Muere Marcel Domingo, entrenador en el lustro de oro del Málaga en los 70
El enfrentamiento con Viberti le restó popularidad y ensombreció su balance: séptimo en la Liga y semifinalista en la Copa
Fue, posiblemente, el entrenador más discutido en la historia de los que dirigieron al Club Deportivo Málaga. Pero en su haber hubo que anotar que fue el primero que estuvo al frente del equipo más de dos temporadas. Marcel Domingo falleció a los 86 años en Arlés (Francia). Llevaba bastante tiempo enfermo. Pero no le había impedido viajar frecuentemente a nuestra ciudad. Concretamente, tenía previsto desplazarse a nuestra ciudad este fin semana. Pero murió ayer, a las seis de la tarde.
La mayor y más brillante etapa de su vida como profesional del futbol la vivió en España. Vino en la temporada 1948-49. Lo trajo Luis Guijarro al Atlético de Madrid, acompañando al marroquí Larbi Ben Barek. Después de actuar con el Español se tituló como entrenador.
Al Málaga llegó para sustituir a Jenos Kalmar, al que había reemplazado como temporero Antonio Carmona Ros. Ya comprometido con el titular, presenció en el Camp Nou la victoria por 0-1, gol de Álvarez, con el que se alcanzó el techo clasificatorio, séptimo. En su actuación como responsable directo del equipo, logró mejorar ese registro blanquiazul en Primera. En el ejercicio 73-74, su segundo año como entrenador malaguista, volvió a alcanzar la séptima posición, pero con récord de puntos. En la anterior ocasión en la que finalizó séptimo en la tabla lo hizo sumando un punto menos. Podría haber pasado a la historia de los entrenadores blanquiazules si no hubiera protagonizado el 'affaire' con Viberti, el ídolo malaguista, con un enfrentamiento que le restó notoriedad y lo elevó al rango del técnico mas discutido en la historia del titular.
Además de mantener al equipo de La Rosaleda entre los diez mejores del fútbol español, anotó el éxito de clasificarlo para una semifinal de Copa, en 1973, frente al Athletic de Bilbao. La que podía haber sido su tercera temporada consecutiva al frente del cuadro de Martiricos no la pudo superar. Sobre el hecho de no haber alcanzado más que cuatro victorias en trece jornadas pesó de forma especial que seis meses antes de que fuera destituido, a propuesta suya el Málaga había echado del elenco a Viberti. Las criticas de los 'vibertianos' echaron leña al fuego de la deficiente puntuación. El 23 de diciembre, en la reunión navideña de la directiva, a medianoche, el presidente, Rafael Serrano Carvajal, anunció el cese del entrenador. No fue, ni mucho menos, tan sorprendente. Porque del fin del ciclo de Marcel Domingo se hablaba en los medios balompédicos anunciándose que no se comería el turrón.
El trigésimo entrenador del Málaga estuvo al frente del equipo desde abril del 72 a diciembre del 74, 972 días. Su balance cuenta con 81 encuentros de Liga y una docena de Copa. De esos partidos, las derrotas fueron 32. Un excelente registro teniendo en cuenta que todos sus partidos fueron de Primera División y que el número de victorias fue, igualmente, de 32. Descanse en paz el que fue uno de los mejores entrenadores en la historia malaguista.
La mayor y más brillante etapa de su vida como profesional del futbol la vivió en España. Vino en la temporada 1948-49. Lo trajo Luis Guijarro al Atlético de Madrid, acompañando al marroquí Larbi Ben Barek. Después de actuar con el Español se tituló como entrenador.
Al Málaga llegó para sustituir a Jenos Kalmar, al que había reemplazado como temporero Antonio Carmona Ros. Ya comprometido con el titular, presenció en el Camp Nou la victoria por 0-1, gol de Álvarez, con el que se alcanzó el techo clasificatorio, séptimo. En su actuación como responsable directo del equipo, logró mejorar ese registro blanquiazul en Primera. En el ejercicio 73-74, su segundo año como entrenador malaguista, volvió a alcanzar la séptima posición, pero con récord de puntos. En la anterior ocasión en la que finalizó séptimo en la tabla lo hizo sumando un punto menos. Podría haber pasado a la historia de los entrenadores blanquiazules si no hubiera protagonizado el 'affaire' con Viberti, el ídolo malaguista, con un enfrentamiento que le restó notoriedad y lo elevó al rango del técnico mas discutido en la historia del titular.
Además de mantener al equipo de La Rosaleda entre los diez mejores del fútbol español, anotó el éxito de clasificarlo para una semifinal de Copa, en 1973, frente al Athletic de Bilbao. La que podía haber sido su tercera temporada consecutiva al frente del cuadro de Martiricos no la pudo superar. Sobre el hecho de no haber alcanzado más que cuatro victorias en trece jornadas pesó de forma especial que seis meses antes de que fuera destituido, a propuesta suya el Málaga había echado del elenco a Viberti. Las criticas de los 'vibertianos' echaron leña al fuego de la deficiente puntuación. El 23 de diciembre, en la reunión navideña de la directiva, a medianoche, el presidente, Rafael Serrano Carvajal, anunció el cese del entrenador. No fue, ni mucho menos, tan sorprendente. Porque del fin del ciclo de Marcel Domingo se hablaba en los medios balompédicos anunciándose que no se comería el turrón.
El trigésimo entrenador del Málaga estuvo al frente del equipo desde abril del 72 a diciembre del 74, 972 días. Su balance cuenta con 81 encuentros de Liga y una docena de Copa. De esos partidos, las derrotas fueron 32. Un excelente registro teniendo en cuenta que todos sus partidos fueron de Primera División y que el número de victorias fue, igualmente, de 32. Descanse en paz el que fue uno de los mejores entrenadores en la historia malaguista.