El 3 de abril de 1979 se celebraban las primeras elecciones municipales de la democracia. Los tres alcaldes que ha tenido Málaga desde entonces, Pedro Aparicio, Celia Villalobos y Francisco de la Torre, cuentan sus experiencias al frente del Ayuntamiento de la capital y analizan sus mandatos
Las caravanas de coches con altavoces y lemas electorales fueron, junto a los vistosos carteles, lo más llamativo de las primeras elecciones municipales de la Málaga democrática. Corría el año 1979, la señal de la segunda cadena de televisión apenas se veía en Málaga, la prolongación de la Alameda proseguía su avance y se firmaba el convenio para remodelar la Trinidad y El Perchel. La ciudad era un escenario de huelgas continuas (Citesa, transporte, estudiantes de COU, metal, catedráticos, Hospital Civil...). Menos mal que el ´glamour´ entraba por la Costa del Sol con la visita a Mijas del actor de la serie televisiva ´Kunta Kinte´. Menos daba una piedra.
El 3 de abril de ese año Pedro Aparicio (PSOE) se convertía en el primer alcalde de la democracia con 11 concejales; UCD conseguía 7, los mismos que el PCE, y 4 los andalucistas. El único ´pero´ de la jornada fue la participación: la celebración de las elecciones generales un mes antes, ganadas por Adolfo Suárez, dejaron la abstención en el 50,4 por ciento.
A punto de coger un avión, el vencedor de las elecciones de hace tres décadas habló para La Opinión con su amabilidad habitual: "Tenía la sensación de que no íbamos a ganar", confiesa. Por eso, cuando le comunicaron el resultado su primer impulso fue marcharse a casa y ponerse a estudiar durante quince días "para ser alcalde", hasta la constitución del Ayuntamiento. "Siempre he solucionado mis miedos con los libros", bromea Pedro Aparicio.
Su primera sorpresa del trato político directo fue muy agradable: descubrió que su rival, Andrés García Maldonado, de la UCD, con el que apenas había podido hablar durante la campaña "era una persona estupenda" y de hecho, resalta en general el buen ambiente de esa primera corporación, que tras romperse el pacto PSOE-PP, se convirtió en la primera de España en gobernar con los cuatro partidos integrantes: PSOE, PP, UCD y PA. "La convivencia era magnífica", destaca. Buen ambiente para unas circunstancias muy difíciles, porque, como resalta Pedro Aparicio, el franquismo había traído grandes equipamientos, sobre todo en obras hidráulicas, "pero las ciudades estaban hechas una ruina, especialmente Málaga". Por eso, cree digna de recuerdo una corporación "sin un puñetero duro, con una ciudad con muchas necesidades y tan pocos recursos".
De la ilusión de esos años de ´estreno municipal´, peleando por una Málaga llena de carencias, le ha quedado un cariño especial por esa primera corporación, para él "la mejor" de las cuatro que ha presidido.
Y un apunte, 30 años después, Pedro Aparicio sigue con la impresión de que los ayuntamientos continúan peleando por el mismo objetivo: conseguir más protagonismo en el panorama administrativo y alcanzar la financiación que se merecen.
La primera alcaldesa. Celia Villalobos (PP) marcó un hito en la ciudad. Combativa, impulsiva, luchadora y mujer de armas tomar, consiguió conectar con el pueblo. Fue la regidora de la calle y no escatimaba esfuerzos en reivindicar para su ciudad aquello que creía justo.
Llegó a la alcaldía en 1995 y, según rememora la propia ex regidora, fueron "momentos difíciles". "Nos encontramos una situación económica de las arcas municipales muy delicada y gobernábamos en minoría, pero fuimos capaces de sacar la ciudad hacia adelante y de ilusionar otra vez a los ciudadanos", declara.
Ya en el año 1999 se alzó de nuevo victoriosa en los comicios locales, pero en esta ocasión obtuvo mayoría absoluta. El 27 de abril de 2000 dejó la alcaldía de Málaga a Francisco de la Torre para ser ministra de Sanidad entre el 27 de abril 2000 y el 10 de julio del 2002. Tal fue la huella que dejó la regidora que, de hecho, De la Torre tuvo que soportar su sombra durante largos meses.
"Creo que en aquellos comienzos dimos un importante ejemplo de consenso. Recuerdo con absoluto cariño a Eduardo Martín Toval (PSOE) que fue un hombre que puso los intereses de Málaga por encima de los de su partido", rememora.
Planes de choque en los barrios, el asfaltado de calles, la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana, el inicio de la peatonalización del Centro pero, sobre todo, la limpieza de la ciudad y el saneamiento de las cuentas económicas municipales. Éstos son los principales logros que, según Villalobos, se alcanzó en esos años.
La ex alcaldesa resalta además el "importante impulso" que hoy, 30 años después, necesitan los ayuntamientos y considera que se tiene que llegar a un pacto local en el que estén claramente definidas las competencias de los consistorios y que éstas vengan acompañadas de la financiación adecuada.
Actualidad. Francisco de la Torre (PP) ya era un veterano en el conocimiento de la política local malagueña cuando se situó al frente del Consistorio hace ya casi una década. Considerado una figura imprescindible en la etapa de su predecesora, Celia Villalobos, con la que compartió proyectos como la construcción del Palacio de Ferias y Congresos, el dirigente popular se volcó desde un principio en materia urbanística con la peatonalización de la calle Larios en el año 2003, la implantación de un plan de aparcamientos y los avances en el ámbito cultural.
"Es elegante reconocer que los avances conseguidos los hemos hecho gracias al trabajo de los anteriores alcaldes", apunta De la Torre, quien se inició a edad temprana en la política y que no parece tener intención de decir adiós por el momento. De hecho, al dirigente aún le quedan muchas cosas por hacer y un sueño que cumplir: "Necesitamos avanzar en el tema de la descentralización. Sería muy útil y un sueño conseguir verdadera autonomía en política social y cultural entre otros aspectos sin depender de acuerdos y convenios", explica.
Regidor sosegado y tranquilo, De la Torre se fue haciendo poco a poco con el calor de la ciudadanía malagueña hasta conseguir el apoyo absoluto de los malagueños en las elecciones de 2003. Ahora, el regidor continúa al frente de nuevos retos como el de conseguir situar a Málaga como Capitalidad Europea de la Cultura en el año 2016. π Información elaborada por alfonso vázquez, matucha garcía y paloma gálvez.
Pedro Aparicio (PSOE). Alcalde 1979-1995. El alcalde de Málaga de más largo recorrido. Pedro Aparicio, el médico madrileño que se convirtió en el primer alcalde de la Málaga democrática, logró permanecer 16 años al frente del Ayuntamiento. Bajo su mandato se consiguieron instalaciones y servicios que hoy ´se dan por hecho´ en Málaga: la implantación general de la EMT, el saneamiento, el Parque Cementerio, el Teatro Cervantes, la Feria del Centro, la estación de autobuses, la Universidad en Teatinos o el jardín botánico de La Concepción.
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