El primer mes de venta ha servido para confirmar las previsiones más optimistas en el seno del Málaga: la nueva camiseta agrada a la afición. Es más, causa furor. La notable demanda va a obligar al club a adelantar la solicitud del segundo pedido a Umbro.
La nueva camiseta, con la inclusión del celeste por el azul en un guiño a la que utilizaba el equipo a finales de los 80, fue estrenada con motivo del encuentro frente al Real Madrid en La Rosaleda. Después, el club dio la oportunidad a los aficionados de reservarla con el aliciente del regalo de una mochila.
La respuesta de la afición malaguista fue suficientemente elocuente. En el club eran conscientes de la expectación que había despertado la nueva camiseta, pero las constantes llamadas a las oficinas interesándose por la fecha de su puesta a la venta incrementó la convicción de que había sido un éxito. Además, conviene incidir en que la decisión de apostar por ese color atenuado había sido muy madurada y debatida durante meses por el temor a que no terminara de gustar.
De este modo, la camiseta comenzó a venderse hace exactamente un mes. Desde el primer día los encargados de las tiendas del club informaron de que el ritmo era muy rápido, como en las mejores ocasiones. Ante esta situación, el club ya ha decidido realizar el segundo pedido anual. Este es un dato ciertamente significativo, porque el encargo a Umbro suele realizarse a finales de agosto o comienzos de octubre para darle margen suficiente de tiempo a la firma.
Sin datos confirmados
El Málaga aún no tiene datos confirmados respecto a la cifra de camisetas vendidas debido a que no sólo se pueden adquirir en las tiendas del club. Tampoco sus dirigentes quieren hacer previsiones, porque en este tipo de cuestiones el riesgo es elevado.
En cualquier caso, cabe recalcar que en una temporada de éxitos se suelen vender entre 20.000 y 25.000 camisetas. El promedio de las últimas campañas oscila entre 18.000 y 20.000. La tendencia marcada durante el primer mes hace pensar que esta última cifra se superará en el primero de los dos años de la elástica blanca y celeste.
Diario Sur
La nueva camiseta, con la inclusión del celeste por el azul en un guiño a la que utilizaba el equipo a finales de los 80, fue estrenada con motivo del encuentro frente al Real Madrid en La Rosaleda. Después, el club dio la oportunidad a los aficionados de reservarla con el aliciente del regalo de una mochila.
La respuesta de la afición malaguista fue suficientemente elocuente. En el club eran conscientes de la expectación que había despertado la nueva camiseta, pero las constantes llamadas a las oficinas interesándose por la fecha de su puesta a la venta incrementó la convicción de que había sido un éxito. Además, conviene incidir en que la decisión de apostar por ese color atenuado había sido muy madurada y debatida durante meses por el temor a que no terminara de gustar.
De este modo, la camiseta comenzó a venderse hace exactamente un mes. Desde el primer día los encargados de las tiendas del club informaron de que el ritmo era muy rápido, como en las mejores ocasiones. Ante esta situación, el club ya ha decidido realizar el segundo pedido anual. Este es un dato ciertamente significativo, porque el encargo a Umbro suele realizarse a finales de agosto o comienzos de octubre para darle margen suficiente de tiempo a la firma.
Sin datos confirmados
El Málaga aún no tiene datos confirmados respecto a la cifra de camisetas vendidas debido a que no sólo se pueden adquirir en las tiendas del club. Tampoco sus dirigentes quieren hacer previsiones, porque en este tipo de cuestiones el riesgo es elevado.
En cualquier caso, cabe recalcar que en una temporada de éxitos se suelen vender entre 20.000 y 25.000 camisetas. El promedio de las últimas campañas oscila entre 18.000 y 20.000. La tendencia marcada durante el primer mes hace pensar que esta última cifra se superará en el primero de los dos años de la elástica blanca y celeste.
Diario Sur