El Ayuntamiento denuncia la falsificación de las tarjetas que otorga la Junta para aparcar de forma gratuita en el SARE
El original y una buena fotocopiadora. Es lo único que se necesita para obtener una réplica casi exacta de la tarjeta de movilidad reducida que otorga la Junta de Andalucía a algunas personas con discapacidad y que les posibilita aparcar de forma gratuita en los estacionamientos municipales conocidos como zona azul o SARE. El uso fraudulento que algunos ciudadanos hacen de estos documentos ha llevado al Ayuntamiento de Málaga a solicitar al Ejecutivo regional que acometa una modificación para incluir un holograma o chip que evite cualquier falsificación.
Para acogerse a la exención del pago del SARE es necesario sufrir un grado de discapacidad superior al 33%, estar empadronado en Málaga, tener un vehículo en propiedad y presentar la tarjeta de movilidad reducida que emite el Centro Base de Valoración, una pequeña cartulina azul que solicitan unos 6.000 ciudadanos al año, según informó ayer el concejal de Accesibilidad Universal, Raúl López, que destacó que actualmente existe un millar de aparcamientos reservados para personas con discapacidad distribuidos por toda la capital. «Si todas las tarjetas fuesen reales sería muy fácil moverse por Málaga», apuntó.
Petición sin respuesta
«Hace doce meses le solicitamos a la Junta que acometiera la modificación de estas tarjetas para intentar acabar con el pillaje y evitar que las utilicen personas que no tienen problemas de movilidad», señaló López, que confirmó que el Gobierno andaluz no ha dado una respuesta. A juicio del edil, ahora sería un buen momento para el cambio, ya que estos documentos tienen una vigencia de diez años y comenzarán a renovarse en breve.
López denunció las dificultades con las que se encuentran los policías locales a la hora de detectar un posible fraude: «Para los agentes es complicado distinguir entre una tarjeta real y otra que no lo es». Por este motivo, propuso que se incorpore un pequeño holograma, como el que llevan las tarjetas SARE del Ayuntamiento.
Asimismo, López recordó que la Comunidad de Madrid también ha incluido ese sistema de verificación en sus certificados de movilidad reducida y «funciona bien», por lo que instó al Gobierno andaluz a seguir el ejemplo.
http://www.diariosur.es/20090422/malaga/discapacitados-pega-zona-azul-20090422.html#opina
El original y una buena fotocopiadora. Es lo único que se necesita para obtener una réplica casi exacta de la tarjeta de movilidad reducida que otorga la Junta de Andalucía a algunas personas con discapacidad y que les posibilita aparcar de forma gratuita en los estacionamientos municipales conocidos como zona azul o SARE. El uso fraudulento que algunos ciudadanos hacen de estos documentos ha llevado al Ayuntamiento de Málaga a solicitar al Ejecutivo regional que acometa una modificación para incluir un holograma o chip que evite cualquier falsificación.
Para acogerse a la exención del pago del SARE es necesario sufrir un grado de discapacidad superior al 33%, estar empadronado en Málaga, tener un vehículo en propiedad y presentar la tarjeta de movilidad reducida que emite el Centro Base de Valoración, una pequeña cartulina azul que solicitan unos 6.000 ciudadanos al año, según informó ayer el concejal de Accesibilidad Universal, Raúl López, que destacó que actualmente existe un millar de aparcamientos reservados para personas con discapacidad distribuidos por toda la capital. «Si todas las tarjetas fuesen reales sería muy fácil moverse por Málaga», apuntó.
Petición sin respuesta
«Hace doce meses le solicitamos a la Junta que acometiera la modificación de estas tarjetas para intentar acabar con el pillaje y evitar que las utilicen personas que no tienen problemas de movilidad», señaló López, que confirmó que el Gobierno andaluz no ha dado una respuesta. A juicio del edil, ahora sería un buen momento para el cambio, ya que estos documentos tienen una vigencia de diez años y comenzarán a renovarse en breve.
López denunció las dificultades con las que se encuentran los policías locales a la hora de detectar un posible fraude: «Para los agentes es complicado distinguir entre una tarjeta real y otra que no lo es». Por este motivo, propuso que se incorpore un pequeño holograma, como el que llevan las tarjetas SARE del Ayuntamiento.
Asimismo, López recordó que la Comunidad de Madrid también ha incluido ese sistema de verificación en sus certificados de movilidad reducida y «funciona bien», por lo que instó al Gobierno andaluz a seguir el ejemplo.
http://www.diariosur.es/20090422/malaga/discapacitados-pega-zona-azul-20090422.html#opina