Un anciano mata a su mujer, incapacitada, e intenta suicidarse La víctima, de 80 años, presentaba dos heridas de arma blanca en el pecho y tenía una almohada sobre la cara Una anciana de 80 años murió ayer en Málaga capital presuntamente a manos de su marido, un hombre de 82, que luego intentó suicidarse. La mujer que los cuidaba encontró a ambos en la cama del dormitorio, y avisó a los vecinos.
Los hechos sucedieron a las 11.15 horas de ayer en el número 1 de la calle Francisco Pacheco, en Carretera de Cádiz. La trabajadora social llegó al domicilio -el 7ºE- a las nueve de la mañana para empezar su turno de trabajo. Su compañera, que se encargaba de su cuidado de la pareja durante la noche, le dijo que tenía que ir al mercado a hacer unas compras.
El suceso ocurrió en el paréntesis en que la joven fue a hacer el recado. El marido, Salvatore M. C., le dio una lista. Cuando regresó con las compras, sobre las once de la mañana, y entró en el cuarto, se encontró con una escena que la empujó a salir corriendo para pedir auxilio.
Ninguna de las puertas que aporreó escaleras abajo se abrió, y llegó hasta la calle. Fue a pedir ayuda a María Dolores Gaitán, que estaba en la tienda de alimentación que regenta. «Subí y entré en el cuarto», relata la dueña de los ultramarinos Santa Paula.
«Ella estaba tumbada boca arriba y tenía alguna mancha de sangre en el camisón, y él estaba al lado. Le pregunté: 'Salvatore, ¿qué ha pasado?' Y él me contestó: 'Que hemos decidido no vivir más, porque esto no es vida'. Yo la miré a ella y, al ver la almohada sobre su cara, le dije: 'Y Linita, ¿cómo está?'. Salvatore me respondió: 'Ella está muerta, pero yo no he podido'». María Dolores asegura que mientras hablaba con el anciano vio un cuchillo en la cama.
La cuidadora y la vecina avisaron a la policía y a los servicios sanitarios, que llegaron en muy poco tiempo. El médico certificó que Catalina M. G. estaba muerta; presentaba dos heridas de arma blanca en el pecho. Salvatore M. presentaba cortes en una muñeca y en el abdomen, por lo que fue evacuado al Hospital Clínico. Según testigos, mientras lo trasladaban, el anciano manifestó: «Dejadme morir». Sigue ingresado, bajo custodia policial, y se prevé que hoy pase a disposición judicial.
La pareja tenía problemas de salud. Sobre todo ella, que al parecer llevaba tres años postrada en una cama -una vecina dice que sus cuidadoras la sacaban a pasear en silla de ruedas- y había perdido facultades, incluso, para hablar. El marido se rompió la cadera, por lo que requería asistencia 24 horas. De hecho, la familia estaba tramitando el ingreso de ambos en una residencia donde estuvieran perfectamente atendidos.
La Subdelegación del Gobierno informó del suceso como un nuevo crimen sexista. La Plataforma 'Violencia 0' ha convocado hoy a las 20.00 horas una concentración de repulsa en la plaza de la Constitución.
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