Tras la respuesta negativa de Dusko Savanovic, Luke Babbitt y Robbie Hummel, Viktor Sanikidze y Caleb Green encabezaban la lista de candidatos. Desde Los Guindos se buscaba una decisión consensuada y que convenciese a un Plaza, que ha marcado el paso en todos los movimientos.
Tras una semana de calma y de madurar una decisión que, en un principio, no llenaba lo suficiente, el Unicaja ya le ha trasladado a Green una oferta inicial, aunque no existe aún un acuerdo con el ala-pívot. Pero sí buena sintonía.
Sus buenos guarismos desde la línea de tres (cerca del 40% por partido) ha sido un argumento que pesa en la decisión. Ahora, queda llegar a un acuerdo que colme las exigencias de un Green que ya ha hablado hasta en dos ocasiones con Plaza en los últimos días y al que le gustaría un contrato que se pueda extender más allá de una sola campaña.
Al jugador le atrae volver a disputar la Euroliga, competición que ya jugó con el Charleroi. Allí en Bélgica coincidió con Will Thomas, que sería su pareja de baile en la rotación cajista la próxima temporada si, finalmente, termina cuajando su fichaje.
En estos momentos, Green maneja hasta tres ofertas, una de ellas desde la Lega italiana, aunque venir a Málaga es la primera opción para el jugador, que piensa que encajaría a la perfección en los planes de Plaza y tiene el plus de jugar la Euroliga. Aunque él desearía más de un año, el Unicaja prentende esa cifra. El recurrente uno más uno puede desatascar. La gran duda que sobrevolaba sobre la figura del norteamericano era el desconocimiento de la Liga Endesa y sus carencias en la faceta defensiva.
Por contra, Viktor Sanikidze, el otro nombre presente en la baraja de posibilidades que ha manejado la entidad malagueña estas semanas, firmó ayer su nuevo contrato con el Unics Kazan, una vez que el Unicaja desistió de ficharle.