Propone 3,5 millones y tres jugadores a cambio del fuengiroleño mientras que el Sevilla sólo negociaría con futbolistas como contrapartida
¿Sólo jugadores o dinero más jugadores? Ese es el dilema al que se enfrenta el Málaga en estos días con Jesús Gámez como protagonista. ¿Sevilla o Valencia? El club de La Rosaleda no tiene prisa en decidir el destino del fuengiroleño mediante un traspaso, pero tiene sobre la mesa las propuestas de los dos clubes interesados en él.
La novedad más significativa pasa por el hecho de que el Valencia ha movido ficha por Jesús Gámez. En La Rosaleda ya conocen su oferta por el lateral, uno de los objetivos más importantes del director deportivo, el ex internacional Fernando, y el entrenador, Unai Emery, para un proyecto renovado. Según ha podido saber este periódico, la cifra asciende a 3,5 millones más la inclusión de varios jugadores. La pelota está ahora en el tejado del Málaga.
Hace seis meses SUR ya adelantó que el Valencia iba a echar el resto por Jesús Gámez. En el mercado existe la convicción de que en el momento en que el Madrid cierre la contratación de Villa se producirá el habitual efecto dominó de cada año. Sólo entonces comenzarán los movimientos. El dinero reactivará el mercado y desde ese instante se sucederán las operaciones.
El Málaga sabe desde enero que el interés del Valencia es firme. Los contactos entre el presidente blanquiazul, Fernando Sanz, y el representante del jugador, Joseba Díaz, han sido diversos. Este último tiene la orden expresa del director deportivo valencianista de no cerrar la operación con otro club sin contar con él. Gámez es una prioridad.
Al mismo tiempo, el Sevilla también lo pretende, pero continúa con dudas, como el año pasado. Entonces, frenó la incorporación porque prefería esperar a ver el rendimiento del fuengiroleño en Primera División. Ahora maneja diversas opciones (otra es Sergio Sánchez, del Espanyol) y valora cuál es la mejor en una relación calidad-precio.
Según ha podido saber SUR, hace dos fines de semana Joseba Díaz conversó telefónicamente con Sanz y le expuso la oferta del Valencia: 3, 5 millones (cerca de 600 millones de pesetas) y tres jugadores. Cabe recordar que la cláusula de rescisión de Jesús Gámez asciende a diez millones y que el presidente siempre hizo hincapié en que no se rebajaría un solo euro, pero una cantidad de ese tipo supone un paso importante para rebajar la deuda.
Presión
La relación de jugadores incluye a dos centrocampistas y un joven extremo, aunque puede variar si el Málaga ejerce la suficiente presión al Valencia. Los futbolistas serían Sunny, Míchel y Jordi Alba. El primero fue fichado procedente del Ejido -donde brilló precisamente a las órdenes de Antonio Tapia- y esta temporada ha estado cedido en Osasuna, aunque una lesión lo ha mantenido casi inactivo.
Míchel es un joven valor de la cantera que ha adquirido especial protagonismo en la recta final, con un nivel interesante. Ha sido convocado por Emery en los quince últimos partidos y utilizado por el entrenador en once de ellos, cuatro veces como titular. El tercero en cuestión, Jordi Alba, es un extremo zurdo que ha estado cedido en el Gimnastic a las órdenes de César Ferrando y que ha cuajado una gran segunda vuelta.
No se descarta que la cantidad satisfaga al Málaga. Ahora bien, en el capítulo de los jugadores pueden surgir puntos de desencuentro. Según fuentes cercanas al presidente, Sanz es partidario de que lleguen futbolistas en propiedad y no parece que el Valencia vaya estar por la labor. Asimismo, en el club gusta especialmente el delantero venezolano Miku, que ha firmado dieciséis goles en el Salamanca y que a sus incuestionables calidad y velocidad ha unido esta temporada a las órdenes del técnico canario Amaral más capacidad de sacrificio y mejor tono en la presión. El problema radica no sólo en que Emery quiere verlo en acción durante la pretemporada, sino en que otros conjuntos también están interesados en su incorporación. En cualquier caso, la 'operación Jesús Gámez' permitiría contar con prioridad respecto a posibles competidores.
Mientras tanto, el Sevilla se mantiene a la expectativa y no oculta su interés por Jesús Gámez después de los fiascos en su posición con Hinkel y Konko para tener una alternativa clara a Daniel Alves. Ahora bien, el club hispalense prefiere incluir sólo jugadores como contraprestación o, como mucho, una cantidad muy baja.
Ahora el Málaga debe decidir. O más dinero y jugadores de un nivel inferior, o sólo futbolistas, pero con caché que indudablemente elevarían la calidad del equipo. La pelota está en el tejado de Fernando Sanz... y también de Jesús Gámez.
http://malagacf.sur.es/noticias/2009-06-20/oferta-valencia-provoca-serio-20090620.html