MÁLAGA C.F.
Rubén, cuestión de confianza
La plantilla arropa al guardameta y está convencida de que el gallego ofrecerá su mejor nivel mañana frente a la Real
14 de abril de 2012
Rubén se ajusta los guantes ayer, antes del entrenamiento. :: SALVADOR SALAS
SERGIO CORTÉS scortes@diariosur.es | MÁLAGA..-
En diciembre y enero estaba fuera del club -a petición propia, todo hay que decirlo- y mañana puede ser decisivo. La situación de Rubén ha cambiado radicalmente en muy pocos días y la lesión de Caballero y la sanción a Kameni por la tarjeta roja que vio en la recta final en Villarreal lo aupan a una responsabilidad que se antojaba muy ajena a él. Y menos en un momento clave de la temporada. El guardameta gallego trata a marchas forzadas de recuperar crédito, aunque en el seno de la plantilla se piensa que todo es cuestión de confianza.
Sin duda, el mejor espejo para calibrar la situación de Rubén se encuentra bajo los palos del Levante. El Málaga fichó a Munúa hace dos años y medio, y en la pretemporada cometió un par de deslices. Igualmente, tampoco se mostró excesivamente seguro y contundente en el arranque de la Liga. «Lleva mucho tiempo sin hacer puerta y es lógico que lo note», recalcaban en el club.
A Munúa le costó coger el sitio. Fue más apreciable en algunas salidas. Recuérdese el gol del Valencia en La Rosaleda, cuando midió mal en un centro muy plano, 'se tragó' el balón y el central David Navarro sentenció en el segundo palo de cabeza. La temporada del uruguayo fue en líneas generales irregular, salvo en el último encuentro, frente al Madrid de Pellegrini, cuando realizó dos paradas decisivas. Así que cuando en el Málaga vieron que no aceptaba la oferta de renovación decidieron no pensar más en él y volcarse, curiosamente, en Caballero y Rubén.
Ahora Munúa, eso sí respaldado por un dispositivo de contención muy solvente, encaja pocos goles y muestra más seguridad en sus intervenciones. Sin duda, la confianza le ha hecho crecer hasta recuperar el nivel que provocó su incorporación al Deportivo.
Este ejemplo es perfectamente trasladable a Rubén. Es evidente que al gallego no se le ha olvidado parar. Y tampoco parece un argumento de peso que le pueda la responsabilidad en momentos comprometidos. Si bien la Primera División no es igual que la Segunda, conviene no olvidar que en esta categoría sostuvo al Cartagena en varios encuentros hasta el punto de que el equipo, entonces dirigido por Juan Ignacio Martínez (ahora en el Levante), siguió hasta el final con ilusiones de un histórico ascenso a la élite.
Dudas
Rubén no estuvo excesivamente acertado en el desenlace del partido de Villarreal. Él mismo lo sabe, porque, aseguran, es un profesional muy exigente. Sus dudas contagiaron a la defensa. Pero también es justo recordar que en el saque de esquina decisivo, el que costó la derrota, no hubo contundencia en el despeje de los hombres altos en la prolongación del primer palo y, sobre todo, se produjo un descuido imperdonable de la frontal.
¿Confía Pellegrini en Rubén? La respuesta es sencilla: el gallego está aquí básicamente porque el chileno no quiso prescindir de él en verano, cuando estaba apalabrado el racinguista Toño. Después, es cierto, quedó más desencantado y abrió la puerta a la llegada de otro cancerbero (Kameni era el elegido desde el primer momento). Pero el chileno asume que el futbolista está preparado para asumir la responsabilidad en este trance, aunque ayer, como adelantó SUR.es, hubo una conversación entre ambos sobre el césped del estadio Ciudad de Málaga con gestos llamativos.
Mientras, en privado, sus compañeros arropan a Rubén y están plenamente convencidos de que mañana ofrecerá su mejor nivel ante la Real Sociedad. Al gallego lógicamente no se le ha olvidado parar. Tal vez todo sea cuestión de confianza, la que probablemente recuperará cuando sienta el cariño de todo el equipo y de las pobladas gradas del estadio La Rosaleda. Cualquier duda se disipará en cuanto arranque el encuentro.