El Málaga pedirá 2,5 millones de euros a Mendoza y a Roldán
Malaga C.F. - Noticias
Serafín Roldán y Antonio Mendoza, con Peiró
Es el resultado de la pieza de calificación que ultiman los administradores concursales del club y que, según ha anunciado hoy Punto Radio, presentarán en próximas semanas en el Juzgado de lo Mercantil. En ese documento, Pablo Franco y Daniel Pastor subrayarán la presunta culpabilidad de Antonio Mendoza y Serafín Roldán en el caos financiero en el que quedó sumido el Málaga en 2006. Los consideran culpables de una gestión negligente del club, que derivó en su quiebra, en su precipitada venta a la familia Sanz y en la obligación creada a los nuevos propietarios de abrir un proceso concursal para hacer frente a una deuda de más de 27 millones de euros. Mendoza y Roldán tendrían que hacer frente a esa multa con su propio patrimonio, aunque será el juez de lo Mercantil quien decida si procede o no esa indemnización de 5 millones de euros en total.
La pieza de calificación es el documento que sigue a la resolución del proceso concursal. El Málaga resolvió ese trance al final de la temporada del ascenso a Primera y, a partir de ahí, se abrió un período por el cual tocaba estudiar si existía responsabilidad de los anteriores gestores en la mala situación económica del club. En el momento en el que el Juzgado de lo Mercantil declare el concurso culpable, se pasaría automáticamente al Ministerio Fiscal para que presentara un escrito de acusación contra lo que se consideran responsables (Roldán y Mendoza) y al que el Málaga se podría adherir como acusación particular. La negligencia tiene en muchos casos consecuencias penales.
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Serafín Roldán y Antonio Mendoza, con Peiró
Es el resultado de la pieza de calificación que ultiman los administradores concursales del club y que, según ha anunciado hoy Punto Radio, presentarán en próximas semanas en el Juzgado de lo Mercantil. En ese documento, Pablo Franco y Daniel Pastor subrayarán la presunta culpabilidad de Antonio Mendoza y Serafín Roldán en el caos financiero en el que quedó sumido el Málaga en 2006. Los consideran culpables de una gestión negligente del club, que derivó en su quiebra, en su precipitada venta a la familia Sanz y en la obligación creada a los nuevos propietarios de abrir un proceso concursal para hacer frente a una deuda de más de 27 millones de euros. Mendoza y Roldán tendrían que hacer frente a esa multa con su propio patrimonio, aunque será el juez de lo Mercantil quien decida si procede o no esa indemnización de 5 millones de euros en total.
La pieza de calificación es el documento que sigue a la resolución del proceso concursal. El Málaga resolvió ese trance al final de la temporada del ascenso a Primera y, a partir de ahí, se abrió un período por el cual tocaba estudiar si existía responsabilidad de los anteriores gestores en la mala situación económica del club. En el momento en el que el Juzgado de lo Mercantil declare el concurso culpable, se pasaría automáticamente al Ministerio Fiscal para que presentara un escrito de acusación contra lo que se consideran responsables (Roldán y Mendoza) y al que el Málaga se podría adherir como acusación particular. La negligencia tiene en muchos casos consecuencias penales.