SORPRESA CON HÉLDER

La verdad es que sentimos anunciar el domingo la inclusión de Hélder Rosário (junto a Benachour) entre los descartes de Jesualdo Ferreira. Aún tenemos frescas las vivencias de la temporada del ascenso y muy buenos momentos con el central portugués, un tipo encantador, bromista y, en definitiva, muy buena gente. La decisión del técnico parece irrevocable (el jugador lo sabe desde el viernes) y ha causado una gran sorpresa entre sus compañeros, porque, independientemente de sus problemas con la báscula -por cierto, este año ha llegado como se le pedía-, es un excelente marcador.

JUANMI, SI; ¿Y PORTILLO?

En el club están a la espera de que llegue Ferreira para conocer muchas decisiones. Por ejemplo, qué jugadores jóvenes hacen la pretemporada con el primer equipo. Nos da que va a depender casi con toda seguridad de las necesidades de la plantilla y de los huecos que haya, aunque presumiblemente cuando aterrice ya hablará con los que saben de esto en la cantera -empezando por Antonio Benítez, claro está- para elegir. Sin ir más lejos, Muñiz había incluido a dos fijos en el grupo: el delantero juvenil Juanmi y el medio punta Portillo. El primero ya sabe que sí irá a Benahavís, pero el segundo está a la espera. Curiosamente, pese a que fue muchas veces convocado y jugó poco, el ex entrenador malaguista confiaba mucho en Portillo.

HIDALGO VUELVE A SU OTRA CASA

Para compensar el mal sabor de boca de lo que vive Hélder, en el Málaga se ha acogido con gran satisfacción la noticia del fichaje de Antonio Hidalgo por dos años con uno de los firmes aspirantes al ascenso en Segunda, el Tenerife. Los que mantenemos una estrecha relación con él -bueno, al principio no todo fue de vino y rosas, para qué negarlo- sabemos lo que ha sufrido en el Albacete y la enorme ilusión que le hace volver a su otra casa. Porque, si por él fuera, estaría instalado en Málaga, donde dejó numerosos amigos, las obras del Metro y una gran huella. Sin él, el club quizá habría desaparecido.