Se trata de una actividad que se practica en puntos muy concretos de la ciudad. La Plaza de la Marina, la Plaza de San Juan de la Cruz y el Paseo Marítimo de Antonio Banderas congregan cada tarde a un buen número de chavales con sus monopatines que, a falta de suficientes lugares habilitados para tal efecto, hacen uso del más variado mobiliario urbano como pista de skate. Policía y vecinos, por su parte, se quejan de que los patinadores molestan a peatones y de que están destrozando las instalaciones públicas. ¿Quién lleva razón entonces? La guerra está servida.

Diego Gallardo explica que la Policía le ha tomado los datos en tres o cuatro ocasiones. "Me dicen que estoy destruyendo el mobiliario urbano y que la próxima vez me multarán con 250 euros", afirma. Asimismo, explica que en la Plaza San Juan de la Cruz han construido un parque recientemente y que ahora tienen más problemas para poder practicar allí. "Los padres nos regañan y nos dicen que no patinemos con los niños ahí", añade. "A veces, acaban llamando a la Policía", concluye.

Desde el Ayuntamiento el mensaje es muy claro: "la Ordenanza de la Convivencia expone que no pueden desarrollar esta actividad en la vía publica", afirma Julio Andrade, concejal de Seguridad. "Los patinadores están deteriorando el mobiliario público, pero es que el de la Plaza de la Marina lo tienen machacado", añade. Según el concejal, las quejas desde la oficina de Turismo se suceden continuamente, porque aseguran que la gente apenas puede andar por la plaza con total libertad. "Como te den con fuerza con un monopatín hasta te pueden romper una pierna", afirma Andrade. Del mismo modo, asegura que la primera idea no es sancionar a los patinadores, sin embargo, "como no hacen caso, al final hay que hacerlo". "Tienen lugares específicos donde realizar esta actividad", concluye.

Exactamente, es el barrio de Teatinos -entre el parque de la Laguna y la Caja Blanca- el que dispone de unas pistas en las que practicar este deporte y a las que suelen acudir muchos jóvenes. Sin embargo, a muchos otros, les resulta casi imposible desplazarse hasta allí: "soy de El Palo; Teatinos me queda demasiado lejos", asegura Sergio Escaño. Este joven, que lleva ocho años acudiendo a la Plaza de la Marina con su monopatín, explica que hace pocos días lo multaron con 251 euros. "La Policía me siguió desde la Marina hasta la Plaza de Uncibay, allí me paró y me dijo que a dónde iba tan rápido". "En los últimos meses están multado bastante más; antes lo hacían, sobre todo, en época de elecciones", concluye. Pablo Martínez, que también vive en El Palo y que acude cada tarde a la Plaza de la Marina desde hace cuatro años, insiste en que "no tenemos instalaciones cercanas donde poder patinar libremente, así que no podemos hacerlo en ningún sitio".

Sin embargo, en el Parque del Norte -en el barrio de Nueva Málaga- se están construyendo cinco pistas para la práctica del skate que, pese a que se anunció su finalización para antes de que comenzara este año, aún no están terminadas. "Las obras llevan ocho o nueve meses paradas", asegura Nacho González, asiduo de este deporte y que cada vez que acude a este lugar siempre se encuentra con lo mismo: "siguen cerradas y sin signos de que se vayan a abrir pronto".

Asimismo, González se queja de que quieren privatizar estas instalaciones y hacerles pagar por usarlas. Efectivamente, el anterior concejal de Juventud, Mario Cortés, explicó en su momento que el precio de las instalaciones ascendería a un euro al día y que habría bonos de 6 euros al mes o de 30 euros al año. Por su parte, el actual concejal de Juventud, Damián Caneda, explica que las obras aún se están ejecutando, pero que según las noticias recientes que han recibido desde Urbanismo "no les debe quedar mucho más". "Esperamos que los chavales puedan usarlas pronto", concluye.


http://www.malagahoy.es/article/malaga/1077873/la/guerra/monopatin.html

No veas con los monopatines