El equipo de Ferreira no termina de encontrar el camino para mostrarse competitivo a poco más de una semana para que comience el campeonato. El cansancio, la poca compenetración, el cambio de filosofía y las bajas, algunos de los problemas
La pretemporada no es más que el paso previo a la competición. Un periodo obligatorio que sirve para poner a punto la maquinaria de cara al inicio de la Liga. Pese a que no suele reflejar el papel final que desempeña el equipo en la Liga, siempre son sintomáticos los resultados y la puesta a punto que ofrece en el periodo estival.
Desafortunadamente, ahí el Málaga aparece con más sombras que luces en su preparación. Restan nueve días para que el balón comience a rodar de verdad sobre el césped de La Rosaleda y al conjunto de Jesualdo le faltan aún algunos puntos por pulir.
Sin duda, el caballo de batalla más importante y a la vez preocupante es el de los resultados. La confianza en los proyectos se fundamenta en las victorias. Hasta el momento, el Málaga ha disputado ocho partidos en los que ha conseguido cuatro victorias y otras cuatro derrotas. Y eso que los rivales malaguistas no han sido potentes equipos. Así, las victorias ante la Unión Estepona (1-0), Hamilton (2-0), Betis (2-0) y Panionios (1-0) dejaron un poso de tranquilidad mayor que las derrotas ante el Atlético Malagueño (1-0), Mainz 05 (2-0), Wiesbaden (3-2), y Granada (1-0). Los resultados, por lo tanto, son el reflejo casi siempre de lo visto sobre el césped.
Cansancio
El primer argumento para que el Málaga no tenga mejores resultados es la falta de frescura que hasta ahora tiene el equipo. La carga de trabajo está siendo tremenda cada día y los jugadores lo acusan en demasía a la hora de ser competitivos. Jesualdo ha ´premiado´ a la plantilla con duras sesiones de trabajo que llegan a ser dobles casi todos los días. Es más, el domingo, antes del Trofeo Costa del Sol que enfrentará al Málaga ante el Parma, el técnico luso ha preparado un entrenamiento a primera hora de la mañana.
El cansancio es palpable en algunos jugadores más que en otros. Sin embargo, el rendimiento del bloque se hace notar con el paso de los minutos. En el cuerpo técnico son conscientes del duro trabajo al que están sometiendo a la plantilla y de hecho, Jesualdo tiene preparada a partir del lunes una nueva tabla de entrenamientos más livianos. La carga de trabajo fundamental para aguantar toda la temporada ya está introducida en los malaguistas y ahora ya hay que comenzar con el trabajo rutinario y semanal. Y es que ante el Valencia, el Málaga tiene que comenzar a mostrar su mejor cara.
Falta compenetración
Además del cansancio, la falta de compenetración en algunos jugadores también es manifiesta. Son muchas las caras nuevas que han llegado al Málaga esta temporada, y aún faltan algunas más. Galatto, Malagueño, Sandro Silva, ´Papelito´ Fernández, Rondón, Eliseu y Quincy –este último no ha sido presentado como nuevo fichaje pero el técnico asegura que cuenta con sus servicios– son jugadores que necesitan un periodo de adaptación. La mayoría ni siquiera había jugado aún en la Liga española, una de las más competitivas del mundo. El idioma, la ciudad y congeniar con los compañeros que ya estaban son algunas de las barreras que han tenido que superar estos días.
Nuevo sistema
La llegada del nuevo técnico también requiere un periodo de adaptación. El Málaga ha cambiado completamente el chip. El conjunto blanquiazul ha pasado de ser un equipo eminentemente defensivo a uno ofensivo. Evidentemente, por ahora sólo es una intención, ya que el Málaga aún no tiene la frescura ni las ideas tan claras como para poner en práctica el juego que el entrenador luso quiere.
El sistema fetiche del técnico es el 4-3-3 que ya ha generado algún que otro debate entre la afición. La intención de Ferreira es la de contar con una defensa solvente y rápida. Apuntalar el centro del campo con un mediocentro defensivo con capacidad para crear junto a dos centrocampistas más ofensivos. Dos extremos muy rápidos y un delantero rematador.
En principio, el luso cuenta con todos los elementos en la actual plantilla, pero la falta de acoplamiento de los nuevos y los que ya estaban a su sistema está jugando en su contra. Ferreira ha empleado su sistema este verano una y otra vez, pero sin muchos frutos.
Lesionados y fichajes
Además, Ferreira tampoco ha podido contar con todos sus efectivos. Duda y Apoño no se han ejercitado a lo largo de toda la pretemporada. Hélder también ha recaído de su lesión y además, aún faltan como mínimo tres jugadores por llegar. De ello se quejaba el cuerpo técnico tras el partido ante el Granada. «Nos faltan los fichajes», apuntaba el auxiliar Nuno. Lo cierto es que el equipo aún no ha podido estar al cien por cien por una razón o por otra. Una losa que pesa también en el estado anímico. Eso sí, el Málaga tiene este domingo una magnífica oportunidad ante su afición de espantar fantasmas y comenzar a sumar adeptos a su causa.
http://www.laopiniondemalaga.es/malagacf/2010/08/20/sombras-malaga-nueve-dias-arrancar-liga/361700.html