MÁLAGA C.F.
Renovación de conveniencia entre el Málaga e Isco sin ampliar la duración
Se incrementan la ficha del futbolista y la cláusula de rescisión, y ambos saldrían favorecidos en un futuro traspaso
13 de diciembre de 2012
Isco, tras su primer gol con el Málaga, al Villarreal. ::
ÁLVARO CABRERA
El centrocampista benalmadense, en un control del balón durante el partido frente al Granada. ::
ANTONIO SALAS
A la espera del resultado del Golden Boy y de la llamada para La Roja
SERGIO CORTÉS scortes@diariosur.es | MÁLAGA..-
El acuerdo está pactado y únicamente falta
sellarlo. Los dirigentes del Málaga y los asesores de Isco firmarán a
muy corto plazo el nuevo contrato del medio punta benalmadense y la gran
novedad se centra en que, en contra de los distintos comentarios de los
tres últimos meses, no se ampliará la vinculación (hasta el 30 de junio
de 2016). De este modo, se trata de una renovación a medida de las dos
partes que abre la puerta a un posible traspaso.
De antemano conviene incidir en la extraordinaria
disposición que han mantenido en todo momento Isco, su familia y sus
asesores en la negociación con el Málaga. La irrupción del futbolista a
nivel nacional e internacional ha estado muy por encima de lo esperado
entre los dirigentes -pese a la convicción generalizada de que ya en su
primer año sería una de las revelaciones en la élite- y por esa razón la
cláusula de rescisión incluida en su contrato se había quedado pequeña,
muy pequeña en consonancia con el rendimiento del jugador. En julio de
2011, cuando se alcanzó el acuerdo entre las partes para permitir su
desvinculación del Valencia (por el pago ante la Liga Profesional de
seis millones más el IVA), se fijó una cifra de 20 millones, ampliable
en un millón más cada año hasta que expirara la vinculación, en junio de
2016.
En este caso lo más fácil para el futbolista era
esperar pacientemente para marcharse con el mejor postor en la subasta
que se produce ahora mismo en el mercado por sus servicios. Hay que
insistir en que de nada vale que un club pague la cláusula de rescisión
al Málaga si previamente no cuenta con el visto bueno del protagonista.
Es decir, a Isco le habría bastado con aguardar una oferta económica
mareante en forma de emolumentos y dar el visto bueno para que a
continuación se formalizara su salida.
Apuesta decidida
Sin embargo, ni Isco ni su entorno desean que esta
situación se produzca. Todo lo contrario. Así se lo expusieron en las
dos primeras citas a los responsables del club inmersos en la
negociación: el director general, Vicente Casado, y el director
deportivo del primer equipo, Mario Armando Husillos. En todo momento se
ha tratado de ayudar al Málaga y de buscar el máximo beneficio para
este. Primero, porque la familia benalmadense no olvida la apuesta
decidida, incluso contundente, que se realizó desde la entidad de La
Rosaleda cuando el jugador estaba bajo mínimos anímicamente en el
Valencia; segundo, por cómo se llevaron aquellos contactos para
perjudicar lo mínimo al futbolista, y tercero, porque el trato recibido
por el medio punta a todos los niveles lo ha desbordado. En definitiva,
había que buscar la fórmula para que en caso de un hipotético traspaso
el club ingresara una cantidad importante, muy por encima de los 21
millones correspondientes en la actualidad a la cláusula de rescisión.
Eso sí, desde el primer momento se habló de no
ampliar la duración del contrato. Durante estos tres meses han salido a
la palestra distintas cifras respecto a los emolumentos, la cláusula de
rescisión y la nueva fecha del final de la vinculación entre las partes,
pero el mutismo absoluto de las partes implicadas ha sido tal que nunca
ha trascendido la única premisa con la que se partió en la negociación:
el nuevo documento también incluiría como día de caducidad el 30 de
junio de 2016.
De este modo, durante los tres meses de contactos los
avances han sido muy paulatinos hasta llegar al núcleo central del
acuerdo. Únicamente quedan algunos flecos que, si no surgen sorpresas,
se resolverán en pocos días. Y la conclusión más evidente es que, como
se barruntaba, se trata de una revisión del contrato a medida de las
partes que en absoluto cierra la puerta a un hipotético traspaso y que,
de producirse esto último, sería harto beneficioso tanto para el club
como para Isco. ¿Quiere decir esto que a la afición malaguista le queda
disfrutar muy poco del medio punta de Arroyo de la Miel? La respuesta es
ambigua. Ni sí ni no. Los 'grandes' de Europa están al acecho y están
dispuestos a tirar de talonario para adjudicarse la puja.
Con esta revisión del contrato el club interesado en
Isco lo tiene más difícil. Primero, porque el Málaga deberá percibir una
cantidad sensiblemente más elevada que esos 21 millones actuales, y
segundo, porque se ve obligado a ofrecerle al jugador una ficha que como
base no tiene sus emolumentos actuales, sino los incluidos en el nuevo
contrato. Es decir, la inversión sería mucho más importante.
A gusto
La otra cuestión que se plantean en estos momentos
los aficionados guarda relación lógicamente con el interés del
futbolista en marcharse. A día de hoy Isco se encuentra muy a gusto. Es
el estandarte del proyecto (y ahora va a serlo aún más), el técnico
confía en él, los aficionados lo veneran y, sobre todo y aunque parezca
extraño, él se divierte jugando al fútbol con el estilo que propone
Pellegrini. Pero no eso no impide que los cantos de sirena de conjuntos
como el Barcelona, el Manchester City o el Real Madrid (este último, el
que más se ha movido últimamente) lógicamente puedan hacerle tilín al
benalmadense si el proyecto actual del Málaga no crece como él espera.