El escrutinio al 99% da 19 concejales al PP en Málaga, dos más que en 2007
Francisco de la Torre repetiría mayoría absoluta, mientras que el PSOE tendrían 9 concejales, perdería 3, e IU tres, con lo que ganaría uno
El mapa electoral en Málaga capital ya ha comenzado a dibujarse con el 99% de los votos escrutados al filo de las diez menos cuarto de la noche. Según estos primeros datos, el PP revalidaría su mayoría absoluta, llegando hasta los 19 concejales (dos más que en 2007). El PSOE, por el contrario, pierde presencia en el pleno municipal, bajando de 12 concejales que tenía en 2007 a 9. IU, por su parte, gana un edil, por lo que sube de 2 a 3.
Según los datos facilitados por el Ministerio de Interior, el porcentaje de participación en Málaga a las seis de la tarde horas era del 45,98%, ni un punto superior al registrado en las comicios municipales de 2007, cuando hasta esta hora se contabilizaba un 45,25%. Sin embargo, los datos a las siete de la tarde situaba la misma en casi el 48% frente al 45,25 a la misma hora de 2007. Un aumento de la participación que esta misma tarde ya valoraba el PP.
La vicesecretaria general del PP, Margarita del Cid, ha comparecido a las ocho y media de la tarde ante los medios informativos para congratularse de que haya subido la participación en estas elecciones municipales respecto a las de 2007. "Es una buena noticia", afirmó, y dijo que es fruto de que el "PP se marcó como objetivo ilusionar a los malagueños".
Del Cid informó de que en la provincia ha subido un 2,4% la participación, y en Málaga capital ha aumentado un 4%. No ha querido anticipar resultados y se ha remitido a una nueva rueda de prensa a las nueve y media de la noche, aunque ha dejado intuir la victoria electoral del PP, futo de que llevan "trabajando meses".
Por otro lado, señaló que la jornada electoral se ha desarrollado "con normalidad, sin incidencias destacables". Margatira del Cid estuvo acompañada del concejal de Participación Ciudadana y coordinador de la campaña de Francisco de la Torre, y del parlamentario andaluz Fran Oblaré.
La jornada electoral de este 22-M ha transcurrido sin incidentes. El subdelegado del Gobierno en Málaga, Hilario López Luna, destacó esta mañana "la normalidad que ha imperado" en la apertura de los colegios electorales de la provincia malagueña y en la constitución de las mesas y ha esperado que todo el día se desarrolle dentro de esta línea.
López Luna señaló que "un poco antes de las 10.00 horas estaban todas las mesas abiertas y funcionando con normalidad", con retrasos aislados en algunos de los colegios electorales.
En la provincia se han producido, por el momento, un par de incidencias. Concretamente, en San Pedro de Alcántara, a las 9,15 horas, en una mesa había "dificultades" por falta de vocales y en Torremolinos también se ha retirado propaganda electoral de "cierta dimensión".
Un total de 1.116.313 residentes en Málaga están llamados hoy a las urnas para elegir a los 1.203 concejales, 101 alcaldes y dos regidores pedáneos que dirigirán los ayuntamientos de la provincia durante los próximos cuatro años.
Han concluido quince días de campaña y varios meses de intensa y dura precampaña en un ambiente que ha estado presidido, de un lado, por los aires de plebiscito de estos comicios municipales, ya que en el primer trimestre de 2012 -si no hay adelanto electoral- se celebrarán elecciones generales y autonómicas andaluzas, y, de otro, por el momento tan opuesto con el que afrontan la cita de hoy los dos principales partidos de la provincia. El PSOE concurre con una marca en horas bajas y unas malas expectativas de voto, según las encuestas. El PP, en cambio llega con el viento a favor de los sondeos y cierta euforia ante la que sus líderes han repetido que no hay nada ganado y han instado a los suyos a acudir a las urnas.
Estos comicios, además, son la primera gran prueba de fuego a la que someten los líderes provinciales de ambos partidos, el socialista Miguel Ángel Heredia y el popular Elías Bendodo, desde que en el segundo semestre de 2008 accedieron a la máxima dirección de sus partidos. Los dos se juegan mucho en lo que respecta a mantener cuotas de poder institucional como a afianzar su poder orgánico. Por ello han hecho miles de kilómetros en estos días recorriendo los distintos municipios para apoyar a sus candidatos. Bien es cierto que el secretario general del PSOE no va en ninguna lista y el presidente popular es el número dos de la candidatura de la capital y aspirante, aunque no oficial, a presidir la Diputación Provincial.
Las grandes batallas
Precisamente el gobierno de esta institución supramunicipal junto a las dos mancomunidades de municipios (occidental y oriental) y algunos ayuntamientos costeros -Estepona, Mijas, Vélez-Málaga y Rincón de la Victoria- y otros del interior como Antequera son las principales caballos de batalla en estas elecciones. Y es que en ellos es donde se presentan más incertidumbre sobre el resultado electoral, toda vez que en otras localidades, a priori, el panorama está más claro.
Respecto a la capital, la encuesta de Ikerfel publicada por SUR el pasado domingo revelaba un crecimiento del PP, cifrado entre uno y dos concejales más, a costa de un PSOE a la baja, mientras que IU mantendría su actual representación de dos ediles. De cumplirse esos pronósticos los populares podrían alcanzar su techo electoral en Málaga -los diecinueve ediles que consiguió Celia Villalobos en 1999- y los socialistas sufrirían un serio tropiezo dada la apuesta que la dirección del partido ha hecho por la candidatura de María Gámez.
En cuanto a los objetivos, el reto de los socialistas es el asalto a los ayuntamientos del litoral, feudo de los populares desde hace dieciséis años. En este sentido, el PSOE ha acometido una profunda renovación de sus cabezas de cartel en estas ciudades. Mientras que los populares apuestan por valores seguros en estas plazas. Las prioridades del PP se centran en conservar su actual preponderancia en la franja costera, hacerse con la dirección de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental y subir en respaldo en el interior -su tradicional punto débil- como trampolín para gobernar la Diputación.
Izquierda Unida, por su parte, aspira a mantener su actual cuota de poder y a recoger los votos de desencanto socialista presentándose como la única opción de izquierdas. Una incógnita es el respaldo que pueda conseguir una fuerza política joven como es Unión Progreso y Democracia (UPyD), así como el papel que en determinados municipios puedan jugar algunos partidos independientes y menores, ya que pueden convertirse en la llave de algunos gobiernos municipales.
En un clima general donde la ciudadanía tiene en su escala de prioridades asuntos como el desempleo o la crisis económica antes que las elecciones municipales, uno de los retos es el de la movilización del electorado. Hace cuatro años en la provincia la participación fue del 57,94%. Por ello, los partidos -fundamentalmente las fuerzas de izquierdas, cuyo votante es siempre más reacio a acudir a las urnas- han insistido en hacer un llamamiento a la movilización de los malagueños.
http://www.diariosur.es/20110522/local/malaga/escrutinio-concejales-malaga-2007-201105222133.html