La fecha del comienzo de la Liga no se decidirá antes del día 21
Los clubes deben analizar hasta ese día las tres propuestas de calendario, que se diferencian en las jornadas en miércoles
SERGIO CORTÉS.-
El Málaga, como todos los clubes de Primera, aún debe esperar para conocer la fecha del comienzo de la Liga. Aunque resulta un sinsentido, la incógnita no se desvelará antes del día 21 -es decir, dentro de dos lunes, ya en pleno Mundial de Sudáfrica-, la fecha fijada por la Liga de Fútbol Profesional (LFP) para la llamada Junta de División, que tiene que resolver entre otras cuestiones el fin de semana en el que arrancará el campeonato.
Los clubes, teóricamente los primeros interesados en decidir cuanto antes las fechas del calendario -con el fin de que sus técnicos puedan resolver la planificación de la pretemporada y la programación para los más de nueve meses de competición-, no terminan de decidirse. Se da por hecho que su elección será la definitiva, porque la base de la junta directiva de la Real Federación Española de Fútbol está compuesta por representantes de los propios equipos, y siempre se le da el visto bueno al proyecto presentado desde la LFP.
Variables
En esta ocasión la incertidumbre parece más que justificada debido a las distintas variables que deben analizar los dirigentes de los clubes, aunque desde el exterior resulte muy extraño que esta situación no se haya resuelto con suficiente antelación. Y máxime si se tiene en cuenta que la temporada concluyó, en lo que respecta al campeonato liguero, un mes ante de lo habitual en los años impares (cuando no se disputa fase final de la Eurocopa o el Mundial).
Los proyectos para Primera y Segunda varían lógicamente, porque en la categoría de 'plata' la competición se prolonga un mes más (cuatro jornadas), pero debe existir consenso en cuanto a la primera jornada para facilitar la confección de las quinielas, entre otros objetivos. Pero es evidente que la decisión de los clubes de la élite marcará la pauta.
Ahora bien, a día de hoy resulta excesivamente arriesgado dar por segura la fecha del comienzo del campeonato. Las tres propuestas cuentan con sus pros y sus contras. La A contempla empezar el 29 de agosto y concluir pronto, el 22 de mayo, para facilitar la preparación de un equipo español si disputa la final de la Liga de Campeones. Sin embargo, para cumplir con este calendario tan constreñido sería necesario disputar tres jornadas entresemana.
La disputa de más o menos partidos en miércoles puede ser un factor determinante en la decisión final. Sin ir más lejos, también cuenta con adeptos la opción C, que pasa también por empezar el 29 de agosto, pero con final el 19 de junio. Sólo habría una jornada entresemana, pero a cambio quedarían libres dos fechas (el 29 de mayo y el 5 de junio), para facilitar la preparación de la final de la Champions y en previsión de que haya encuentros aplazados. Este aspecto frena a varios clubes.
Por último, está la opción B, que incluye nueve meses exactos de competición. Es quizá la más equilibrada, porque la Liga concluirá no muy tarde (el 22 de mayo) y las jornadas entresemana serían sólo dos. Ahora bien, el comienzo sería el 22 de agosto, demasiado pronto para algunos. Los favorables a esta tesis consideran que es la mejor propuesta, porque el primer parón (el 5 de septiembre, por compromiso de la selección nacional) llegaría tras dos jornadas, y no una, como sucede siempre.
Los clubes, teóricamente los primeros interesados en decidir cuanto antes las fechas del calendario -con el fin de que sus técnicos puedan resolver la planificación de la pretemporada y la programación para los más de nueve meses de competición-, no terminan de decidirse. Se da por hecho que su elección será la definitiva, porque la base de la junta directiva de la Real Federación Española de Fútbol está compuesta por representantes de los propios equipos, y siempre se le da el visto bueno al proyecto presentado desde la LFP.
Variables
En esta ocasión la incertidumbre parece más que justificada debido a las distintas variables que deben analizar los dirigentes de los clubes, aunque desde el exterior resulte muy extraño que esta situación no se haya resuelto con suficiente antelación. Y máxime si se tiene en cuenta que la temporada concluyó, en lo que respecta al campeonato liguero, un mes ante de lo habitual en los años impares (cuando no se disputa fase final de la Eurocopa o el Mundial).
Los proyectos para Primera y Segunda varían lógicamente, porque en la categoría de 'plata' la competición se prolonga un mes más (cuatro jornadas), pero debe existir consenso en cuanto a la primera jornada para facilitar la confección de las quinielas, entre otros objetivos. Pero es evidente que la decisión de los clubes de la élite marcará la pauta.
Ahora bien, a día de hoy resulta excesivamente arriesgado dar por segura la fecha del comienzo del campeonato. Las tres propuestas cuentan con sus pros y sus contras. La A contempla empezar el 29 de agosto y concluir pronto, el 22 de mayo, para facilitar la preparación de un equipo español si disputa la final de la Liga de Campeones. Sin embargo, para cumplir con este calendario tan constreñido sería necesario disputar tres jornadas entresemana.
La disputa de más o menos partidos en miércoles puede ser un factor determinante en la decisión final. Sin ir más lejos, también cuenta con adeptos la opción C, que pasa también por empezar el 29 de agosto, pero con final el 19 de junio. Sólo habría una jornada entresemana, pero a cambio quedarían libres dos fechas (el 29 de mayo y el 5 de junio), para facilitar la preparación de la final de la Champions y en previsión de que haya encuentros aplazados. Este aspecto frena a varios clubes.
Por último, está la opción B, que incluye nueve meses exactos de competición. Es quizá la más equilibrada, porque la Liga concluirá no muy tarde (el 22 de mayo) y las jornadas entresemana serían sólo dos. Ahora bien, el comienzo sería el 22 de agosto, demasiado pronto para algunos. Los favorables a esta tesis consideran que es la mejor propuesta, porque el primer parón (el 5 de septiembre, por compromiso de la selección nacional) llegaría tras dos jornadas, y no una, como sucede siempre.