos que mejore".

Málaga Hoy

861 días después, 25.200 espectadores

La Rosaleda le da la bienvenida a la élite del fútbol español tras dos temporadas en Segunda con una gran entrada

Ochocientos sesenta y un día después La Rosaleda se engalanó ayer para recibir a la élite del fútbol nacional. No era un domingo cualquiera y la expectación era máxima. Como botón, los 25.200 aficionados que se congregaron en las gradas de Martiricos. Atrás quedan algunas gélidas tardes de fútbol en Segunda y mediocres entradas para una ciudad como Málaga, que ayer volvió a disfrutar del fútbol en estado puro. Desde una hora antes del partido los aficionados hacían cola en las taquillas de La Rosaleda y a las 17:00, hora del inicio del encuentro, todavía muchos aficionados esperaban fuera del estadio ante unas puertas que estaban literalmente anegadas de público.

Cuando Clos Gómez, fabuloso su arbitraje, pitó el inicio del partido La Rosaleda estalló de júbilo. Atrás quedaban dos temporadas deambulando por la Segunda División y uno de los periodos más convulsos en la historia del club. Con ese pitido, tan anhelado por la afición, Málaga, ni más ni menos, se transformaba en una ciudad de Primera.

Pero como en todo los guiones, siempre hay un enemigo inesperado. Todo estaba a punto para vivir una magnífica tarde de fútbol hasta que los jugadores del Málaga y del Athletic pisaron el terreno de juego. Las peores previsiones se cumplieron y el césped se erigió en el principal enemigo del juego de ambos equipos -Caparrós estuvo muy crítico con el aspecto que presentaba el terreno de juego al final del encuentro-. Luque estuvo a punto de lesionarse en la primera mitad en un mal apoyo y los futbolistas pasaban muchísimos apuros para circular el balón con criterio. En el descanso cuatro trabajadores del club se afanaban en asentar algunas de las zonas más levantadas del estadio en una imagen que comienza a ser demasiado frecuente.

Si complicado fue jugar en un césped en tan malas condiciones, no le fue a la zaga el intenso calor que ayer asoló a la capital. Cada vez que el juego se detenía, los jugadores de ambos equipos se acercaban a los banquillos para beber agua y recuperarse del intenso derroche físico que ayer desplegaron sobre el terreno de juego. El propio Luque reconocía que todavía necesita aclimatarse al calor tras las tres temporadas en las que ha jugado en Inglaterra y Holanda.

Las oportunidades de Luque, Duda y Baha, en la primera mitad, encendían a una afición que se movía al ritmo de Malaka Hinchas, siempre imponente en su puesta en escena. En la segunda mitad, el guión del partido viró y el Athletic pasó a dominar el balón. Miguel Ángel, consciente de ello, pedía con su gesto habitual el apoyo de la afición. Pero de nada sirvió. Clos Gómez pitaba el final del partido y los 25.200 espectadores, 861 días después, se marchaban a sus casas después de ver un partido de Primera.

Málaga Hoy

Tapia: ´Éste es el camino´

Antonio Tapia se mostró contento con la imagen del equipo en el partido frente al Athletic. El técnico destacó la solidez de la zaga y elogió el trabajo de los debutantes Luque y Pablo Barros



