El Málaga muestra sus carencias ante el Sevilla a una semana del arranque liguero
El equipo que dirige Antonio Tapia aguantó durante la primera parte, pero se vio desbordado en la segunda con una nula presencia ofensiva
El Málaga tiene trabajo por hacer. A una semana del arranque de la Liga frente al Atlético de Madrid, el cuadro que dirige Antonio Tapia fue derrotado ayer de manera clara por un Sevilla a todas luces superior y que demostró estar un nivel por encima del Málaga. En cualquier caso, los objetivos de uno y otro para esta temporada son bien distintos, por lo que tampoco el partido de ayer sirvió para calibrar las opciones de unos y otros ante el campeonato que se avecina.
El Málaga ofreció dos versiones. Durante la primera parte, y con el presumible once titular, supo maniatar a su rival. Presión, orden y colocación ante un equipo con un potencial temible. Sin embargo en la segunda se descompuso y Arnau evitó un marcador más abultado.
La seguridad marcó las primeras acciones del Málaga en los compases iniciales del partido. El equipo entrenado por Antonio Tapia presionó al cuadro hispalense para evitar el juego directo que tan buen resultado ha dado a los de Nervión en los últimos tiempos, pero dejó un hueco importante que a medida que avanzaba el partido se iba agrandando: las bandas.
Peligro
Fue precisamente por la derecha por donde el Sevilla mandó el primer aviso. Navas desbordó a Calleja en una espectacular galopada y centró para que Adriano casi sólo tuviese que enviar el balón al fondo de la portería. Sólo el cruce providencial en plancha de Miguel Ángel evitó un gol que habría dibujado un panorama muy distinto.
El cuadro malaguista, ayer de morado, no se achantó y respondió por medio de Jesús Gámez, que sirvió un balón medido a Duda al interior del área, pero el portugués se tiró buscando un penalti que el colegiado no señaló. Ayer el ex sevillista actuó como segundo punta, en parte por la lesión de Salva y porque Tapia ve en él a un buen acompañante para Salva y Baha.
El Málaga mantuvo su discurso: presión y trabajo ante la calidad que todavía no había aparecido en el centro del campo rival con Romaric y Maresca bien atados. Pero el árbitro desequilibró el marcador al señalar un penalti inexistente de Weligton sobre Renato y que Luis Fabiano transformó. Corría el minuto 28 y el gol descompuso al Málaga.
A partir de ahí, el equipo de Tapia perdió el orden y cedió el mando de manera total al Sevilla, que bien por las bandas o por los balones que Maresca suministró a Luis Fabiano pudo marcar en al menos tres ocasiones más por medio del peligroso delantero brasileño. Por fortuna, el descanso cortó las hostilidades del Sevilla.
Tras probar con el once casi titular que el próximo fin de semana debutará en la Liga contra el Atlético de Madrid, Tapia cambió por completo el equipo para jugar con dos delantero -Baha y Adrián- y el Málaga se descompuso. La contención de la primera parte desapareció y el Sevilla comenzó a llegar a la meta ahora defendida por Arnau en oleadas. Luis Fabiano avisó al cabecear una falta lateral que Arnau envió a córner. Capel se unió a la ofensiva local con peligrosísimas internadas. En una de ellas combinó a la perfección con Luis Fabiano y centró para que Renato volease a gol. El segundo tanto del Sevilla sacó del partido al Málaga, que de no ser por el mal estado de forma de Chevanton podía haber sido goleado. El uruguayo erró en dos mano a mano con Arnau.
Al margen del partido, cabe resaltar la decisión del club de multar a Hélder Rosário por quedarse dormido y no viajar con el equipo a Sevilla, pese a que el desplazamiento se realizó a las 11.30 horas
http://www.diariosur.es/20080824/deportes/malagacf/malaga-muestra-carencias-ante-20080824.html
hace falta un delantero centro pero yaaaaaaaaaaaaaa, con la delantera que tenemos no hacemos nada
mira que quedarse dormio helder quedando a las 11 y media ya le vale jajajajajaja(estaria en la feria?)
