Pellegrini y sus colaboradores no lanzan las campanas al vuelo y creen que el equipo estará más preciso con trabajo Pese a la goleada, el cuerpo técnico trata de perfeccionar todos los mecanismos del juego
El Málaga todavía está en construcción. Quedó patente en el estreno en el estadio Sánchez Pizjuán y también, a pesar de la goleada (4-0), el pasado lunes en La Rosaleda frente al Granada. El cuerpo técnico encabezado por Manuel Pellegrini trata de perfeccionar todos los mecanismos para que el equipo ruede como el último tercio de la pasada Liga, con un juego mecanizado, casi de memoria. El claro triunfo en el segundo encuentro no esconde que el equipo tiene aún mucho margen de mejora. Son asignaturas pendientes para el chileno que se resolverán con trabajo, ritmo y humildad.
Adaptación en curso
El Málaga fue casi un rodillo en la recta final de la campaña anterior. Con más o menos acierto y con más o menos solvencia, y más allá de los resultados, el equipo ofreció un juego exquisito. El insultante control de la posesión y las continuas triangulaciones desembocaron en las oportunidades necesarias para sentenciar los encuentros. El compromiso con el Granada fue una buena piedra de toque y se observó una clara mejoría en la sincronización de los movimientos, aunque conviene recordar que las cuatro piezas más ofensivas eran nuevas: Cazorla, Buonanotte, Joaquín y Van Nistelrooy. En determinadas fases del encuentro se sucedieron errores por una falta de precisión que los técnicos consideran que se alcanzará con el trabajo semanal.
Despistes al sacar el balón
La piedra angular del estilo de Pellegrini es el toque y para ello son necesarios los apoyos. Al técnico chileno se le vio el lunes mover la cabeza e intercambiar impresiones con el banquillo -presumiblemente con su segundo, Rubén Cousillas- cuando la defensa se complicó innecesariamente la vida en el primer escalón del juego malaguista, al sacar el balón. En este sentido parece más achacable a un exceso de confianza y así quedó de manifiesto en varias acciones. Como suele recordar el técnico, perder la referencia del compañero puede acarrear un serio contratiempo.
Regalos en zonas de riesgo
El análisis reposado del encuentro también ha dejado como conclusión determinadas concesiones en zonas de riesgo. De un lado, están las situaciones propias del juego. El Málaga regaló varias veces el balón muy cerca de su frontal al pretender jugar en horizontal (la más relevante, una de Cazorla cerca de la media hora) y en este aspecto Pellegrini ha incidido constantemente en su etapa como técnico malaguista. Una acción de este tipo siempre pilla a contrapié a los elementos defensivos y deriva en serios apuros. La otra concesión al Granada tuvo su origen en dos jugadas a balón parado en las que se produjeron sendas pérdidas de balón que obligaron a los dos futbolistas del Málaga que cerraban a hacer un sobresfuerzo para resolver el desaguisado. Los contragolpes del Granada, el primero en un error inusual de Cazorla (poco después de lograr el primer gol, a la salida de un córner), y el segundo en una falta lateral (al filo del descanso), pudieron tener clara incidencia en el marcador.
Un ritmo todavía bajo
Es una obviedad que el Málaga todavía da sus primeros pasos. Esto se acentúa con la escasez de encuentros disputados durante un mes. Desde la cita con el Peñarol en el Costa del Sol, el equipo solo había afrontado el debut liguero en Sevilla y el triangular en Murcia con el Villarreal y el Valencia. La falta de ritmo -evidente en Sevilla y también apreciable con el Granada- no preocupa en exceso a los técnicos. Consideran que el trabajo y la continuidad de la competición, ya sin tantos parones, permitirán comprobar la verdadera dimensión del equipo. Además, también se achaca a cierto estrés en el ambiente debido a esa ansiedad por comenzar de verdad la Liga.
Estrategia ofensiva
El Málaga abrió el marcador en una acción ensayada y también buscó sorprender al Granada en otra jugada de pizarra en un libre indirecto. La pasada temporada Pellegrini también buscó el aprovechamiento de este tipo de acciones, pero entonces la prioridad era inculcar el estilo a los jugadores para ganar en confianza con la posesión del balón y así tratar de obtener las victorias necesarias para subsistir. El lunes se comprobó el deseo de sacar rédito a algunas fisuras del adversario. El primer gol llegó en un córner sacado en corto a la frontal, porque el Granada solo coloca a un hombre en la zona de rechace, pero siempre en el centro. Y también en los saques de esquina se buscó sin éxito explotar que el contrario dejaba libre el segundo palo. Así, por ejemplo, Demichelis, que suele ir más en busca del remate al primero, intentó en los córners aparecer en el segundo para beneficiarse de un saque en largo o de una prolongación.
Más concentración
En el polo opuesto el Málaga sufrió en un par de saques de esquina -sobre todo, uno en el minuto 65, cuando el balón pasó por delante de Caballero- y Pellegrini exige más contundencia, la misma que se echó en falta contra el Sevilla y en momentos puntuales con el Granada. Pero a balón parado la concentración es imprescindible, sobre todo si el equipo está limitado en centímetros o en mentalidad defensiva en este tipo de acciones (el lunes jugaron Duda, Buonanotte, Joaquín o Cazorla).
El riesgo de partirse en dos
También parece cuestión de trabajo, pero Pellegrini hizo gestos elocuentes durante la cita con el conjunto rojiblanco de que había que estar con las líneas más juntas. Y aunque el triunfo parecía más que garantizado, el equipo se partió en dos, precisamente el mal endémico que tanto costó subsanar de la etapa de Jesualdo Ferreira. En la recta final la zaga lo pasó muy mal.
Sentido colectivo
Esa es una de las prioridades para Pellegrini. El equipo debe ser un conjunto, un bloque con un sentido colectivo. El fútbol de apoyo y toques así lo requiere Pero además el reto del técnico es concienciar a todos de que las individualidades no marcan el camino. Durante el partido con el Granada hubo al menos media docena de oportunidades en las que el afán de protagonismo personal echó por tierra opciones claras de gol. Cuanto mejor rinda el equipo y mejores resultados obtenga, más beneficios y lucimiento para todos.
http://malagacf.diariosur.es/noticias/2011-09-15/malaga-mucho-margen-mejora-20110915.html