El técnico malaguista, Antonio Tapia, se declaró ayer "contento" después del partido que enfrentó al Málaga y al Athletic de Bilbao. El entrenador cordobés dijo que el equipo blanquiazul realizó "un buen partido" en La Rosaleda, aunque admite que aún hay cosas que mejorar.
"Hemos sumado un punto, inauguramos la tabla y hemos hecho un buen partido. Con algunas lagunas, pero se ha dado una buena imagen. El equipo se ha mostrado sólido en todo momento. Ésta es la línea que debemos seguir", comentó.
En cuanto al resultado, Tapia comentó que no es el resultado lo más importante del choque. A su juicio, lo mejor fue la "sensación de equipo" que ofreció el Málaga. "Hemos juntado líneas, sujetamos bien al rival y planteamos mejor las jugadas de estrategia", dijo. Después de un breve silencio, Tapia agregó: "Éste es el camino".
Para el entrenador blanquiazul, no pasa inadvertido el hecho de que el Málaga aún no ha estrenado su casillero. Sin embargo, no es algo que le preocupe de manera especial. "Me preocuparía más no hacer ocasiones. Hoy (por ayer) hemos creado seis o siete oportunidades de gol. Nos ha faltado materializarlo, pero ya llegarán", apuntó.
Tapia, además, quitó importancia al estado del terreno de juego. "No está en las mejores condiciones, pero tampoco creo que sea tan importante. Lo que interesa es que hemos peleado todo el tiempo".
Preguntado por el posible penalti sobre Adrián que no apreció el colegiado Clos Gómez, y en el que el delantero se fue al suelo, el técnico salió en defensa de su jugador. "Hubo contacto, y por eso se fue al suelo", puntualizó.
También destacó la rápida adaptación de Albert Luque y Pablo Barros, que ayer partieron como titulares. "Llevan poco tiempo aquí, y cuando se terminen de adaptar veremos su mejor versión", aseguró el técnico.
Sobre el rival, Tapia admitió que se trataba de un equipo difícil y, sin embargo, "no nos crearon problemas". "Puede parecer que el Málaga no tuvo peligro, pero lo cierto es que ellos apenas nos crearon ningún problema".
Por último, el técnico fue preguntado por los cambios de Luque y Baha, que definió como "tácticos" para "mantener la intensidad" durante todo el partido.

La Opinión

Un punto de mejoría

El Málaga mereció mayor recompensa en la primera mitad, en la que dominó al Athletic de Bilbao, sufrió una pájara en la segunda, y erró ocasiones claras en los minutos postreros por parte de Adrián y Eliseu



