El Málaga se coloca a cinco puntos de los puestos que dan acceso a jugar la Copa de la UEFA cuando quedan seis por disputarse · La imagen de los blanquiazules fue tan gris como en las últimas jornadas
Mientras hay vida hay esperanza es un refrán al que se alude en el mundo del deporte para reflejar que sólo un milagro puede arreglar una situación en concreto. Eso es lo que pensarán los más optimistas sobre el sueño del Málaga para jugar competición europea la próxima temporada, que tras la derrota de ayer se queda a cinco puntos de la UEFA. Los que no sean tan risueños ya pensarán algo diferente. Como que quedan seis puntos por disputar y que la imagen del equipo en El Molinón fue demasiado similar a la de las últimas jornadas.
El Málaga dilapida sus opciones de volver a Europa la próxima temporada con un partido más gris que el cielo de Gijón. Los blanquiazules no supieron aprovechar la situación de nerviosismo que vivía el Sporting, un conjunto que lo único que puso sobre el terreno de juego fueron las ganas de ganar, que no es poco por lo visto a estas alturas, y una grandísima afición.
Finalmente, la sensación que queda es la de que se acaba el sueño. A base de gran esfuerzo, se logró algo tan difícil como ser considerado el equipo revelación y pelear por el gran premio a tres jornadas del final. El listón se puso tan alto por lo que demostró el equipo esta temporada que el regusto, aunque sea injusto, es de decepción. Parece que el Málaga está condenado a no mejorar el octavo puesto en una Liga de 20 equipos.
la testa del central
El central que no domina el juego aéreo es un jugador depreciado. Ayer los tres tantos fueron logrados por tres centrales con la testa. Gerard, Weligton y Helder. Por desgracia, el del portugués, que estéticamente resultó hasta bello por su complejidad, fue en propia meta. Agridulce sensación la que experimentó Weligton, que debutaba como goleador blanquiazul casi al final de su segunda temporada en Málaga.
el quinto malaguista
Fernando Sanz, Valcarce, Edgar, Gerardo y Miguel Ángel. El centrocampista catalán sumó ayer su partido 150 en Primera con la camiseta blanquiazul y se coloca el quinto con más encuentros jugados en la historia del club.
Lo negativo de esta efeméride fue la actuación del propio Miguel Ángel, al que se le vio fuera del partido, pues estuvo lento, apenas entró en juego y fue sustituido en el minuto 59. Con partidos así, no le será fácil avanzar en esta histórica lista.
debut número 25
Rossato era el único jugador que no había tenido minutos en este campeonato. Casi un año de lesión le ha marcado en su última temporada como malaguista. Pese a ello, ni desentonó ni pareció falto de ritmo.
http://www.malagahoy.es/article/deportes/426366/mientras/hay/vida.html
Mientras hay vida hay esperanza es un refrán al que se alude en el mundo del deporte para reflejar que sólo un milagro puede arreglar una situación en concreto. Eso es lo que pensarán los más optimistas sobre el sueño del Málaga para jugar competición europea la próxima temporada, que tras la derrota de ayer se queda a cinco puntos de la UEFA. Los que no sean tan risueños ya pensarán algo diferente. Como que quedan seis puntos por disputar y que la imagen del equipo en El Molinón fue demasiado similar a la de las últimas jornadas.
El Málaga dilapida sus opciones de volver a Europa la próxima temporada con un partido más gris que el cielo de Gijón. Los blanquiazules no supieron aprovechar la situación de nerviosismo que vivía el Sporting, un conjunto que lo único que puso sobre el terreno de juego fueron las ganas de ganar, que no es poco por lo visto a estas alturas, y una grandísima afición.
Finalmente, la sensación que queda es la de que se acaba el sueño. A base de gran esfuerzo, se logró algo tan difícil como ser considerado el equipo revelación y pelear por el gran premio a tres jornadas del final. El listón se puso tan alto por lo que demostró el equipo esta temporada que el regusto, aunque sea injusto, es de decepción. Parece que el Málaga está condenado a no mejorar el octavo puesto en una Liga de 20 equipos.
la testa del central
El central que no domina el juego aéreo es un jugador depreciado. Ayer los tres tantos fueron logrados por tres centrales con la testa. Gerard, Weligton y Helder. Por desgracia, el del portugués, que estéticamente resultó hasta bello por su complejidad, fue en propia meta. Agridulce sensación la que experimentó Weligton, que debutaba como goleador blanquiazul casi al final de su segunda temporada en Málaga.
el quinto malaguista
Fernando Sanz, Valcarce, Edgar, Gerardo y Miguel Ángel. El centrocampista catalán sumó ayer su partido 150 en Primera con la camiseta blanquiazul y se coloca el quinto con más encuentros jugados en la historia del club.
Lo negativo de esta efeméride fue la actuación del propio Miguel Ángel, al que se le vio fuera del partido, pues estuvo lento, apenas entró en juego y fue sustituido en el minuto 59. Con partidos así, no le será fácil avanzar en esta histórica lista.
debut número 25
Rossato era el único jugador que no había tenido minutos en este campeonato. Casi un año de lesión le ha marcado en su última temporada como malaguista. Pese a ello, ni desentonó ni pareció falto de ritmo.
http://www.malagahoy.es/article/deportes/426366/mientras/hay/vida.html