Rocío Pérez asegura haber recibido una paliza después de haber pedido el libro de reclamaciones en el establecimiento. Recibió ayuda de una chica
JOSE TORRES. MÁLAGA Una mujer de 38 años denunció el pasado sábado ante la Policía Nacional un incidente ocurrido en el municipio de Torremolinos y que, según su testimonio, pudo acabar con males mayores. De hecho, esta mujer asegura que fue agredida en varias ocasiones por dos jóvenes comerciantes de origen chino. Los hechos tuvieron lugar en un comercio localizado en la calle Doña María Barravino, lugar al que asegura que acudió sobre las 16.30 de la tarde para realizar una recarga de su teléfono móvil que finalmente no pudo completar.
Y es que según asegura Rocío Pérez, nada más llegar al mostrador solicitó una recarga de 5 euros que le fue denegada, ya que la dependienta le dijo que el mínimo era de 10 euros. Tras acceder, Rocío explica que sacó un billete de 20 euros, momento en el que la dependienta le preguntó por la operadora de su teléfono. Una vez dada esa información, la denunciante asegura que el mínimo de la recarga volvió a subir de precio. "La chica me dijo que no, que entonces la recarga mínima era de 15 euros", apunta esta mujer, quien añade que a partir se ese momento comenzó a sentirse "ridiculizada" por la dependienta y su compañera, hasta el punto de que el precio de la recarga se estableció finalmente en 30 euros.
Reclamación. "Tuve la sensación de que me tomaban el pelo y solicité el libro de reclamaciones. Cuando me di cuenta de que no me lo iban a dar les dije que llamaría a la policía, pero ni por ésas. Entonces intenté comprobar si me quedaba saldo en el móvil para llamar a las autoridades y sentí una explosión en la cabeza", asegura esta mujer. Según su denuncia, éste fue el primero de una serie de golpes que apenas pudo contrarrestar con unos manotazos. Sin embargo, otro golpe en la cara y en el ojo izquierdo le hizo caer al suelo. "Lo siguiente que recuerdo es que me estaban arrastrando por el suelo por uno de los pasillos de la tienda mientras una de las chicas me metía las manos por la boca y la otra me agarraba de las muñecas", añade Pérez. Aturdida por el golpe, Rocío sí puede recordar una voz que instaba a sus presuntas agresoras a que la dejaran. "Escuché una voz que decía ¡dejadla! ¡dejadla! ¡que la vais a matar!".
"Momentos después ya estaba en la calle en compañía de una chica marroquí de unos 15 años a la que aún estoy buscando para agradecer lo que hizo", señala Rocío. Fue entonces cuando llamaron a la policía, que a su vez llamó a una ambulancia que le trasladaría al Hospital Clínico, donde le realizaron un parte de lesiones en el que se incluyen diversos hematomas, erosiones, un cuadro de ansiedad, así como pérdida momentánea del conocimiento. La denuncia, que fue cursada en la comisaría de la Policía Nacional de Torremolinos, ya se encuentra en el juzgado número 1 de esta localidad.
JOSE TORRES. MÁLAGA Una mujer de 38 años denunció el pasado sábado ante la Policía Nacional un incidente ocurrido en el municipio de Torremolinos y que, según su testimonio, pudo acabar con males mayores. De hecho, esta mujer asegura que fue agredida en varias ocasiones por dos jóvenes comerciantes de origen chino. Los hechos tuvieron lugar en un comercio localizado en la calle Doña María Barravino, lugar al que asegura que acudió sobre las 16.30 de la tarde para realizar una recarga de su teléfono móvil que finalmente no pudo completar.
Y es que según asegura Rocío Pérez, nada más llegar al mostrador solicitó una recarga de 5 euros que le fue denegada, ya que la dependienta le dijo que el mínimo era de 10 euros. Tras acceder, Rocío explica que sacó un billete de 20 euros, momento en el que la dependienta le preguntó por la operadora de su teléfono. Una vez dada esa información, la denunciante asegura que el mínimo de la recarga volvió a subir de precio. "La chica me dijo que no, que entonces la recarga mínima era de 15 euros", apunta esta mujer, quien añade que a partir se ese momento comenzó a sentirse "ridiculizada" por la dependienta y su compañera, hasta el punto de que el precio de la recarga se estableció finalmente en 30 euros.
Reclamación. "Tuve la sensación de que me tomaban el pelo y solicité el libro de reclamaciones. Cuando me di cuenta de que no me lo iban a dar les dije que llamaría a la policía, pero ni por ésas. Entonces intenté comprobar si me quedaba saldo en el móvil para llamar a las autoridades y sentí una explosión en la cabeza", asegura esta mujer. Según su denuncia, éste fue el primero de una serie de golpes que apenas pudo contrarrestar con unos manotazos. Sin embargo, otro golpe en la cara y en el ojo izquierdo le hizo caer al suelo. "Lo siguiente que recuerdo es que me estaban arrastrando por el suelo por uno de los pasillos de la tienda mientras una de las chicas me metía las manos por la boca y la otra me agarraba de las muñecas", añade Pérez. Aturdida por el golpe, Rocío sí puede recordar una voz que instaba a sus presuntas agresoras a que la dejaran. "Escuché una voz que decía ¡dejadla! ¡dejadla! ¡que la vais a matar!".
"Momentos después ya estaba en la calle en compañía de una chica marroquí de unos 15 años a la que aún estoy buscando para agradecer lo que hizo", señala Rocío. Fue entonces cuando llamaron a la policía, que a su vez llamó a una ambulancia que le trasladaría al Hospital Clínico, donde le realizaron un parte de lesiones en el que se incluyen diversos hematomas, erosiones, un cuadro de ansiedad, así como pérdida momentánea del conocimiento. La denuncia, que fue cursada en la comisaría de la Policía Nacional de Torremolinos, ya se encuentra en el juzgado número 1 de esta localidad.