Se unirá el jueves a los únicos cuatro técnicos que han dirigido 100 partidos del Málaga
Desde aquel 1 de noviembre hasta ahora peina más canas. «El que no arriesga, no gana», es el lema de Juan Ramón Muñiz, que aceptó el reto de Fernando Sanz aun a sabiendas de la tempestad que se avecinaba. El entrenador del Málaga cumplirá el jueves, en la cita de Copa del Rey, 100 partidos oficiales al frente del conjunto blanquiazul. «Lo bueno es que haya clubes que confíen en la gente joven que tiene ilusión y ganas de trabajar», recalcó en su presentación, hace ya 1.160 días. En esta conversación con SUR analiza su etapa como máximo responsable del cuadro blanquiazul, desde que recibió la oferta hasta estos últimos meses de tremenda dificultad.
Su fichaje. «NO ME ESPERABA LA LLAMADA»
«Recuerdo que jugamos un domingo con el Marbella y que al día siguiente, cuando llegué a casa, hablé con Fernando (Sanz). No me esperaba la llamada. Dede el principio asumí que suponía un salto muy importante. Su apuesta por mí me llenó de satisfacción».
El proceso concursal. «FUE EL PARTIDO MÁS DIFICIL»
«La verdad es que el proceso concursal fue muy duro, pero en cierto modo nos hizo crecernos para superar las adversidades. En una situación así el grupo se hizo más fuerte y eso nos ayudó luego en el terreno de juego. Convivir con el ERE y con las dificultades para fichar en el mercado de invierno fue un reto del que salimos indemnes, entre otras cosas porque los jugadores afectados estuvieron muy arropados. La actitud de Chengue (Morales), el &lsquoGato&rsquo (Romero) y Manu fue impresionante. Fernando (Sanz) sufrió muchísimo y también lo pasamos mal con la enfermedad de Luis (Yáñez)».
El Ejido y Las Palmas. «LOS GOLPES MÁS DUROS»
«Las derrotas contra el Ejido y Las Palmas fueron las que hicieron que todo se viera más negro. Sin duda, fueron los golpes más duros, porque la imagen no fue buena y era comprensible que muchos temieran lo peor. En el vestuario sabíamos que podíamos salir de ahí, pero sí es cierto que fue cuando estuvimos más tocados».
La afición y la prensa. «SU APOYO FUE DECISIVO»
«Si hoy existe el Málaga es en gran medida porque todos los sectores fueron a una para evitar el descenso y, con ello, posiblemente la desaparición. Aquel éxito fue de todos, no sólo del equipo. El personal del club no hacía más que animarnos, y el apoyo de la afición y de la prensa fue decisivo. Cuando miro hacia atrás y recuerdo lo difícil que se puso aquello...»
Remontada ante el Vecindario . «FUE CASI COMO EL ASCENSO»
«De todos los partidos de aquella recta final me quedo con el del Vecindario por todo lo que vivimos. El partido se nos puso muy complicado y si hubiéramos perdido... No exagero: la remontada fue como el ascenso. Además, el hecho de que el protagonista fuera Iván Rosado también fue importante, porque a todos nos dio una lección de profesionalidad».
La permanencia. «FUE TODA UNA LIBERACIÓN»
«Cualquier punto sumado en aquella segunda vuelta fue valioso. El triunfo en Tenerife fue muy importante, pero nos faltaba rematar la faena. El gol de Antonio (Hidalgo) ante el Cádiz fue toda una liberación. Yo creo que todos los que sentimos a este equipo nos sentimos aliviados. Pudimos respirar».
Planificación a tiempo. «NOS MOVIMOS CON RAPIDEZ»
«Fernando (Sanz) y yo sabíamos que en condiciones normales no podíamos competir con la mayoría de los clubes de Segunda y por eso nos movimos muy rápidamente. Fue la clave del ascenso, y no ya porque los jugadores fueran buenos, sino porque sabíamos el perfil de jugador que buscábamos para formar un grupo compacto dentro y fuera del campo».