El gol, ese preciado trofeo que desea cualquier equipo en cada partido, parece esa presa difícil de lograr esta temporada para un Málaga con destellos de calidad, en pleno proceso de construcción por algunas tardías incorporaciones ofensivas y con mucho margen de mejora tras demostrar que la presión defensiva es excelente en todas las líneas respecto al encuentro inaugural.
Ayer, si enfrente estaban los ´leones´ del Athletic de Bilbao, en la manada malaguista se encontraban dos fieras ávidas de fútbol, con pólvora en sus botas, deseosos de perforar la meta contraria: Nabil Baha, otro león -del Atlas- y Albert Luque -un tigre -del Mediterráneo-, que quiere demostrar que su peregrinaje por Inglaterra y Holanda no eclipsará lo más mínimo la calidad que posee ni su olfato goleador.
El franco-marroquí fue el primero que lo intentó, con más corazón que cabeza. Sin nada entre pecho y espalda -ni agua ni comida, siquiera- por cumplir a rajatabla con el Ramadán -a Jesús Gámez, Pablo Barros, Duda y Weligton se les vio acudir a la banda en busca del líquido elemento-, Baha encontró en Luque al aliado perfecto en ataque. Sólo falta algo de compenetración para provocar más temor aún, si cabe, en las defensas contrarias.
Ambos forman, sin duda, un ataque letal, de los que darán que hablar en Primera si la ausencia de lesiones les permite continuidad. Sendos atacantes, junto a Duda y Calleja, que permutaban sus posiciones de extremos -el luso comenzó por la derecha, al cuarto de hora pasó a la izquierda y acabó el primer tiempo de nuevo en la diestra- gozaban de total libertad de movimientos en la parcela ofensiva.
Los otros seis jugadores de campo, la zaga junto a Miguel Ángel y Pablo Barros, se convertían en todoterrenos, con una presión asfixiante en materia defensiva, en peones con más cortapisas a la hora de atacar. Pese a ello, al joven brasileño cedido por el Zaragoza, el as que se guardó Antonio Tapia en la manga, se le vieron chispazos de auténtica calidad cuando en una acción sorteó a varios contrarios jugando como ´falso´ extremo derecho.
No obstante, la expectación llegaba cada vez que Albert Luque tocaba, acariciaba, mimaba el balón arriba. Se oían murmullos por doquier. Y es que al barcelonés sólo le falta ritmo de competición en la Liga española, porque de lo demás -calidad técnica, regate, velocidad, potencia, remate de cabeza, visión de juego- le sobra. Quizás necesite continuidad para acostumbrarse al puesto de ´nueve´ y, sobre todo, adaptarse al calor de nuestra tierra al haber jugado los tres últimos años con veinte grados menos de temperatura. Pero tiene hambre de gol y ganas de ganarse a la afición.
Tanto Luque como Baha gozaron de las mejores ocasiones de la primera mitad, el primero casi en el epílogo, con un remate al exterior de la red que hizo cantar gol a gran parte de Tribuna; el segundo, al borde de la media hora, con un tiro envenenado, que Iraizoz despejó como pudo, tras robo de balón de Duda y triangulación entre Nacho, Calleja y el francés.
Pero, por mucho que el Málaga, vigilante y agazapado, buscaba a su primera presa, ésa que inaugurara el marcador de ayer e incluso su tanteador en esta Liga, no llegaba. El gol se hacía de rogar. Hubo que esperar al ecuador del segundo periodo para oír un ´uy´ de la grada en un centro-chut de Duda que se fue a córner.
Poco antes, Tapia apostó por el guepardo Eliseu, el animal más veloz del Málaga, para llegar arriba con peligro, sacrificando a Nacho y dejando en la retaguardia a Javi Calleja.
Por entonces, Baha y Luque parecían adormilados, casi sin fuerzas. Tapia quitó al catalán para meter al zorro Adrián, que buscó un penalti ante Amorebieta que no lo fue. Sólo Duda protestó al asistente más cercano.
Sin puntería. El internacional marroquí, que lo intentaba por su cuenta, pero con más oficio que beneficio, también se fue a la ducha antes de la conclusión. Entró Cheli. Baha y Luque dejaron las dianas para otra ocasión. Llegarán muchas.
Tapia buscó el gol por las alas, con Adrián como único punta. Visto que no había sido posible con los ´tanques´ Luque y Baha, lo intentó por vías alternativas. El Málaga apuraba al máximo sus opciones, aunque sólo restaban cuatro minutos sin contar los de la prolongación.
El asturiano tuvo el tanto en sus ´pezuñas´, en una volea que se fue fuera por centímetros tras una excelente acción de Pablo Barros, como también con el tiempo ya cumplido el portugués Eliseu, que en carrera remató con potencia y el balón se marchó desviado.
El empate a cero sabía a poco, no por merecimientos, sino más bien por el empuje de una afición volcada durante los noventa minutos, con tanta ansia de triunfo e impotencia como la plantilla. Un empate es escasa renta en Primera División, donde la salvación estará, casi con seguridad, muy cara.
No obstante, a tenor de lo visto ayer, el Málaga se merendó en el primer periodo a los leones, aunque sin premio, algo que hicieron éstos con los boquerones en el segundo, asimismo sin recompensa para los vizcaínos.
El empate es justo. Primer punto en la Liga, lo que evita el farolillo rojo, que no es poco. Es un punto de mejoría en todas las facetas, aunque faltara el gol.

La Opinión

Del Sevilla al Athletic

27 meses después de que los hispalenses se llevaran un 0-2 de la Rosaleda, el fútbol de primera regresó a Málaga. La ´bombonera´ blanquiazul se estrenó en la élite tras su última remodelación


6-5-2006. Salva intenta rematar ante Palop en el 0-2 de hace tres temporadas.

