El director deportivo del Málaga CF se desnuda en el plano personal. Durante veinte minutos, está prohibido hablar de fútbol
El hombre que ha traído al Málaga CF a una constelación de estrellas, fue bailaor hasta los 18-20 años. ¿De dónde es? De Jerez de la Frontera. Ha vivido, además, en Sevilla, Valencia, Gran Canaria, Tarragona y ahora en Málaga. Ya han pasado los seis meses más duros, los que estuvo sin su mujer y sin su hija.
Antonio Fernández (Jerez, 27/08/1970) desea que llegue septiembre para desconectar e irse de vacaciones con su mujer a un circuito por Nueva York y Miami. Mientras, está pegado a sus tres teléfonos móviles.
¿Sabe de qué vamos a hablar?
No tengo ni idea.
De todos menos de fútbol.
Perfecto.
¿Es verdad que carga el móvil 3 ó 4 veces al día de tanto hablar?
Suelo llevar tres móviles. Uno lo dejo en el despacho, de reserva, porque muchas veces se me bloquea y es cierto que más de una carga les tengo que meter.
Dice Joaquín que usted tiene arte, como mucha gente de Jerez, la tierra del cante y del baile. De hecho, antes de meterse en un despacho fue bailaor.
Sí, en una tierra como Jerez, con poco que te guste el flamenco de niño, haces tus pinitos. Es la tierra por antonomasia del cante y del baile flamenco y me gusta. Soy un gran aficionado al flamenco.
Y lo de bailaor, ¿cómo surgió?
De pequeño, allí se baila con mucha normalidad. Lo dejé por una importante lesión de rodilla. Bailé hasta los 18 ó 20 años.
¿Actuó con algún artista conocido o alguno se hizo famoso?
Tengo mucha relación con el mundo del espectáculo: Kiko Gaviño (antes Los Caños y luego Kiko & Sara), gente de por allí que le gusta mucho el fútbol y el flamenco. Cada vez que puedo, voy a un concierto. Mi abanico de posibilidades del espectáculo es muy amplio. Se me puede ver en una ópera o escuchando en una peña flamenca a cualquiera que cante por soleá. Esa expansión es cultura. Hace poco vi «Carmen».
¿Ha apadrinado a artistas?
Conozco a David de María (de Jerez, también) desde que tenía 14 años. Le grabé la primera maqueta, porque vi que tenía condiciones para triunfar. Él estaba en un quinteto (Kelian 71), había que echarle un cable y después de esa maqueta arrancó en solitario. Fue el inicio de su carrera. Estaba siempre componiendo. Tenemos muy buena amistad y él, cuando tiene un día libre, se escapa por Málaga y nos vemos.
¿Quién ha sido su espejo?
Referencias hay muchas, pero no tengo un perfil de persona que me haya enseñado o sea un espejo. De todo el mundo se puede sacar lo bueno y desechar lo malo. Y crear tu propio estilo de vida.
¿Pero no admira a alguien?
Me gusta muchísima gente. Pero para mí, una referencia son mis padres. Admiro a gente famosa, pero no hay un icono. Si nos vamos al fútbol, aunque no queramos hablar de eso, he tenido la suerte de trabajar con Monchi, Miguel Ángel Ruiz o Fernando Hierro (todos, directores deportivos), que son referentes cada uno en su estilo.
¿Quién le gusta del cante?
Hay gente nueva, que está saliendo, pero para mí un cantaor que se ha mantenido con el tiempo y aún triunfa es José Mercé.
¿Y en el baile flamenco?
Joaquín Grilo. Ha marcado una época, unas tendencias. Es la referencia a nivel nacional e internacional del baile flamenco por encima de los que hayan tenido más marketing o publicidad.
¿Y en la copla?
No soy muy coplero. Pero alguien única fue Rocío Jurado.
¿Conoce a muchos famosos?
No me gustan los focos. Con mi cargo en el Málaga, es imposible, pero trato de no estar en la punta del iceberg. Sí tengo amigos actores, cantantes, bailarines. Para mí es una desconexión total hablar con un actor que no sepa que el fútbol son 11 contra 11, y yo no sé lo que se cuece en el mundo del «actoreo». Es amigo mío el actor David Castillo, el famoso «Jonathan» de «Aida», que lo conozco desde los 9 años y ya tiene 19. Me pide todo tipo de consejos.
¿Cómo es Antonio Fernández lejos de un despacho?
Me gusta disfrutar de la familia. Estoy casado desde 1996, hace 15 años, mi mujer se llama Ana Eva y tengo una niña con 12 años, que se llama Paula. Me gusta hacer lo que se hace en el entorno familiar.
¿Cómo logra desconectar?
Me gusta disfrutar de cuando tengo días libres, a diferencia de mucha gente, lo que me gusta es quedarme en casa en vez de viajar. Si me dicen que me invitan a un viaje, les digo que mejor a una comida. Soy una persona muy cercana, amigo de mis amigos, me gusta ser fiel. Soy una persona muy normal.
¿Su familia vive con usted?
Ahora sí, pero al estar mi hija en pleno curso escolar, se quedaron en Madrid. Han sido 6 meses muy duros. Llegas a una ciudad nueva, donde no tienes amigos. Tras dos derrotas seguidas, llegas a casa y es duro no hablar con nadie. Son cosas que suelen comentarse o exteriorizarse. Por suerte se solventó, y tengo a la familia, que es un punto de apoyo importante.
¿Una manía confesable?
Una muy absurda, cuando voy en coche, es que el volumen esté en número par. No soporto que esté en el 23, por ejemplo, sino en el 22 ó 24. Me pone nervioso ver un número impar.
¿Es de tomar cafés?
Soy muy poco cafetero. Prefiero el cola cao para desayunar. Quizás, un café solo tras la comida.
¿Fuma?
Soy un fumador social, fumo cuando salgo a tomar un copa, en una fiesta o acto social.
¿Y de comida?
No soy complicado. Detesto el queso. Sólo olerlo me da náuseas. Es una fobia imposible de superar. Me gusta la dieta mediterránea. No soy de salsas o natas, porque le quita el sabor original. Soy muy marisquero. Carne, pescado, frutas y verduras son las bases. Al comer fuera y a deshoras, si no cuidas la alimentación, al final el cuerpo lo paga.
¿Qué haría si le tocaran 185 millones de euros, como a un británico la semana pasada?
Sería un infeliz, me sentiría más perseguido. Lo importante es salud, una buena familia, amigos en los momentos malos y dinero para vivir.
¿Ha volado a los 5 continentes?
Me falta Oceanía. A mi mujer le aterran los vuelos largos. Me ha costado unos tres o cuatro años convencerla de ir a América.
¿Algún proyecto en marcha?
Hay un taller en valores éticos y sociales de la Fundación del Málaga CF, que se llama «Mucho más que fútbol», dirigido a excluidos sociales, lo llevamos a Valdemoro (Madrid) 2 años y ahora a la cárcel de Alhaurín de la Torre. Una vez al mes viene un personaje. Por Valdemoro pasaron Del Bosque, Hierro, Azpilicueta, Sergio Ramos...
El director deportivo del Málaga CF posa en el hotel de concentración del equipo de Campoamor.
http://www.laopiniondemalaga.es/malagacf/2011/07/17/antonio-fernandez-mes-medio-colaboro-excluidos-sociales-alhaurin/437283.html