Tras la visita de los comisarios, el Málaga pone en marcha la maquinaria para adaptar el estadio a las necesidades que exige la UEFA
La semana pasada se cumplían 30 años de un acontecimiento histórico en La Rosaleda, la disputa de varios partidos del Mundial'82 (Escocia-Nueva Zelanda, URSS-Nueva Zelanda y URSS-Escocia). Para aquel evento, el coliseo de Martiricos experimentó un profundo lavado de cara. Tres décadas después la transformación no será tan radical, la gran obra se completó años atrás, pero La Rosaleda debe adaptarse a las exigencias de la UEFA. Y tendrá que vestirse de gala y ponerse guapa para los días en los que más números de ojos se posen sobre ella.
Días atrás, varios operarios del ente europeo estuvieron en Málaga para establecer el protocolo de actuación de cara a los partidos que se disputarán en La Rosaleda. La sensación que se llevaron, tanto del estadio como de la ciudad (alojamientos o comunicaciones) fue excelente. No cambian sustancialmente entre la Champions y la Europa League las peticiones. El crecimiento de esta última ha sido notable y la centralización de derechos ha valido para darle un grandísimo impulso. No es la Champions, pero sí es más que la última UEFA.
La previa de Champions, por cierto, sí tiene los ingredientes previos (el atractivo himno, cartelería y demás) desde hace tres temporadas. Aunque no se piden para esa fecha (21, 22, 28 o 29 de agosto) todos los ajustes necesarios. La Rosaleda está estos días manga por hombro. Algunos trabajos son independientes de los de la UEFA. Como por ejemplo, el césped. En breve se empezarán a poner los tepes de verano. Desde que el club contrató a Benito Mateo como greenkeeper hace dos años, el verde sólo ha tenido parabienes. Para el Costa del Sol ante el Everton (11 de agosto) todo estará en estado óptimo. También se realizan trabajo de mantenimiento y reposición de sillas o paneles de publicidad, por ejemplo.
Se ha centralizado la posición de la prensa (arriba del palco). La UEFA supervisa hasta el tiro de cámara, la producción de los partidos va por su cuenta. Instalará un cableado propio para su señal. Representantes de Digital + y TVE, poseedoras de los derechos para Champions, ya han estado en La Rosaleda también. Se le habilitan varios espacios propios, dentro y fuera del césped. Privilegios por el oneroso pago de los derechos.
Se ampliará la zona destinada para los aficionados rivales, la UEFA obliga. Si la actual (esquina superior entre Tribuna y Gol) acogía en torno a 500 espectadores, la nueva deberá estar prevista para triplicar o cuadruplicar esa cantidad. Dependerá también del rival que venga. Habrá que estudiar el caso de los abonados y su reubicación para partidos europeos, algo en lo que el club trabaja y estudia diversas fórmulas. Todo dependerá de si se pasa la previa o no y de los rivales en liza.
La UEFA también insiste en las zonas VIP. Quiere un trato preferente para sus invitados y patrocinadores y, por ello, también se realizarán algunas reformas. El ente, que paga a los clubes por participar, partidos jugados y victorias generosamente, se apropia de la publicidad. Por ejemplo, los marcadores, los banquillos o los vomitorios llevarán la cartelería y la publicadad propia de la UEFA, no la del club. También hay curiosidades, como que los clubes tienen potestad para dar la rueda de prensa oficial en el estadio o en el hotel, antes o después del entrenamiento.
En fin, cambios para los que La Rosaleda ya se adapta para escuchar el himno de la Champions.
http://www.malagahoy.es/article/malagacf/1291270/la/rosaleda/se/pone/guapa.html