Solo lo consiguió a comienzos de los 70, cuando estuvo cinco temporadas, y con su actual denominación, con el récord de siete

Los resultados de ayer le permitieron al Málaga asegurar matemáticamente la permanencia, aunque desde el martes se daba como segura tras el triunfo frente al Sporting (solo podía descender en el 0,004 por ciento de los casos). De este modo, encadena por tercera vez en su historia cuatro años en la máxima categoría.

Pese a que el estreno del Málaga en Primera División se produjo en 1949, la condición de equipo 'ascensor' que siempre se le atribuyó hizo que casi nunca tuviera continuidad entre los 'grandes'. De hecho, durante las dos primeras décadas desde su irrupción en la élite no consiguió estar más de dos años consecutivos. Hubo que esperar a la gloriosa etapa de los 70, el llamado 'quinquenio de oro', no solo para que elevara su listón, sino para que incluso batiera un récord que parecía inalcanzable. Encadenó cinco temporadas seguidas, desde la 1970-71 hasta que la ruptura entre el entrenador, Marcel Domingo, y el ídolo, Viberti, puso la semilla del descalabro. En la 1974-75 acabaron los tiempos dorados.

Después, en los 80, el Málaga llegó a encadenar tres temporadas entre los mejores del fútbol español. Fue el periodo que arrancó tras el Mundial 82, continuó con una temporada mágica (la del 6-2 al Madrid y el 5-1 al Atlético) y concluyó la fatídica tarde del Betis con un empate y una carambola a tres bandas, pero como consecuencia especialmente de una segunda vuelta desastrosa.

Gran etapa
El 'bautizo' del Málaga como Club de Fútbol trajo consigo el comienzo de la etapa de más continuidad. Fue llegar y triunfar. Nada menos que siete temporadas consecutivas, incluido por primera vez el debut en competición europea. Desde la 1999-2000 a la 2005-2006 el cuadro de La Rosaleda completó una época inolvidable, porque en las cinco primeras apenas pasó apuros para permanecer y en tres de ellas tuvo opciones en las últimas jornadas para disputar de forma directa la Copa de la UEFA (ahora Liga Europa). En la sexta el club rectificó a tiempo, con la marcha de Manzano y la llegada de Antonio Tapia, pero en la séptima se vino abajo por diversas circunstancias.

Ahora, tras los resultados de la penúltima jornada, el Málaga se asegura un cuarto año. Será la tercera vez que suceda en la historia. Antonio Tapia (en su segunda etapa), Juan Ramón Muñiz y Manuel Pellegrini obraron el milagro, los dos primeros en años con enormes limitaciones económicas, y el último tras una planificación y un comienzo muy desafortunados. Es de esperar que con las ideas más claras y el afán de crecimiento de los propietarios se iguale la segunda mejor etapa en la élite (aquella de comienzos de los 70). Y a ser posible, con mucho menos sufrimiento.