El Málaga se enfrenta a Osasuna, Valladolid y Mallorca, en los tres partidos que restan de año, con el fin de sumar al menos seis puntos y salir de los puestos de descenso
Hay un antes y un después a raíz del derbi disputado frente al Sevilla en el Ramón Sánchez Pizjuán (2-2). Al menos, es la intención de los jugadores malaguistas, de un equipo que parece haber renacido con ese empate que supo a triunfo por la dificultad que entrañaba.
A partir de ahora, y hasta la conclusión del presente año, sólo quedan tres encuentros de Liga, todos ellos contra rivales directos en la lucha por conseguir la permanencia en Primera División, como son el Osasuna de José Antonio Camacho, el Valladolid de José Luis Mendilíbar y el Mallorca del ex malaguista Gregorio Manzano, que momentáneamente ocupa puesto de competición europea, pero cuyo objetivo es salvar la categoría.
La hora del triunfo. El Málaga quiere salir cuanto antes de los puestos bajos de la tabla clasificatoria. El objetivo prioritario es vencer al Osasuna, un rival que se le suele dar bien en La Rosaleda al bloque malagueño y frente al que habrá que refrendarlo para sumar tres puntos vitales y, con ello, reencontrarse con un triunfo que no se alcanza desde la primera jornada de Liga, el pasado 30 de agosto.
El Osasuna llegará a Martiricos (domingo, 17.00 horas) con la moral muy alta después de haber vencido ayer a domicilio al Zaragoza (0-1), que sólo tiene cinco puntos más que los blanquiazules. El Málaga se quedaría a cinco de los navarros en caso de triunfo. Es la hora de volver a sumar tres puntos, de salir de una vez por todas del abismo en la tabla y, además, de congraciarse con la gran parte de la afición.
El único partido que le queda al conjunto malaguista fuera de casa será en Valladolid, en el Nuevo José Zorrilla. El bloque pucelano tropezó ayer precisamente en su feudo (3-3), después de haber desperdiciado una ventaja de tres goles, con lo que tendrá ganas de quitarse esa espina.
El Málaga debe demostrar que también es capaz de vencer lejos de La Rosaleda, donde hasta la fecha no ha ganado un partido, si bien ha sumado tres empates, ante el Xerez, el Tenerife y el Sevilla, todos ellos con goles a favor.
El cierre a 2009 –la primera vuelta finaliza cuatro partidos más tarde– lo echará el bloque entrenado por Juan Ramón Muñiz ante el Mallorca de Gregorio Manzano en La Rosaleda.
Será, sin lugar a dudas, el rival más complicado de los tres a los que se medirá el Málaga en estas tres próximas semanas. De momento, el cuadro balear se encuentra en posición de Liga Europa, si bien el ex entrenador blanquiazul insiste en que el objetivo es llegar cuanto antes a los 43 puntos que garantizan la salvación.
A por seis puntos. El Málaga se ha planteado la consecución de seis puntos de los próximos nueve que habrá en juego para abandonar prácticamente de forma definitiva –luego necesitará cierta regularidad–los tres últimos puestos de la clasificación. Y entre esos seis puntos se encuentran los tres del próximo domingo frente al conjunto pamplonica.
Todos ellos serán partidos frente a rivales ´de su misma liga´, con lo que es factible conseguir la victoria en todos ellos. Es lo que necesita la plantilla malacitana para lograr la ansiada reacción, que en teoría ha comenzado con el empate cosechado en la avenida Luis Montoto de Sevilla, es decir, frente al tercero de la Liga.
http://www.laopiniondemalaga.es/todo-depor...009/305648.html
Hay un antes y un después a raíz del derbi disputado frente al Sevilla en el Ramón Sánchez Pizjuán (2-2). Al menos, es la intención de los jugadores malaguistas, de un equipo que parece haber renacido con ese empate que supo a triunfo por la dificultad que entrañaba.
A partir de ahora, y hasta la conclusión del presente año, sólo quedan tres encuentros de Liga, todos ellos contra rivales directos en la lucha por conseguir la permanencia en Primera División, como son el Osasuna de José Antonio Camacho, el Valladolid de José Luis Mendilíbar y el Mallorca del ex malaguista Gregorio Manzano, que momentáneamente ocupa puesto de competición europea, pero cuyo objetivo es salvar la categoría.
La hora del triunfo. El Málaga quiere salir cuanto antes de los puestos bajos de la tabla clasificatoria. El objetivo prioritario es vencer al Osasuna, un rival que se le suele dar bien en La Rosaleda al bloque malagueño y frente al que habrá que refrendarlo para sumar tres puntos vitales y, con ello, reencontrarse con un triunfo que no se alcanza desde la primera jornada de Liga, el pasado 30 de agosto.
El Osasuna llegará a Martiricos (domingo, 17.00 horas) con la moral muy alta después de haber vencido ayer a domicilio al Zaragoza (0-1), que sólo tiene cinco puntos más que los blanquiazules. El Málaga se quedaría a cinco de los navarros en caso de triunfo. Es la hora de volver a sumar tres puntos, de salir de una vez por todas del abismo en la tabla y, además, de congraciarse con la gran parte de la afición.
El único partido que le queda al conjunto malaguista fuera de casa será en Valladolid, en el Nuevo José Zorrilla. El bloque pucelano tropezó ayer precisamente en su feudo (3-3), después de haber desperdiciado una ventaja de tres goles, con lo que tendrá ganas de quitarse esa espina.
El Málaga debe demostrar que también es capaz de vencer lejos de La Rosaleda, donde hasta la fecha no ha ganado un partido, si bien ha sumado tres empates, ante el Xerez, el Tenerife y el Sevilla, todos ellos con goles a favor.
El cierre a 2009 –la primera vuelta finaliza cuatro partidos más tarde– lo echará el bloque entrenado por Juan Ramón Muñiz ante el Mallorca de Gregorio Manzano en La Rosaleda.
Será, sin lugar a dudas, el rival más complicado de los tres a los que se medirá el Málaga en estas tres próximas semanas. De momento, el cuadro balear se encuentra en posición de Liga Europa, si bien el ex entrenador blanquiazul insiste en que el objetivo es llegar cuanto antes a los 43 puntos que garantizan la salvación.
A por seis puntos. El Málaga se ha planteado la consecución de seis puntos de los próximos nueve que habrá en juego para abandonar prácticamente de forma definitiva –luego necesitará cierta regularidad–los tres últimos puestos de la clasificación. Y entre esos seis puntos se encuentran los tres del próximo domingo frente al conjunto pamplonica.
Todos ellos serán partidos frente a rivales ´de su misma liga´, con lo que es factible conseguir la victoria en todos ellos. Es lo que necesita la plantilla malacitana para lograr la ansiada reacción, que en teoría ha comenzado con el empate cosechado en la avenida Luis Montoto de Sevilla, es decir, frente al tercero de la Liga.
http://www.laopiniondemalaga.es/todo-depor...009/305648.html