Arnau: «Mi obligación es demostrarle al míster que puede contar conmigo»
El portero y capitán del Málaga sabe que el club busca refuerzos para su demarcación, pero mantiene su lucha por la titularidad
ANTONIO GÓNGORA.-
El catalán Arnau ya es un malagueño más. La próxima campaña será la décima del portero en el conjunto blanquiazul. Ha superado numerosas adversidades y ha formado parte en este tiempo de varios proyectos, con distintos entrenadores. Ahora, cara al futuro, tiene un año más de contrato y es el único guardameta profesional de la plantilla, aunque sabe que los gestores de la entidad están buscando refuerzos para su demarcación, si bien mantiene la esperanza y confía en sus posibilidades de seguir y hasta de ocupar una plaza de titular. «El entrenador sabe lo que tiene que hacer, los jugadores no tenemos nada que ver en los fichajes, por lo que sólo esperaremos para qué ocurre. Mi obligación es demostrarle al míster que puede contar conmigo», explica el jugador en el hotel de concentración de Benahavís.
El veterano portero también se refiere a los primeros entrenamientos, en los que el balón ha sido el principal protagonista, sin que el trabajo físico haya tenido la presencia prevista, por ahora. «La verdad es que la carga de trabajo la hacemos de la misma forma. A nosotros nos gusta más que se haga con balón, y le agradecemos al entrenador que sea así», destaca, a la vez añade: «Pero todas las pretemporadas son diferentes, cada una tiene una historia particular. Pero es igual. Nuestro objetivo es prepararnos lo mejor posible».
Arnau hace especial hincapié en el carácter triunfador que está transmitiendo el entrenador a la plantilla en estos primeros días de trabajo. «Él es un técnico ganador y quiere que nosotros también lo seamos. Tenemos que encontrar esa dinámica», indica. «Pero pienso que nosotros también somos ganadores, en el club lo verán», subraya.
Insiste en que el Málaga conoce lo que tiene que hacer en relación a la incorporación de nuevos futbolistas, mientras que hace especial hincapié en que la llegada de un propietario distinto y, sobre todo, un entrenador que no es de la casa, que no conoce a los futbolistas de una forma directa, ha elevado todavía más la motivación del grupo. «Estas variaciones animan a todos a dar lo máximo, por eso todos hemos llegado preparados a conciencia», agrega el portero, que tiene como compañeros a dos jóvenes del filial: Fran, que es un habitual en las concentraciones en las últimas pretemporadas del primer equipo, y Pol, un jugador de gran talla que procede del Espanyol. El club, de esta forma, tiene previsto hacerse con los servicios de, al menos, un guardameta más. Esta misma semana podría llegar algún jugador nuevo para esta demarcación.