De descarte a necesario
Cheli encara una situación extraña en Málaga, tras un verano en el que le comunicaron que no contaban con él. Actualmente es el único hombre natural de banda derecha
Si hay un jugador en el Málaga que está sometido a un continuo examen como si de un fichaje, un canterano o una estrella se tratase, ése es Cheli. La espada de Damocles pende sobre el lepero en cada balón luchado, cada centro e incluso cada regate que intenta con la elástica blanquiazul. Un juicio público que perdura esta segunda temporada en el Málaga y que ha levantado demasiada controversia entre la afición y en el seno del club.
El futuro de Cheli este verano siempre fue incierto. Pero ahora, regates del destino, es el único inquilino de una banda derecha mermada y casi el único titular fijo del once de Tapia. "Aquí todo el equipo trabajamos para lo mismo. Para ayudar al ´míster´ y para salir desde el principio. Este año he tenido la fortuna de salir desde el inicio", admite casi con recelo.
Esta pretemporada le colgaron el cartel de ´descartado´ y su futuro estaba lejos de Málaga. "En principio cuando recibí la llamada de que era uno de los descartados me lo tomé como algo que era del mundo del fútbol". Cheli tenía algunas ofertas, pero aunque se vio fuera del equipo, su primera intención siempre fue seguir de blanquiazul.
"Tienes que buscarte equipo y todo eso, son cosas lógicas del fútbol y más cuando un equipo asciende. No me lo tomé demasiado mal. La prioridad era buscar un equipo que me quisiera", admite el jugador blanquiazul.
Ahora, con la seguridad que otorga el cierre del mercado, Cheli se perfila como el principal inquilino de la banda derecha. "Hay otros compañeros polivalentes que pueden ocupar esta banda derecha. Lo han hecho en otras ocasiones", admite.
"Lo normal es que haya un par de jugador por puesto. En este caso el interior diestro puro soy yo. Va a estar bien reforzada la banda. Lo normal es que haya un par de jugadores por puesto. La secretaría técnica decidió hacer esto y sus motivos tendrá", puntualiza Cheli, que no considera ni una ventaja ni un inconveniente ser el único inquilino de ese carril del ´ocho´.
Escepticismo. Sin embargo, la continuidad de Cheli en el equipo ha generado muchos escépticos blanquiazules. Para ellos, Cheli no pide clemencia. "A mí me da igual. Tiene que haber de todo. Habrá gente a la que le gustaré y a otros que no. Yo a quien tengo que convencer es al entrenador", insiste.
"El tiempo lo dirá si se verá este año a un Cheli diferente. Yo voy a intentar jugarlo todo. Entrenar el mayor y mejor tiempo posible, convencer al ´míster´ y ya se verá", añade.
En el balance colectivo, Cheli, como otros muchos componentes de la plantilla, piensa que la permanencia estará complicada, pero que hay muchos rivales. "El objetivo es la permanencia. Toca sufrir. Como nosotros hay siete u ocho equipos. Hay que hacerse fuertes en casa".
El arranque no ha sido bueno, pero el centrocampista onubense quiere mandar un mensaje de optimismo y tranquilidad. "Esto acaba de empezar. Sólo son tres puntos y nuestra Liga comienza este domingo ante el Athletic, que tenemos que ganar como sea", finalizó Cheli.
La Opinión