La supresión de la subvención directa de 10.000 euros provoca que muchas familias renuncien a su vivienda
Las promociones de viviendas protegidas corren serio peligro. Adquirir una VPO se ha convertido en una misión imposible para decenas de malagueños. Existen diversas causas, pero la eliminación de la denominada ayuda directa a la entrada que concedía el Gobierno ha sido la gota que ha culminado el vaso: ha derrumbado las expectativas y posibilidades de numerosos ciudadanos.
La supresión de esta ayuda directa (de 4.000 a 11.200 euros de una tacada y con una media de 10.000 euros) por el cierre anticipado del Plan Vivienda 2009-2012 de Fomento ha dejado sin esta subvención a un gran número de compradores. Esta cantidad a fondo perdido ha sido eliminada de un plumazo desde el pasado 31 de diciembre.
Cierre del grifo al crédito
Los compradores se enfrentan además al endurecimiento de las condiciones por parte de los bancos en la concesión de hipotecas, lo que se traduce en que numerosas familias hayan visto truncados sus sueños de adquisición de una vivienda protegida. Una circunstancia que ha tenido además su máximo exponente en la capital, ya que en los últimos años se ha proyectado y edificado el mayor paquete de viviendas de los últimos años, y el Instituto Municipal de la Vivienda, pese a al aluvión inicial de solicitudes, se está enfrentando a verdaderos problemas para la venta de éstas, a pesar de que pueden llegar a costar entre un 40 y 50% menos que una casa de renta libre.
El mercado se reorganiza y los promotores de viviendas, tanto los privados como los públicos, ven el futuro en el alquiler y el alquiler con opción a compra, ante las denegaciones masivas de las hipotecas y la imposibilidad de realizar esos primeros pagos al promotor que en muchos casos se efectuaba con esta ayuda directa, indicaron fuentes del Instituto Municipal de la Vivienda y de la Delegación de Obras Públicas y Vivienda de la Junta. De hecho, el Gobierno autonómico intentó sin éxito que se prolongasen estas ayudas, ya que la supresión le perjudica también directamente.
Los promotores
El caso es que la medida afecta a compradores y promotores. Éstos últimos no ven ahora rentable la construcción de VPO por su imposibilidad de venderlas una vez construidas y así lo han manifestado a través de la asociación de promotores públicos.
Esta acción incide y afecta directamente a la vivienda pública cuyo objeto es garantizar el derecho de la ciudadanía a una vivienda digna y, sobre todo, a la población menos pudiente y más débil.
También se han suprimido otras ayudas, como subvenciones directas al promotor. Respecto a las que afectan directamente al comprador, a pesar de la eliminación de esta ayuda a la entrada, Fomento ha ampliado por contra a cinco años más la denominada subsidiación del préstamo que en definitiva se trata de dinero para el pago de las cuotas de los préstamos. Si actualmente un comprador puede recibir 50 euros al mes durante diez años (depende de los casos), ahora se prolonga a cinco años más.
La supresión de esta ayuda directa (de 4.000 a 11.200 euros de una tacada y con una media de 10.000 euros) por el cierre anticipado del Plan Vivienda 2009-2012 de Fomento ha dejado sin esta subvención a un gran número de compradores. Esta cantidad a fondo perdido ha sido eliminada de un plumazo desde el pasado 31 de diciembre.
Cierre del grifo al crédito
Los compradores se enfrentan además al endurecimiento de las condiciones por parte de los bancos en la concesión de hipotecas, lo que se traduce en que numerosas familias hayan visto truncados sus sueños de adquisición de una vivienda protegida. Una circunstancia que ha tenido además su máximo exponente en la capital, ya que en los últimos años se ha proyectado y edificado el mayor paquete de viviendas de los últimos años, y el Instituto Municipal de la Vivienda, pese a al aluvión inicial de solicitudes, se está enfrentando a verdaderos problemas para la venta de éstas, a pesar de que pueden llegar a costar entre un 40 y 50% menos que una casa de renta libre.
El mercado se reorganiza y los promotores de viviendas, tanto los privados como los públicos, ven el futuro en el alquiler y el alquiler con opción a compra, ante las denegaciones masivas de las hipotecas y la imposibilidad de realizar esos primeros pagos al promotor que en muchos casos se efectuaba con esta ayuda directa, indicaron fuentes del Instituto Municipal de la Vivienda y de la Delegación de Obras Públicas y Vivienda de la Junta. De hecho, el Gobierno autonómico intentó sin éxito que se prolongasen estas ayudas, ya que la supresión le perjudica también directamente.
Los promotores
El caso es que la medida afecta a compradores y promotores. Éstos últimos no ven ahora rentable la construcción de VPO por su imposibilidad de venderlas una vez construidas y así lo han manifestado a través de la asociación de promotores públicos.
Esta acción incide y afecta directamente a la vivienda pública cuyo objeto es garantizar el derecho de la ciudadanía a una vivienda digna y, sobre todo, a la población menos pudiente y más débil.
También se han suprimido otras ayudas, como subvenciones directas al promotor. Respecto a las que afectan directamente al comprador, a pesar de la eliminación de esta ayuda a la entrada, Fomento ha ampliado por contra a cinco años más la denominada subsidiación del préstamo que en definitiva se trata de dinero para el pago de las cuotas de los préstamos. Si actualmente un comprador puede recibir 50 euros al mes durante diez años (depende de los casos), ahora se prolonga a cinco años más.