El entrenador del Málaga mantiene su confianza en ocho jugadores con más de 30 años

Un año y medio después de su aterrizaje en el Málaga, Manuel Pellegrini mantiene su apuesta por la experiencia en su plantilla. El técnico chileno no le hace ascos a un grupo con una media de edad elevada o con piezas clave que superen la treintena. Al contrario, en más de una ocasión ha dado muestras de que sus gustos futbolísticos van unidos a esta realidad. La juventud y la pujanza de jugadores no son malos de por sí, pero bien mezclados con futbolistas curtidos que tiren del carro en el campo y que lleven la voz cantante en el vestuario.

Nada de esto es extraño en el vestuario de un equipo, sea del deporte que sea. Sin embargo, no es tan normal que haya tantos veteranos. Al menos ocho de los veinticinco jugadores -casi un tercio- vinculados de momento a la primera plantilla del Málaga superan la treintena: es el caso del guardameta Caballero (30), los defensas Mathijsen (32), Weligton (32) y Demichelis (31); los centrocampistas Maresca (32) y Duda (31), y los atacantes Joaquín (30) y Baptista (30).

La situación del Málaga no es nueva. De hecho, contaba en sus filas la pasada campaña con otros treintañeros, como Van Nistelrooy (35 años) y Hélder Rosário (32), aunque el primero acaba de retirarse y el segundo se desvinculó de una plantilla en la que no tenía ficha para competir oficialmente. Lo que sí es llamativo es que el rediseño del equipo no se haya orientado hacia un rejuvenecimiento del mismo ante la nueva exigencia.

Pellegrini recibió en herencia un equipo falto de madurez en determinadas circunstancias de la competición. En la primera recomposición de la plantilla, en el mercado invernal de la campaña 2010-1011, dio su visto bueno a la llegada de jugadores como Maresca, Demichelis y Baptista que le dieron esa dosis de carácter ganador y de personalidad necesarios para levantar el nivel del grupo.

Se puede pensar que la llegada de nombres a La Rosaleda ha formado también de un efecto llamada. Una especie de señuelo para que otras estrellas confiaran en el proyecto. Pero, a su vez, el técnico chileno casi siempre parece proclive a la llegada de futbolistas maduros al cuadro blanquiazul cuando se le consulta sobre futuribles. Sucedió así con Joaquín, sobre el que no ha ocultado en muchas de sus declaraciones que es una de sus debilidades, o con Van Nistelrooy.

En la misma línea van algunas de las últimas decisiones de planificación deportiva, entre las que figura la renovación de Weligton, el profesional con más edad del equipo, o la posibilidad de que continúe Maresca, que acaba contrato. Asimismo, tampoco hay indicios de que Duda no vaya a continuar, pese a que el portugués que hace dos campañas era el 'jugador franquicia' malaguista, ahora desempeña un rol secundario, sin un lugar fijo en la alineación.

La cifra de ocho jugadores por encima de los treinta años no está cerrada, ya que podría incrementarse con algunos de los escasos refuerzos que se prevén para este verano, que podrían ser un central, dos volantes y un delantero. «Hay que equilibrar al equipo, pero no vendrán más de cuatro fichajes», afirmó el miércoles 16 en su última comparecencia pública.

Sin embargo, el Málaga se dispone a afrontar una temporada mucho más exigente en lo deportivo en cantidad y calidad, lo que puede parecer un argumento en contra de la apuesta por un grupo curtido, experto. En lo cualitativo, porque debutará en la Champions, y en lo cuantitativo, por la posibilidad de superar la eliminatoria a dos partidos de agosto estaría el reto de elevar sus ingresos económicos.

Un año más intenso

Abundando en lo último, el cuadro de La Rosaleda tendrá que afrontar un número elevado de encuentros. Si en la campaña que acaba de concluir ha disputado 42 (38 de Liga y cuatro de la Copa del Rey), en la próxima tendrá asegurado un mínimo de 48, pero la cifra se puede ir más allá de los cincuenta sin necesidad de ser muy optimista en el cálculo. El Málaga tiene seguros ocho partidos en Europa: dos de la eliminatoria de 'play-off' y seis más de la liguilla que juegue (en la Champions o en la Liga Europa). Pero en la Copa del Rey puede superar más de una ronda y también podría adentrarse más en su regreso a los torneos continentales.

En la ficha adjunta se aprecia que el Málaga partió la pasada campaña con la quinta plantilla más veterana en cuanto a media de edad, con 27,7 años. El promedio es relativo, ya que lo rebajan los jóvenes Portillo, Juanmi y Recio, con escasa presencia en el equipo. Por contra, los treintañeros son casi todos piezas fijas en el once. Los menos habituales serían Maresca y Duda. Caballero, Joaquín, Baptista y Demichelis jugarían en circunstancias normales, y Mathijsen y Weligton se disputarían un puesto de central. Cara a la próxima temporada, ya hay nuevos jugadores que se pueden acercar a la treintena, como Toulalan y Eliseu, que la alcanzarán en septiembre y octubre de 2013, respectivamente.


http://malagacf.diariosur.es/noticias/2012-05-25/pellegrini-apuesta-edad-20120525.html

Hace falta gente joven, con tanto mayor podemos flaquear que hay muchos partidos entre Champions, liga, y copa.
Ya lo expuse en otro lado, a mi me gusta mucho Nacho Cases del Sporting. Jugón para el centro del campo, muy muy bueno y joven

Un portero con 30 años está en el mejor momento. Los centrales a esa edad suelen rendir muy bien, hasta los 32 o 33 años, es cuando tienen más experiencia y es un puesto donde es importante. Yo no veo mal tener 8-10 jugadores entre los 29-32 años, si físicamente están bien, es ideal para tener un equipo competitivo, comprometido (a esa edad la madurez mental es mucho mayor generalmente que con chavales de 22 o 23 años) y servir de ejemplo a los jóvenes de la plantilla.

Hay algunos casos que si intentaba su salida, como Duda o Maresca, incluso si no está bien recuperado Baptista también. Pero parece que el chileno cuenta con todos estos.

Es una forma de ver el fútbol, Unicaja ganó la liga con la plantilla más veterana de la liga de media eran todos los jugadores de 25 para arriba excepto Vasiliadis.