Antonio Tapia Flores, nuevo entrenador del Real Betis, nació en Baena el trece de noviembre de 1959. Este cordobés de nacimiento y malagueño de adopción, es un estudioso del fútbol y el deporte, llegando a convertirse en todo un maestro a la hora de dirigir los designios de una entidad balompédica.
Maestro, pues ha tocado todas las ramas que se hacen necesarias para convertirse en un profesional completo de esta labor. Sus primeros pasos en el mundo del fútbol los dio como jugador allá por los años setenta, cuando militaba en el Atlético Malagueño, filial por aquel entonces del Málaga. No tuvo un gran éxito sobre el césped, y dedicó sus esfuerzos a empaparse de sabiduría deportiva a través de los libros. Esta dedicación hizo que a día de hoy sea Licenciado en Educación Física y Deporte, y Diplomado en Fisioterapia.
Sus primeros pinitos a los mandos de un club tuvieron lugar en 1986, año en el que tomó el timón del C.D. Mijas, donde estuvo hasta 1989, pasando posteriormente por los banquillos de otros dos equipos de la Costa del Sol, el C.D. Fuengirola y el C.D. Los Boliches.
Tras comenzar su formación en dichos conjuntos, da un salto en su carrera al ser llamado para convertirse en segundo entrenador del Málaga, en primer lugar, y del Cádiz, posteriormente. Su buen hacer en estos prestigiosos equipos sirven para que se fije en él otro club de Andalucía, en este caso el Polideportivo Ejido, donde cosechó sus primeros éxitos sonados.
Sus ascensos
En 1997 ficha por el Polideportivo Ejido, conjunto que coge en la Segunda división B, y en el que se mantiene hasta el 2001, año en el que logra ascender al equipo almeriense a la Segunda división A. El gran trabajo realizado en El Ejido le pone en la agenda de varios clubes, para finalmente recalar de nuevo en el Málaga, haciéndose cargo del filial malagueño, con el que logra un nuevo ascenso a la Categoría de Plata en la campaña 2002/2003.
En 2005 le llegó por fin la merecida recompensa de entrenar en Primera división. La destitución de Gregorio Manzano como técnico del Málaga le daba esa oportunidad esperada por todo entrenador… Y no la desaprovechó, salvó al equipo costasoleño de un descenso que parecía casi irrevocable, éxito que le sirvió ese mismo año para ser nombrado hijo adoptivo de Fuengirola.
Vuelta a Málaga
Poco duró su primera andadura en el Málaga, ya que en la siguiente campaña fue destituido, volviendo a entrenar en la Segunda división. Polideportivo Ejido de nuevo, y Granada 74 fueron sus destinos en 2006 y 2007, sin tener demasiada suerte. Tras ese breve impassé de dos años vuelve a ser requerido por el Málaga, equipo con el que realiza una excepcional campaña, llavándolo a luchar por los puestos europeos hasta las últimas jornadas del campeonato liguero.
Ahora, afronta un nuevo reto, y quizás uno de los más difíciles, ascender al Betis en sólo una temporada y crear un proyecto que coloque a los de La Palmera entre la elite del fútbol nacional.
http://www.estadiodeportivo.com/betis.php?id=5449&pg=1
Maestro, pues ha tocado todas las ramas que se hacen necesarias para convertirse en un profesional completo de esta labor. Sus primeros pasos en el mundo del fútbol los dio como jugador allá por los años setenta, cuando militaba en el Atlético Malagueño, filial por aquel entonces del Málaga. No tuvo un gran éxito sobre el césped, y dedicó sus esfuerzos a empaparse de sabiduría deportiva a través de los libros. Esta dedicación hizo que a día de hoy sea Licenciado en Educación Física y Deporte, y Diplomado en Fisioterapia.
Sus primeros pinitos a los mandos de un club tuvieron lugar en 1986, año en el que tomó el timón del C.D. Mijas, donde estuvo hasta 1989, pasando posteriormente por los banquillos de otros dos equipos de la Costa del Sol, el C.D. Fuengirola y el C.D. Los Boliches.
Tras comenzar su formación en dichos conjuntos, da un salto en su carrera al ser llamado para convertirse en segundo entrenador del Málaga, en primer lugar, y del Cádiz, posteriormente. Su buen hacer en estos prestigiosos equipos sirven para que se fije en él otro club de Andalucía, en este caso el Polideportivo Ejido, donde cosechó sus primeros éxitos sonados.
Sus ascensos
En 1997 ficha por el Polideportivo Ejido, conjunto que coge en la Segunda división B, y en el que se mantiene hasta el 2001, año en el que logra ascender al equipo almeriense a la Segunda división A. El gran trabajo realizado en El Ejido le pone en la agenda de varios clubes, para finalmente recalar de nuevo en el Málaga, haciéndose cargo del filial malagueño, con el que logra un nuevo ascenso a la Categoría de Plata en la campaña 2002/2003.
En 2005 le llegó por fin la merecida recompensa de entrenar en Primera división. La destitución de Gregorio Manzano como técnico del Málaga le daba esa oportunidad esperada por todo entrenador… Y no la desaprovechó, salvó al equipo costasoleño de un descenso que parecía casi irrevocable, éxito que le sirvió ese mismo año para ser nombrado hijo adoptivo de Fuengirola.
Vuelta a Málaga
Poco duró su primera andadura en el Málaga, ya que en la siguiente campaña fue destituido, volviendo a entrenar en la Segunda división. Polideportivo Ejido de nuevo, y Granada 74 fueron sus destinos en 2006 y 2007, sin tener demasiada suerte. Tras ese breve impassé de dos años vuelve a ser requerido por el Málaga, equipo con el que realiza una excepcional campaña, llavándolo a luchar por los puestos europeos hasta las últimas jornadas del campeonato liguero.
Ahora, afronta un nuevo reto, y quizás uno de los más difíciles, ascender al Betis en sólo una temporada y crear un proyecto que coloque a los de La Palmera entre la elite del fútbol nacional.
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