El equipo que dirige Antonio Tapia aguantó durante la primera parte, pero se vio desbordado en la segunda con una nula presencia ofensiva
El Málaga tiene trabajo por hacer. A una semana del arranque de la Liga frente al Atlético de Madrid, el cuadro que dirige Antonio Tapia fue derrotado ayer de manera clara por un Sevilla a todas luces superior y que demostró estar un nivel por encima del Málaga. En cualquier caso, los objetivos de uno y otro para esta temporada son bien distintos, por lo que tampoco el partido de ayer sirvió para calibrar las opciones de unos y otros ante el campeonato que se avecina.
El Málaga ofreció dos versiones. Durante la primera parte, y con el presumible once titular, supo maniatar a su rival. Presión, orden y colocación ante un equipo con un potencial temible. Sin embargo en la segunda se descompuso y Arnau evitó un marcador más abultado.
La seguridad marcó las primeras acciones del Málaga en los compases iniciales del partido. El equipo entrenado por Antonio Tapia presionó al cuadro hispalense para evitar el juego directo que tan buen resultado ha dado a los de Nervión en los últimos tiempos, pero dejó un hueco importante que a medida que avanzaba el partido se iba agrandando: las bandas.
Peligro
Fue precisamente por la derecha por donde el Sevilla mandó el primer aviso. Navas desbordó a Calleja en una espectacular galopada y centró para que Adriano casi sólo tuviese que enviar el balón al fondo de la portería. Sólo el cruce providencial en plancha de Miguel Ángel evitó un gol que habría dibujado un panorama muy distinto.
El cuadro malaguista, ayer de morado, no se achantó y respondió por medio de Jesús Gámez, que sirvió un balón medido a Duda al interior del área, pero el portugués se tiró buscando un penalti que el colegiado no señaló. Ayer el ex sevillista actuó como segundo punta, en parte por la lesión de Salva y porque Tapia ve en él a un buen acompañante para Salva y Baha.
El Málaga mantuvo su discurso: presión y trabajo ante la calidad que todavía no había aparecido en el centro del campo rival con Romaric y Maresca bien atados. Pero el árbitro desequilibró el marcador al señalar un penalti inexistente de Weligton sobre Renato y que Luis Fabiano transformó. Corría el minuto 28 y el gol descompuso al Málaga.
A partir de ahí, el equipo de Tapia perdió el orden y cedió el mando de manera total al Sevilla, que bien por las bandas o por los balones que Maresca suministró a Luis Fabiano pudo marcar en al menos tres ocasiones más por medio del peligroso delantero brasileño. Por fortuna, el descanso cortó las hostilidades del Sevilla.
Tras probar con el once casi titular que el próximo fin de semana debutará en la Liga contra el Atlético de Madrid, Tapia cambió por completo el equipo para jugar con dos delantero -Baha y Adrián- y el Málaga se descompuso. La contención de la primera parte desapareció y el Sevilla comenzó a llegar a la meta ahora defendida por Arnau en oleadas. Luis Fabiano avisó al cabecear una falta lateral que Arnau envió a córner. Capel se unió a la ofensiva local con peligrosísimas internadas. En una de ellas combinó a la perfección con Luis Fabiano y centró para que Renato volease a gol. El segundo tanto del Sevilla sacó del partido al Málaga, que de no ser por el mal estado de forma de Chevanton podía haber sido goleado. El uruguayo erró en dos mano a mano con Arnau.
Al margen del partido, cabe resaltar la decisión del club de multar a Hélder Rosário por quedarse dormido y no viajar con el equipo a Sevilla, pese a que el desplazamiento se realizó a las 11.30 horas
http://www.diariosur.es/20080824/deportes/malagacf/malaga-muestra-carencias-ante-20080824.html
hace falta un delantero centro pero yaaaaaaaaaaaaaa, con la delantera que tenemos no hacemos nada
mira que quedarse dormio helder quedando a las 11 y media ya le vale jajajajajaja(estaria en la feria?)