El primer coche eléctrico para el Dakar
Como dos niños con zapatos nuevos exhibían Agustín Payá y Albert Bosch el nuevo coche eléctrico, creado por Acciona, que correrá en el Dakar 2015. La ilusión y el desarrollo sostenible fueron protagonistas de la presentación celebrada en Madrid. Encabezados por Pío Cabanillas, director de márketing -y ex ministro portavoz del Gobierno (2000-2002)- de la empresa, que cuenta sus mayores retos ecológicos como éxitos.
El evento comenzó recordando los triunfos de la empresa respecto al cuidado del medio ambiente. Cruzar la Antártida o 26.000 millas naúticas, en tres océanos, sin ninguna emisión de CO2 secundan a la empresa que preside José Manuel Entrecanales, presente en el acto. "Han sido dos años de trabajo. La llegada de Acciona al Dakar, con este ilusionante proyecto, significa un nuevo reto para nosotros. La economía sostenible y la competición pueden ir de la mano y vamos a enseñar al mundo este trabajo", aseguraba Cabanillas en alusión a las más de 51 nacionalidades participantes en el Dakar.
Agustín Payá es un piloto experimentado en la competición de coches eléctricos -tres veces campeón de las ECOSeries y récord de distancia con un vehículo eléctrico- con Mercedes y, además, es un ingeniero que potencia esta tecnología para la competición. Albert Bosch, por el contrario es un experto en resistencia y aventuras extremas. El de Sant Joan de les Abadesses, un pequeño pueblo gerundense donde él mismo cuenta que le llaman loco, ha participado en seis ediciones del Dakar -dos en moto y cuatro en coche- y ha completado otros logros escalofriantes. Desde cruzar el 98% de la Antártida sin compañía, hasta escalar las siete montañas más altas de cada continente, culminando con el Everest. Juntos forman un tándem perfecto.
"Todo comenzó un día que se me ocurrió porque sí. Yo conocía Acciona, su implicación con el desarrollo sostenible y sus proyectos. Entonces un día dije: '¿Y si corremos el Dakar con un coche eléctrico)?' Lo que pasa es que era una idea arriesgada y necesitaba a alguien que me acompañara", narra la génesis Payá. "El más indicado para asociarse conmigo era Albert (Bosch). Sabía de su complicidad con el medio ambiente y además ya había corrido el Dakar", proseguía el piloto e ingeniero en declaraciones este diario.
"Sólo correría de nuevo el Dakar si era con un coche eléctrico. Siento que he disfrutado mucho de la naturaleza, pero yo no he hecho nada por ella", decía Bosch respecto al reto. "Sólo con salir ya habremos ganado. La Organización ha creado una categoría, aparte de la general, para la participación de coches 100% eléctricos. El objetivo es vencer, ya que si terminamos habremos ganado en esa categoría, porque somos los únicos", continuaba Albert destacando que son pioneros en este proyecto.
Escepticismo en la FIA
En contra de las buenas noticias del acto, Bosch se mostró algo decepcionado con la Federación Internacional de Automovilismo debido a que, según el piloto, no les gusta la idea. "El proyecto parece incentivar poco a la FIA. Lo ve de una manera escéptica. Parece ser que haya por ahí un lobby", decía algo decepcionado. Sin embargo, el que será su copiloto en la mayor parte del desierto sudamericano, Payá, se mostraba confiado del cambio. "Creo que el coche eléctrico ha venido para quedarse. Al final, se verán todas sus ventajas y prevalecerá por encima de la gasolina", dijo en un día feliz para el medio ambiente.
http://www.elmundo.es/deportes/2014/11/18/546b7e83268e3e4e208b4577.html
Como dos niños con zapatos nuevos exhibían Agustín Payá y Albert Bosch el nuevo coche eléctrico, creado por Acciona, que correrá en el Dakar 2015. La ilusión y el desarrollo sostenible fueron protagonistas de la presentación celebrada en Madrid. Encabezados por Pío Cabanillas, director de márketing -y ex ministro portavoz del Gobierno (2000-2002)- de la empresa, que cuenta sus mayores retos ecológicos como éxitos.
El evento comenzó recordando los triunfos de la empresa respecto al cuidado del medio ambiente. Cruzar la Antártida o 26.000 millas naúticas, en tres océanos, sin ninguna emisión de CO2 secundan a la empresa que preside José Manuel Entrecanales, presente en el acto. "Han sido dos años de trabajo. La llegada de Acciona al Dakar, con este ilusionante proyecto, significa un nuevo reto para nosotros. La economía sostenible y la competición pueden ir de la mano y vamos a enseñar al mundo este trabajo", aseguraba Cabanillas en alusión a las más de 51 nacionalidades participantes en el Dakar.
Agustín Payá es un piloto experimentado en la competición de coches eléctricos -tres veces campeón de las ECOSeries y récord de distancia con un vehículo eléctrico- con Mercedes y, además, es un ingeniero que potencia esta tecnología para la competición. Albert Bosch, por el contrario es un experto en resistencia y aventuras extremas. El de Sant Joan de les Abadesses, un pequeño pueblo gerundense donde él mismo cuenta que le llaman loco, ha participado en seis ediciones del Dakar -dos en moto y cuatro en coche- y ha completado otros logros escalofriantes. Desde cruzar el 98% de la Antártida sin compañía, hasta escalar las siete montañas más altas de cada continente, culminando con el Everest. Juntos forman un tándem perfecto.
"Todo comenzó un día que se me ocurrió porque sí. Yo conocía Acciona, su implicación con el desarrollo sostenible y sus proyectos. Entonces un día dije: '¿Y si corremos el Dakar con un coche eléctrico)?' Lo que pasa es que era una idea arriesgada y necesitaba a alguien que me acompañara", narra la génesis Payá. "El más indicado para asociarse conmigo era Albert (Bosch). Sabía de su complicidad con el medio ambiente y además ya había corrido el Dakar", proseguía el piloto e ingeniero en declaraciones este diario.
"Sólo correría de nuevo el Dakar si era con un coche eléctrico. Siento que he disfrutado mucho de la naturaleza, pero yo no he hecho nada por ella", decía Bosch respecto al reto. "Sólo con salir ya habremos ganado. La Organización ha creado una categoría, aparte de la general, para la participación de coches 100% eléctricos. El objetivo es vencer, ya que si terminamos habremos ganado en esa categoría, porque somos los únicos", continuaba Albert destacando que son pioneros en este proyecto.
Escepticismo en la FIA
En contra de las buenas noticias del acto, Bosch se mostró algo decepcionado con la Federación Internacional de Automovilismo debido a que, según el piloto, no les gusta la idea. "El proyecto parece incentivar poco a la FIA. Lo ve de una manera escéptica. Parece ser que haya por ahí un lobby", decía algo decepcionado. Sin embargo, el que será su copiloto en la mayor parte del desierto sudamericano, Payá, se mostraba confiado del cambio. "Creo que el coche eléctrico ha venido para quedarse. Al final, se verán todas sus ventajas y prevalecerá por encima de la gasolina", dijo en un día feliz para el medio ambiente.
http://www.elmundo.es/deportes/2014/11/18/546b7e83268e3e4e208b4577.html