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El club da un giro a la negociación con el cuadro hispalense, en el que Jiménez afirmó categóricamente: «Terminará recalando aquí»
El Málaga ha pasado a una nueva negociación con el Sevilla, una vez que se rompió el principio de acuerdo para un intercambio de Lolo y Duda por Jesús Gámez. La entidad de La Rosaleda pedirá cuatro millones de euros y al portugués a cambio de que el lateral fuengiroleño se marche al club hispalense.
La situación ha cambiado mucho en los últimos días. En el inicio de las negociaciones entre el Málaga y el Sevilla la operación parecía ventajosa para ambos equipos, hasta que las conversaciones se frenaron al conocerse una 'cláusula de descenso' que el club de La Rosaleda quería imponer a Lolo y Duda en caso de que se perdiera la categoría, por las que las fichas pasaban a reducirse a la mitad.
Posteriormente, el entrenador del Sevilla, Manolo Jiménez, dio a entender a Lolo que contaba con él para la próxima temporada, lo que parece haber dejado satisfecho al centrocampista, que estaba deseoso de tener una tranquilidad sobre su futuro. Lolo fue muy claro en una rueda de prensa el domingo en Costa Ballena (en Rota, Cádiz), el lugar de concentración del Sevilla. «Me quedo aquí y ahora tengo que disputar el puesto a mis compañeros. Las negociaciones con el Málaga están rotas y sólo pienso en quedarme», dijo.
El Málaga ha reorientado su pulso con el Sevilla, consciente de que muestra un gran interés por disponer de Jesús Gámez y de que Duda no entra especialmente en los planes de Jiménez. El jugador luso ha de incorporarse hoy al trabajo en Costa Ballena, después de haber gozado de más permiso que otros jugadores por disputar partidos con su selección en junio. A primera hora de la mañana pasará unas pruebas médicas antes de unirse al trabajo con sus compañeros.
Por su parte, Jiménez no oculta en público su obsesión por disponer de Gámez. «A día de hoy yo cuento con su concurso y no tengo ninguna duda de que terminará recalando en el Sevilla. No sé de qué forma, eso tendrán que negociarlo Monchi y nuestro presidente», manifestó ayer a ABC de Sevilla.
Convencimiento
«Cuando un conjunto quiere contar con un jugador y ese futbolista quiere ir a ese equipo, al final las partes se tienen que entender... A no ser que el Málaga quiera retener al futbolista en contra de su voluntad, pero creo que el asunto lo solucionarán los dos presidentes, porque son dos personas que dirigen muy bien a sus clubes», añadió en el mismo tono.
Las molestias en el tendón de Aquiles de Konko, el lateral derecho con el que cuenta el Sevilla ahora, y su escasa adaptación la pasada campaña, han hecho considerar al club que Gámez (cuyo contrato en el Málaga tiene diez millones de euros de cláusula de rescisión) es una operación básica. La segunda opción es la del defensa del Espanyol Sergio Sánchez.
En lo que concierne al resto de operaciones que negocia el Málaga en los últimos días, ayer no se produjo un avance importante en ninguna de ellas. El club tiene aparcadas las opciones para incorporar al central serbio del Oporto Stepanov y al delantero portugués de origen guineano Edinho (AEK de Atenas), con los que dispone de principios de acuerdo.
Forestieri
Lo más cercano podría ser la cesión del italoargentino Forestieri, pero el club comienza a sentirse desconcertado por los giros diarios que experimenta la negociación. En este sentido, el presidente del club, Fernando Sanz, fue claro ayer: «¿Qué cuál de las operaciones está más cerca? Todas y ninguna. Parece que está todo 'ok' y luego se deshace todo. Cuando legamos a un acuerdo se cambia. Pienso que están siendo poco serios».
Las dificultades con Forestieri se centran en la exigencia del Udinese, club que comparte con el Génova sus derechos, que podría reclamar una cifra económica por la cesión en función de los partidos que jugara el atacante en el Málaga.
El último frente en el que se halla inmerso el club es Luque. Fernando Sanz admitió que conversa todos los días con el catalán, que el jueves pasado logró un gran tanto en la goleada del Ajax al Bristol en una cita de pretemporada. Aunque el jugador le ha manifestado a su técnico, Martin Jol, que no desea seguir en el cuadro holandés, de momento no se ha producido una decisión sobre su continuidad. No obstante, este periódico pudo saber que el atacante se entrenó ayer con jugadores del filial, en lo que podría ser una advertencia
www.diariosur.com
esto ya si es otra cosa, ojala sea eso
El Málaga ha pasado a una nueva negociación con el Sevilla, una vez que se rompió el principio de acuerdo para un intercambio de Lolo y Duda por Jesús Gámez. La entidad de La Rosaleda pedirá cuatro millones de euros y al portugués a cambio de que el lateral fuengiroleño se marche al club hispalense.