La Rosaleda volvió ayer a sentirse un campo de Primera. Poco más de dos años y cuatro meses después de la última cita con la Liga de las Estrellas (6 de mayo de 2006), ante el Sevilla de Juande Ramos (0-2), el Athletic de Bilbao de Joaquín Caparrós inauguró ayer la temporada liguera 2008/2009 en Martiricos, otra vez de vuelta en la máxima categoría del fútbol nacional.
En los 861 días anteriores a la fecha de ayer, la afición blanquiazul tuvo que cambiar al Real Madrid por el Castilla, al Barcelona por el Eibar, al Betis por la Ponferradina o al Valencia por el Hércules. Una especie de pesadilla de dos temporadas de duración que por fin se quebró con la visita del histórico club rojiblanco en la ahora denominada Liga BBVA.
El estreno de la Liga en Málaga sirvió también para poner de largo el estadio costasoleño después de su última remodelación. La nueva Rosaleda con el aspecto que ahora la conocemos acabó su ´reconstrucción´ con el equipo jugando en Segunda División. Tras el ascenso a Primera del pasado mes de junio, el recinto de Martiricos por fin pudo disfrutar ayer de fútbol de elite con sus casi 29.000 asientos distribuidos por todos los rincones de la grada de La ´Bombonera´.
Margen de mejora. El choque no fue nada bueno. Es más, durante muchos minutos no se diferenció en nada de esos partidos ´pestosos´ de los últimos años con el Eibar o el Racing de Ferrol. Pero la lógica dice que eso será sólo un espejismo si tenemos en cuenta la nómina de ilustres visitantes que se dejarán caer esta campaña por Martiricos.
El empate final, independientemente del juego visto por la grada de La Rosaleda, eso sí, supone para el Málaga estrenarse en la clasificación y dejar a un lado el farolillo rojo que le endosó el Atlético con sus cuatro goles en la jornada inicial de hace un par de semanas.
Por lo visto en estas dos jornadas, va a ser un año duro. Pero al menos se hará mucho más llevadero viendo fútbol de calidad. El Real Madrid, el Barcelona, el Sevilla, el Villarreal, el propio Valencia, próximo visitante de La Rosaleda en partido intersemanal (23, 24 ó 25 del presente mes de septiembre) prometen tardes-noches de ansiedad, pero también de ilusión

La Opinión

COMBATE NULO ENTRE UNOS DUBITATIVOS MÁLAGA Y ATHLETIC

Permanecen las sombras



Málaga y Athletic se tuvieron que conformar con una tablas sin chispa. Las sombras generadas tras el estreno se ratificaron en La Rosaleda. Los de Tapia, inoperantes en ataque, mandaron en la primera parte y se dejaron dominar tras el cambio de cara del Athletic después del descanso. Las dudas sembradas no se alejan ni de Málaga ni de Bilbao. Cero patatero.

El debate protagonizado en la Rosaleda dejó mal sabor de boca. Ni Málaga ni Athletic decantaron la balanza a su favor y se quitaron el peso de encima que cayó sobre sus espaldas en la primera jornada de Liga. Las buenas intenciones de poco sirvieron.

Tapia apostó por Luque al lado de Baha, ofreciendo al marroquí una compañía necesaria que tampoco acabó con las pocas luces en el área contraria. Iraizoz, sobrio y seguro, se encargó de evitar los pocos apuros que le convirtieron en protagonista. El ex del Espanyol sacó una buena mano a un derechazo de Baha y vio pasar cerca de su palo derecho un detalle de Albert Luque. El catalán, dispuesto a resurgir en una nueva etapa en nuestra Liga, estuvo revolucionado todo el partido. En ocasiones, las ganas le taparon tranquilidad y buenas maneras para revolucionar un partido sin sabor.


Camino trastocado
El Athletic, empeñado en tirar de su capítulo previsible buscando a Llorente por las alturas, siguieron perdiendo crédito en su cuenta del curso. El descanso, eso sí, cambió la cara rojiblanca. Yeste se enchufó a la película y se hizo con el mando. Fran creó la solución llevando el guión a la banda derecha. Susaeta e Iraola, inexistentes en el primer asalto, encontraron petróleo por su costado. El Málaga, atemorizado y perdiendo los recursos de los primeros cuarenta y cinco minutos, se encomendó al paso del tiempo.

La valentía bilbaína no tuvo premio. La inocencia en los últimos metros tuvo la culpa. Javi Martínez contó con la mejor ocasión, desperdiciando un pase de la muerte de Iraola que se fue al limbo. Caparrós, según fue consumándose el partido, se conformó con el punto. Algo que instaló en el terreno de juego.

El Málaga, aprovechando la parsinomonia vasca en el último cuarto de hora, se lanzó con más corazón que cabeza a por el marco de Iraizoz. El combate, nulo, acabó con malas sensaciones. Los dos equipos perdieron una oportunidad de enderezar un camino, del que eso sí, sólo se llevan dos pasos.

