El club se verá abocado a cambiar de filosofía y con la marcha de Pellegrini se irán también las estrellas millonarias - Se fichará a futbolistas a coste cero, que se encuentren sin equipo o que vengan cedidos 11 jugadores malaguistas acaban contrato
Por estas fechas, hace dos temporadas, Abdullah Ghubn y Antonio Fernández, director deportivo del Málaga CF, con la salvación del equipo tras una segunda vuelta meteórica, ya planificaban la siguiente temporada que resultó ser un auténtico bombazo en cuanto a fichajes se refiere. El Málaga firmó de una tacada a Van Nistelrooy, Joaquín, Toulalan, Monreal, Sergio Sánchez, Mathijsen, Isco y Cazorla por más de 60 millones de euros, que se unieron a los Demichelis, Baptista o Maresca que se incorporaron meses antes junto a Manuel Pellegrini para alcanzar la salvación. Sin duda, una inversión astronómica para un proyecto muy ilusionante que se culminó con la clasificación para la Champions y que dos temporadas después ha confirmado un giro de 180º una vez conocida la intención del jeque de no invertir un solo euro en el Málaga.
Ya la temporada pasada, el Málaga tuvo que adecuarse a esa nueva realidad cuando se vio obligado a dar salida a un importante número de estrellas cuyos beneficios permitieran a la entidad seguir adelante. Cazorla, Rondón y Mathijsen fueron vendidos mientras que Van Nistelrooy y Maresca fueron «cortados» para liberar así una importante masa salarial. Ahí comenzó la reestructuración económica y deportiva del club.
Antonio Fernández, que había tenido un cheque en blanco para fichar hasta entonces, fue sustituido por Mario Husillos, que consiguió traer a coste cero a jugadores importantes como Saviola, Santa Cruz o Iturra. Además, en un encaje de bolillos sin precedentes, el Málaga pudo retener a Isco, Demichelis o Toulalan para asaltar la Champions, con Pellegrini al mando.
Pero ahora, con la marcha de Pellegrini, auténtico pegamento del vestuario malaguista, retener a los buques insignia del «EuroMálaga» se antoja misión imposible. Y es que hombres como Demichelis, Joaquín o Toulalan supeditaban su continuidad a la del «Ingeniero». Por no contar que el club además de liberar masa salariar necesita vender para ir tapando «agujeros» con Hacienda, fichas de jugadores o proveedores.
Con este escenario totalmente nuevo, el Málaga se ve obligado a seguir apostando por jugadores de perfil bajo, que lleguen a coste cero a la entidad, cedidos o que estén sin equipo. Por ello, la figura de Mario Husillos, que está negociando su continuidad en el club, se antoja fundamental. El director deportivo malaguista ha demostrado cuando todo estaba en su contra que puede confeccionar una plantilla de garantías. Se sacó de la manga a Iturra que ha dado un rendimiento superlativo y consiguió convencer a estrellas como Santa Cruz y Saviola. Además en diciembre, tras la traumática salida de Monreal, reaccionó a la perfección con el fichaje de Antunes, que ha conseguido que no se eche de menos tanto al navarro.
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