La presencia de dos hombres por delante aconseja cederlo para que tenga minutos, mientras el Racing se suma a la puja
A la espera de más cambios si se producen nuevas incorporaciones (con un máximo de tres), la lista de descartes facilitada por el entrenador del Málaga, Jesualdo Ferreira, ha deparado una sorpresa: Toribio. La inclusión del mejor jugador del equipo en la segunda vuelta no termina de ser comprendida por los aficionados.
Toribio trata de ponerle al mal tiempo buena cara. Pese a su juventud, la trayectoria no ha sido un camino de rosas. Está acostumbrado a superar obstáculos y a arriesgar. Hace sólo un año aceptó fichar por el Atlético Malagueño, en Tercera, en vez de continuar en el Terrassa (donde, por cierto, actuó en las posiciones más insospechadas). Por eso, como nadie le ha regalado nada, desdramatiza todas las situaciones adversas y no se viene arriba con las positivas.
El descarte de Toribio parece tener mucho que ver con el cambio de sistema y, probablemente, con la facilidad que supone descartar a los jóvenes y, por tanto, a los que menos cobran antes que a otros cuya continuidad siempre ha sido más que dudosa, pero que cuentan con una ficha alta o a los que pretende recuperar el entrenador. Ferreira sólo cuenta con un centrocampista de contención en su sistema, sobre el que además debe girar el dispositivo defensivo. Es, sin duda, la pieza más adecuada para encontrar el equilibrio.
Sandro Silva
La llegada del brasileño Sandro Silva, al que Ferreira y su grupo de trabajo han seguido durante el último año para su incorporación al Oporto (o en su defecto, al conjunto en el que recalaran de no seguir en el cuadro luso), ha limitado las opciones de Toribio. Primero, porque la confianza del entrenador en un jugador de 2,2 millones es plena, y segundo, porque las referencias sobre la capacidad táctica de Juanito (por no hablar de su enorme personalidad en el campo y en el vestuario) son excelentes.
También es cierto que el cuerpo técnico, que inicialmente sí se fijó en las virtudes de Toribio -así sucedió en el análisis de diversas actuaciones del Málaga la campaña anterior por parte de Ferreira y su mano derecha, José Gomes-, esperaba más del centrocampista durante esta pretemporada. La prueba más palpable se refleja en las alineaciones durante la concentración en la localidad alemana de Bad Kreuznach. Con Juanito lesionado, ni siquiera se vistió. Tal vez la llegada de Sandro Silva pueda haber influido en el estado de ánimo del futbolista pese a que es sobradamente conocida su competitividad.
Ahora Toribio está pendiente de destino. Ofrecido junto a David González y Jordi Pablo a distintos conjuntos de Segunda División desde hace más de una semana, la Ponferradina había tratado de asegurarse su cesión para que no se lo arrebataran.
Competidor
Sin embargo, cuenta con un serio competidor: el Racing de Santander. Y no extraña en absoluto. El coordinador técnico en el club cántabro es Juanjo González, que llegó a la entidad como segundo entrenador de Juan Ramón Muñiz y que, lógicamente, por su amistad con este ha seguido muy de cerca al Málaga.
Los datos del centrocampista catalán en la segunda parte del campeonato fueron llamativos: jugó dieciocho de los veinte últimos partidos (sus dos ausencias fueron obligadas), fue titular en dieciséis y disputó trece completos. En la fase decisiva, cuando el Málaga se jugaba la vida, Toribio llegó a participar en encuentros infiltrado o muy mermado físicamente. Todo ello ha derivado en la sorpresa generalizada entre los aficionados por su inclusión en la lista de descartes. Aunque ya no hay vuelta atrás
http://malagacf.diariosur.es/noticias/2010...e-20100817.html
A la espera de más cambios si se producen nuevas incorporaciones (con un máximo de tres), la lista de descartes facilitada por el entrenador del Málaga, Jesualdo Ferreira, ha deparado una sorpresa: Toribio. La inclusión del mejor jugador del equipo en la segunda vuelta no termina de ser comprendida por los aficionados.
Toribio trata de ponerle al mal tiempo buena cara. Pese a su juventud, la trayectoria no ha sido un camino de rosas. Está acostumbrado a superar obstáculos y a arriesgar. Hace sólo un año aceptó fichar por el Atlético Malagueño, en Tercera, en vez de continuar en el Terrassa (donde, por cierto, actuó en las posiciones más insospechadas). Por eso, como nadie le ha regalado nada, desdramatiza todas las situaciones adversas y no se viene arriba con las positivas.
El descarte de Toribio parece tener mucho que ver con el cambio de sistema y, probablemente, con la facilidad que supone descartar a los jóvenes y, por tanto, a los que menos cobran antes que a otros cuya continuidad siempre ha sido más que dudosa, pero que cuentan con una ficha alta o a los que pretende recuperar el entrenador. Ferreira sólo cuenta con un centrocampista de contención en su sistema, sobre el que además debe girar el dispositivo defensivo. Es, sin duda, la pieza más adecuada para encontrar el equilibrio.
Sandro Silva
La llegada del brasileño Sandro Silva, al que Ferreira y su grupo de trabajo han seguido durante el último año para su incorporación al Oporto (o en su defecto, al conjunto en el que recalaran de no seguir en el cuadro luso), ha limitado las opciones de Toribio. Primero, porque la confianza del entrenador en un jugador de 2,2 millones es plena, y segundo, porque las referencias sobre la capacidad táctica de Juanito (por no hablar de su enorme personalidad en el campo y en el vestuario) son excelentes.
También es cierto que el cuerpo técnico, que inicialmente sí se fijó en las virtudes de Toribio -así sucedió en el análisis de diversas actuaciones del Málaga la campaña anterior por parte de Ferreira y su mano derecha, José Gomes-, esperaba más del centrocampista durante esta pretemporada. La prueba más palpable se refleja en las alineaciones durante la concentración en la localidad alemana de Bad Kreuznach. Con Juanito lesionado, ni siquiera se vistió. Tal vez la llegada de Sandro Silva pueda haber influido en el estado de ánimo del futbolista pese a que es sobradamente conocida su competitividad.
Ahora Toribio está pendiente de destino. Ofrecido junto a David González y Jordi Pablo a distintos conjuntos de Segunda División desde hace más de una semana, la Ponferradina había tratado de asegurarse su cesión para que no se lo arrebataran.
Competidor
Sin embargo, cuenta con un serio competidor: el Racing de Santander. Y no extraña en absoluto. El coordinador técnico en el club cántabro es Juanjo González, que llegó a la entidad como segundo entrenador de Juan Ramón Muñiz y que, lógicamente, por su amistad con este ha seguido muy de cerca al Málaga.
Los datos del centrocampista catalán en la segunda parte del campeonato fueron llamativos: jugó dieciocho de los veinte últimos partidos (sus dos ausencias fueron obligadas), fue titular en dieciséis y disputó trece completos. En la fase decisiva, cuando el Málaga se jugaba la vida, Toribio llegó a participar en encuentros infiltrado o muy mermado físicamente. Todo ello ha derivado en la sorpresa generalizada entre los aficionados por su inclusión en la lista de descartes. Aunque ya no hay vuelta atrás
http://malagacf.diariosur.es/noticias/2010...e-20100817.html