Marca.com

HA ESTADO EQUILIBRADO PORQUES SE HA DEJADO LA PUERTA A CERO"

Tapia: "Hemos tenido lagunas"

El entrenador del Málaga, Antonio Tapia, por su parte, ha comentado que su equipo "ha estado equilibrado, porque se ha dejado la puerta a cero y se han creado cinco o seis ocasiones de gol", aunque también ha reconocido que "han existido algunas lagunas".

El técnico cordobés se ha referido a un penalti que reclamó el Málaga por un posible derribo a Adrián y ha dicho que le extraña que el jugador se haya tirado y que el propio futbolista ha comentado que ha existido contacto.

Tapia, que ha apuntado que "el Athletic tampoco ha creado muchos problemas", ha avisado de que "todavía hay que mejorar, aunque hoy se ha hecho un desgaste enorme y los cuatro de arriba, además de atacar, han defendido".

Marca.com

TRAS EL EMPATE A CERO FRENTE AL MÁLAGA

Caparrós afirma que el Athletic ha dado seguridad

El entrenador del Athletic, Joaquín Caparrós, ha afirmado tras el empate de su equipo en Málaga (0-0) que el conjunto vasco "ha dado seguridad" y que eso mismo se debe mostrar en el estadio de San Mamés. "Estoy contento. Hemos dado seguridad, hemos jugado lejos de nuestra portería, aunque nos ha faltado esa pizca arriba. Hemos ido a por el partido, creando ocasiones y teniendo la posesión", ha señalado el entrenador sevillano.

Caparrós ha añadido que el Athletic tiene sus "carencias, pero dentro de casa hay que ser un equipo como el de hoy", y sobre el Málaga ha subrayado que "es un equipo muy fuerte y va a ganar muchos partidos con esas acciones de estrategia".

Marca.com

Primera | Málaga 0 - Athletic 0

Málaga y Athletic, secos

Tapia y Caparrós se neutralizan y firman las tablas. Primer punto de los dos equipos. Buen partido de Susaeta. Luque y Pablo Barros se reivindican



Málaga y Athletic están para esto. Para correr como leones y sufrir como perros. Así será toda la temporada y así fue ayer, donde se neutralizaron en un partido bravo, jugado con nobleza, pero también con limitaciones. La ovación de La Rosaleda a su tropa al final fue casi de victoria, era elogiable el esfuerzo. Y algo así debió parecerle a Caparrós, que goteó los cambios al final contento por el botín. En estos tiempos que corren en Bilbao, ser pragmático es más que suficiente.

Así que los dos se fueron felices, que para eso tienen tantos puntos como el Barça y sin 380 millones de euros de presupuesto. El fondo, sin embargo, es más serio que el chiste fácil. Se contentaron porque en realidad no produjeron ninguna oportunidad nítida de gol en todo el partido. El Málaga se acercó por estrategia y el Athletic, cuando Caparrós decidió cambiar su plan inicial de patada a seguir. Llorente es interminablemente alto, pero prefiere seguir la jugada por abajo y asociarse con Yeste, David López y Susaeta. Es el lenguaje que entiende, y con el que mejor le fue la temporada pasada a Caparrós. Está a tiempo, porque con ese estilo apuró al Málaga al principio de la segunda parte, donde tuvo un arreón de talento. Luego se acordó de que el punto le servía y se tiró otra vez atrás. Menos mal que Iraizoz estuvo seguro y que el Málaga, es objetivo, tiene un problema en ataque. No ha marcado un gol en dos partidos, aunque el panorama mejora con Luque. Harto como ha estado de visitar los banquillos de la Premier y la Eredivisie, Luque, que es un enamorado de esto, está que se come la hierba. Probar antiguas hazañas (intentó el gol de Pelé en el minuto 9) y hacer cosas de siempre: acostarse en la banda y salir por el lado bueno en busca de su mejor tesoro: el disparo. Nadie diría que Luque ha estado tres años perdido para la causa. El Málaga le necesita y de su sociedad con Baha pueden esperarse grandes cosas.