La situación ha cambiado mucho en los últimos días. En el inicio de las negociaciones entre el Málaga y el Sevilla la operación parecía ventajosa para ambos equipos, hasta que las conversaciones se frenaron al conocerse una 'cláusula de descenso' que el club de La Rosaleda quería imponer a Lolo y Duda en caso de que se perdiera la categoría, por las que las fichas pasaban a reducirse a la mitad.
Posteriormente, el entrenador del Sevilla, Manolo Jiménez, dio a entender a Lolo que contaba con él para la próxima temporada, lo que parece haber dejado satisfecho al centrocampista, que estaba deseoso de tener una tranquilidad sobre su futuro. Lolo fue muy claro en una rueda de prensa el domingo en Costa Ballena (en Rota, Cádiz), el lugar de concentración del Sevilla. «Me quedo aquí y ahora tengo que disputar el puesto a mis compañeros. Las negociaciones con el Málaga están rotas y sólo pienso en quedarme», dijo.
El Málaga ha reorientado su pulso con el Sevilla, consciente de que muestra un gran interés por disponer de Jesús Gámez y de que Duda no entra especialmente en los planes de Jiménez. El jugador luso ha de incorporarse hoy al trabajo en Costa Ballena, después de haber gozado de más permiso que otros jugadores por disputar partidos con su selección en junio. A primera hora de la mañana pasará unas pruebas médicas antes de unirse al trabajo con sus compañeros.
Por su parte, Jiménez no oculta en público su obsesión por disponer de Gámez. «A día de hoy yo cuento con su concurso y no tengo ninguna duda de que terminará recalando en el Sevilla. No sé de qué forma, eso tendrán que negociarlo Monchi y nuestro presidente», manifestó ayer a ABC de Sevilla.
Convencimiento
«Cuando un conjunto quiere contar con un jugador y ese futbolista quiere ir a ese equipo, al final las partes se tienen que entender... A no ser que el Málaga quiera retener al futbolista en contra de su voluntad, pero creo que el asunto lo solucionarán los dos presidentes, porque son dos personas que dirigen muy bien a sus clubes», añadió en el mismo tono.
Las molestias en el tendón de Aquiles de Konko, el lateral derecho con el que cuenta el Sevilla ahora, y su escasa adaptación la pasada campaña, han hecho considerar al club que Gámez (cuyo contrato en el Málaga tiene diez millones de euros de cláusula de rescisión) es una operación básica. La segunda opción es la del defensa del Espanyol Sergio Sánchez.
En lo que concierne al resto de operaciones que negocia el Málaga en los últimos días, ayer no se produjo un avance importante en ninguna de ellas. El club tiene aparcadas las opciones para incorporar al central serbio del Oporto Stepanov y al delantero portugués de origen guineano Edinho (AEK de Atenas), con los que dispone de principios de acuerdo.
Forestieri
Lo más cercano podría ser la cesión del italoargentino Forestieri, pero el club comienza a sentirse desconcertado por los giros diarios que experimenta la negociación. En este sentido, el presidente del club, Fernando Sanz, fue claro ayer: «¿Qué cuál de las operaciones está más cerca? Todas y ninguna. Parece que está todo 'ok' y luego se deshace todo. Cuando legamos a un acuerdo se cambia. Pienso que están siendo poco serios».
Las dificultades con Forestieri se centran en la exigencia del Udinese, club que comparte con el Génova sus derechos, que podría reclamar una cifra económica por la cesión en función de los partidos que jugara el atacante en el Málaga.
El último frente en el que se halla inmerso el club es Luque. Fernando Sanz admitió que conversa todos los días con el catalán, que el jueves pasado logró un gran tanto en la goleada del Ajax al Bristol en una cita de pretemporada. Aunque el jugador le ha manifestado a su técnico, Martin Jol, que no desea seguir en el cuadro holandés, de momento no se ha producido una decisión sobre su continuidad. No obstante, este periódico pudo saber que el atacante se entrenó ayer con jugadores del filial, en lo que podría ser una advertencia
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esto ya si es otra cosa, ojala sea eso
oskilla
Frente313
toperfe
si te quedas, o si te vas, Gracias
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Janko
Jose Antonio
4 kilos y un lacito le pone fernando,ya vereis.
MadGoat
Mario
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