Los agentes vieron que el joven que se presentó a la prueba tenía más pelo que el que figuraba en la foto como aspirante a obtener el permiso
Se parecían en todo menos en el pelo. Los guardias civiles tenían en las manos la fotografía del aspirante a obtener el carné de conducir, en la que se veía a un ciudadano chino con unas entradas pronunciadas. Sin embargo, el joven asiático que se había presentado al examen hacía gala de una tupida cabellera.
Cuando se supo descubierto por los agentes, que le leyeron los derechos por un supuesto delito de usurpación del estado civil, el impostor emprendió una huida por la Jefatura Provincial de Tráfico, que fue escenario de una singular persecución que algunos usuarios del edificio confundieron con un atraco. Al final, los agentes lograron detenerlo, según ha podido saber SUR.
Ayer, como cada miércoles, se celebraban en la sede de la DGT en Málaga -situada en la calle Max Estrella- las pruebas libres para extranjeros que aspiran a obtener el carné de conducir en España. Apenas habían pasado unos minutos de las nueve de la mañana, hora de comienzo del examen, cuando unos agentes de paisano que se dedicaban precisamente a vigilar intentos de suplantación se percataron de las diferencias físicas de uno de los candidatos a conductor respecto a la foto que aparecía en su ficha.
Así, los guardias civiles, pertenecientes al Grupo de Informes y Apoyo de Tráfico (GIAT), le pidieron que les acompañara a otra habitación para comprobar su identidad. Una vez allí, le hicieron varias preguntas personales en relación a los datos que aparecían en su documentación -como la fecha de nacimiento- que, al parecer, no supo contestar.
Huida
Ante esos indicios, le leyeron los derechos por un posible delito de usurpación. Pero ahí no acabó todo. Aprovechando que uno de los agentes había salido, el ciudadano asiático supuestamente propinó un empujón al otro guardia civil -que cayó al suelo- y salió corriendo, según explicaron fuentes cercanas al caso.
La huida por la Jefatura fue de lo más rocambolesca. El hombre, que tiene entre 20 y 30 años, descendió del primer piso -los exámenes se celebran en el salón de actos- a la planta baja. Buscó la salida, pero se equivocó de escalera. En vez de tomar la de la calle, utilizó una que iba hacia un nivel inferior, por lo que se quedó atrapado dentro del edificio, según las fuentes consultadas.
Durante su intento de fuga, el joven trató de saltar de una tacada unos veinte peldaños de la escalera, pero al apoyarse en el suelo perdió el equilibrio y se cayó. Fue entonces cuando se le echaron encima los dos guardias civiles, que venían tras él a la carrera.
Confusión
La persecución provocó, además del revuelo, una gran confusión entre los usuarios y los trabajadores que en esos momentos hacían sus gestiones en la sede de Tráfico. Tal fue la situación que hubo una llamada al servicio de emergencias 112 alertando de un atraco. El aviso llegó incluso a la sala del 091 de la Comisaría Provincial, que envió varias patrullas al lugar creyendo que se había producido un asalto armado. Una vez allí, el personal de seguridad del edificio aclaró a los agentes lo que realmente estaba sucediendo.
El sospechoso, por su parte, fue conducido a los calabozos de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga, donde permanecía anoche a la espera de ser identificado. Según ha podido confirmar este periódico, a los cargos por suplantación añadió los supuestos delitos de atentado a agente de la autoridad, resistencia y desobediencia
http://www.diariosur.es/v/20120308/malaga/detienen-chino-intentar-suplantar-20120308.html