Tampoco es para ponerse exigente a estas alturas. Porque qué se le puede pedir a Iturraspe y Balenziaga, debutantes ayer que acabaron con la lengua fuera. Cumplieron el sueño de su vida, debutar con la camiseta del Athletic. Darán la vida si hace falta.

Tapia, que le pegó un patadón a los fantasmas de la primera jornada y consiguió que su Málaga fuese un equipo muy reconocible (interesante presentación en sociedad de Barros, un pitbull), utilizó mejor los cambios que Caparrós. Al menos los quiso para ganar. Adrián se inventó un par de jugadas y en una de ellas cayó sospechosamente en las proximidades del área (no quedó claro que fuese penalti). Y Eliseu, el sputnik, se recorrió cincuenta metros en el último minuto. Si entra, La Rosaleda se cae. Pero si Málaga ha sido capaz de soportar dos años de penurias, sabrá esperar momentos más felices. En Bilbao, por más que duela, también se conforman. Correr como leones y sufrir como perros. Eso es lo que hay.

Debuts de Luque, Iturraspe y Balenziaga
Después de tres años lejos del fútbol español, Luque debutó con el cinco a la espalda. Jugó un buen partido y fue muy incisivo. En el Athletic fue el primer día de Balenziaga e Iturraspe. El último tuvo que ser sustituido por Ion Vélez porque empezó a sufrir calambres. Los tres se llevaron buena nota.

El duro
Amorebieta Porque sacó el codo delante de Weligton y Clos Gómez le sacó tarjeta amarilla.


El dandy
Susaeta Dejó sello con un par de slaloms por la derecha a los que sólo le faltó remate.


¡Vaya día!
Duda Jugó un buen partido, pero le falta coger la distancia. Antes en la estrategia era infalible.


El crack
Barros Kilómetros de calidad. Aparece por todos lados para robar. A Yeste le dio la tarde.

MÁLAGA 0
ATHLETIC 0

Málaga Arnau Gámez Cuadrado Weligton Nacho (59') Miguel Ángel Pablo Barros Duda Baha (85') Calleja Luque (76') Goitia Adrián (76') Hélder Eliseu (59') Manolo Gaspar Cheli (85') Lolo

Athletic Iraizoz Iraola Ocio Amorebieta Balenziaga Javi Mtez. Iturraspe (76') Susaeta Yeste D. López (90') Llorente (88') Lafuente Ustaritz Gabilondo (88') Etxeberria Gurpegi (90') Ion Vélez (76') Casas

Árbitro Clos Gómez, del Colegio Aragonés. Amonestó a Cuadrado (53'), Miguel Ángel (62') y Amorebieta (72').

Incidencias La Rosaleda. 25.200 espectadores. Ambientazo en la vuelta del Málaga a Primera División, con nuevos palcos VIPS. No convenció el estado del césped, con demasiadas calvas y muy seco, lo que dificultó la conducción del balón de ambos equipos. Como en cada campo del fútbol español, hubo una numerosa colonia de seguidores del Athletic de Bilbao que se fueron satisfechos con el empate final.

AS.com



primera | Málaga 0 - Athletic 0

Málaga y Athletic consiguen sus primeros puntos

Málaga y Athletic no fueron capaces de mover el marcador, en un partido muy disputado en el que los leones estuvieron mejor pero no materializaron sus ocasiones. Un punto para cada uno en el regreso del fútbol de primera a La Rosaleda, tras dos temporadas.



El Málaga volvía como local a Primera División, tras dos temporadas, y logró su primer punto de la temporada tras igualar a cero ante el Athletic de Bilbao, equipo que también inaugura su casillero de puntos tras un partido igualado y de dominio alterno.

El técnico del Málaga, Antonio Tapia, optó por dos delanteros, el franco-marroquí Nabil Baha y el reciente fichaje Albert Luque, que dejó Ámsterdam por Málaga, y además incluyó a otra de las contrataciones, el mediocentro brasileño Pablo de Barros, que debutó para dirigir y conducir el balón.

Una alineación ofensiva más que la mostrada por su homólogo en el banquillo del Athletic de Bilbao, Joaquín Caparrós, que utilizó solamente como referente en ataque al renqueante Llorente, con problemas físicos, y por detrás, de enlace, al excelente Yeste.