Un comienzo espectacular. «MANTUVIMOS LA HUMILDAD»
«En el equipo sabíamos que la temporada iba a ser larga y que llegarían momentos buenos y otros no tan buenos. Estábamos mentalizados para ello y por eso, aunque comenzamos muy bien ese segundo año en Segunda, la realidad es que mantuvimos la humildad. Éramos conscientes de que no podíamos descuidarnos y de que en el momento en que llegaran dos o tres resultados negativos teníamos que estar más unidos y más fuertes que nunca. Por eso, cuando llegó el momento con la derrota ante el Hércules (4-6), el grupo reaccionó con convicción y ganó merecidamente ante el Sevilla Atlético».
Ascenso contra el Tenerife. «DE ESOS DÍAS QUE NO OLVIDAS»
«Cuando uno vive un ascenso como jugador, lo recuerda siempre. Igual ocurre cuando uno es entrenador, aunque creo que entonces lo valoras más. Sobre todo, porque eres el que conduce el grupo, el principal responsable. El día del Tenerife es de esos días que no olvidas. En el vestuario intenté escaparme de los jugadores, pero no pude. Cuanto más se acercaba el día, más valorábamos dentro del club, y pienso que también fuera, entre nuestra afición y los medios de comunicación, todo aquello por lo que habíamos pasado recientemente. Lo merecíamos todos, pero sobre todo Fernando (Sanz), que cogió el toro por los cuernos cuando debía para evitar el desastre».
El adiós. «CREÍ CONCLUIDO UN CICLO»
«Se habla mucho de que decidí marcharme por lo que pasó tras el partido con el Hércules, pero la realidad es que ya lo tenía meditado. Fernando (Sanz) y Luis (Yáñez) lo saben y en cierto modo su comprensión se debe a que también lo entendían. Habían sido dos años muy intensos e, independientemente del final, que por suerte fue bueno, creí que había concluido un ciclo. A veces cuesta mucho tomar decisiones así. ¿Si me equivoqué? Creo que no. En Santander me esperaba otro reto, igual que después, cuando he vuelto aquí. Lo que más nos costó fue irnos de Málaga, porque aquí nos sentimos muy queridos y aquí tenemos previsto fijar nuestra residencia. ¡Si María (su mujer) y las niñas vinieron para Semana Santa y casi no vuelven a Santander...! La verdad es que cuando uno escucha a Viberti hablar de esta ciudad, lo entiende perfectamente».
El regreso. «UNA OPCIÓN QUE NO ESPERABA»
«Afortunadamente dejé muchos amigos dentro y fuera del club. Desde la lejanía disfruté mucho viendo al Málaga la pasada temporada. Sinceramente, no esperaba que se presentara la opción de volver. No fue fácil, pero el club tuvo una enorme paciencia para que todo se arreglara».
Esta temporada. «YA DIJE QUE NO IBA A SER FÁCIL»
«Sabíamos que esta temporada no iba a ser fácil y por eso lo dije cuando llegué. Después de la magnífica campaña anterior había que comenzar de cero y con una amplia reestructuración en la plantilla. Incluso lo advertí después de ganarle al Atlético de Madrid. Creo que la mayoría ya lo ha asumido».
El empate en Sevilla. «SOY HOMBRE DE FÚTBOL...» «Nunca recibí un ultimátum por parte de Fernando, pero soy hombre de fútbol y sabía que si la imagen en Sevilla no era buena era lógico que él tomara la decisión de relevarme. Pero nunca me habló de ello. Al contrario, siempre me he sentido muy respaldado por el club y por la plantilla, y yo, al mismo tiempo, he valorado que el trabajo de los jugadores en los entrenamientos es incuestionable».
Los 100 partidos. «NO ES UN REGISTRO FACIL» «100 partidos. ¡Uf! Se dice pronto, ¿verdad? Desde luego, no es un registro fácil, y menos ahora. Nunca he llevado la cuenta, porque el mérito no es llegar, sino mantenerse. Es evidente que si hemos llegado hasta aquí ha sido por el apoyo de todos: de Fernando y todos los dirigentes, del cuerpo técnico, de los empleados y entrenadores del club, de los aficionados y de los medios de comunicación. Con esa unión es cuando se despejan las dudas. Y por eso estoy convencido de que saldremos adelante y conseguiremos nuestro objetivo».
http://malagacf.sur.es/noticias/2010-01-05/muniz-centenario-20100105.html