El primer lanzamiento con intención del Málaga llegó en el minuto trece. Fue el portugués Duda, que recogió un pase de su compañero Calleja, en la frontal, se volvió y su disparo, flojo y centrado, lo atajó el guardameta Iraizoz.

El único equipo que buscó el gol fue el Málaga. Calleja, se escoró a la izquierda y su golpeo salió rozando el poste izquierdo de la portería del Iraizoz. El conjunto bilbaíno movió el balón, aunque los acercamientos al área malaguista fueron escasos.

Los minutos transcurrieron y el Málaga buscó el primer gol en su regreso a Primera División. Lo tuvo el delantero Baha, quien cogió un balón dentro del área y su disparo lo despejó Iraizoz en el minuto 26.

Cuatro minutos después, Yeste, con gran calidad, elevó con astucia el balón cuando estaba escorado y dentro del área pequeña y Arnau tuvo que intervenir por el extraño que hizo el esférico.

La primera parte se consumió, pero antes Luque tuvo una ocasión, de las más claras, pero su lanzamiento se fue fuera por muy poco.

Al descanso un 0-0 con un equipo, el Málaga, que mereció un gol, al buscarlo más que un oponente que mostró un oficio de equipo de Primera División.

Ese oficio lo demostró en el inicio de la segunda parte. El Athletic de Bilbao cogió el mando del partido y Javi Martínez, Iturraspe y Susaeta se impusieron en el centro del campo.

El Athletic de Bilbao estuvo mejor pero el gol no llegó. El Málaga, muy cansado, en los primeros veinte minutos ni se acercó a la portería de Irazoz, por lo que Tapia movió el banquillo. El rápido centrocampista portugués Eliseu Pereira sustituyó al lateral izquierdo Nacho Pérez para buscar rapidez por las bandas e intentar desnivelar el marcador.

El partido bajó de nivel. El cansancio de los jugadores de los dos equipos se notó, aunque el conjunto visitante siguió con ganas aunque sin excesiva eficacia.

La salida del delantero Adrián por Luque ofreció algo más de velocidad a los locales y en los últimos diez minutos, sobre todo a balón parado, buscaron la victoria, pero el gol no llegó y el empate fue el reflejo de lo que se vio en el campo, en el que cada equipo dominó en un período.

AS.com



A falta de rosa, sobró patata

En La Rosaleda muy pocas flores dedicaron Málaga y Athletic al acalorado aficionado. Espinas tampoco se contabilizaron demasiadas y es que el marco, pese a su denominación y por culpa de su lamentable estado, es básicamente propicio para que brote la patata. A ello, al patatazo, se dedicaron todos, salvo en fases muy concretas, como el arranque de la segunda mitad, cuando los rojiblancos extrajeron cierta inspiración en el manejo, gracias quizás a que Yeste halló el sitio donde recibir y tocar para romper líneas y así saltarse por un rato la dinámica del envío largo, el rechace y vuelta a empezar.

El Málaga trató de meterle intensidad siempre, pero perseverar en un fútbol tan previsible con opciones de éxito pasa por intimidar al rival y los de Caparrós, pese a salir con dos críos sin bagaje (Balenziaga e Iturraspe), se mantuvieron serios, sin ese balón que voló demasiados minutos sin dueño. Abocado al cero en su casillero el Málaga, el resultado dependía del grado de valentía del que estaba enfrente. Y resultó que el Athletic afrontó el tramo final con ganas de puntuar y lo logró.

AS.com

:Aplausos:

Buen trabajo por la recopilación de noticias Mario. Se te agradece :bien:

Y como no, gracias a ti tambien Yuninho por ese pedazo de resumen!

Gran recopilacion, sip, mil gracias Mario

GRACIAS A LOS DOS

gracias

Unos 60.000 euros de recaudación

El Málaga consiguió unos 60.000 euros por la venta de las más de 2.000 entradas que fueron retiradas de las taquillas de La Rosaleda para asistir al encuentro del pasado domingo frente al Athletic. La asistencia fue de 25.200 espectadores, según la estimación del club, ya que hubo un problema que impidió la contabilización a través de los tornos.

SUR.es