Lo primero, ¿cómo te encuentras físicamente de tu torcedura de tobillo?
Mejor, el domingo tuve un esguince después del partido, pero hoy me he incorporado con el equipo al final de la sesión y espero que mañana esté ya bien para completar el entrenamiento. Hoy me colocaron un vendaje y me sentí bien, no tuve molestias. Creo que llegaré sin problemas al partido contra el Betis. Espero que una lesión no me saque del equipo ahora.
El domingo volviste a sonreír…
Sí y hacía tiempo que no estaba contento. Pude jugar un rato y marcar el gol de la victoria. Lo importante era jugar, que el equipo ganase y si encima marqué yo mejor todavía.
Cómo fue ese penalti, le echaste valor…
Yo estoy acostumbrado a echarle agallas a las cosas en la vida y no me pesó la responsabilidad. Vi que pitó penalti y cogí el balón. Algunos querían tirarlo, pero decidí que quería hacerlo yo. Y lo importante es que entró.
Antes de tirarlo, Joaquín y Demichelis se acercan para decirte algo, ¿qué fue?
Recuerdo que Joaquín me dijo que tranquilo, que lo tirara si tenía confianza y que lo iba a meter. Demichelis le preguntó a Joaquín que si lo tiraba otro compañero, pero yo dije que lo iba a hacer yo. Luego me preguntaron otra vez y dije que estaba confiado.
Deben saber los nuevos que sólo has fallado tres de los últimos doce penaltis que has lanzado.
Lo que piensen ellos no me importa, me importa lo que dice el míster. Y él dice que yo soy uno de los lanzadores y es quien manda. Yo me vi confiado y lo tiré.
Fue una celebración rara. Sólo se acercaron a ti unos pocos compañeros.
Agradezco a los jugadores que vinieron a saludarme porque me apoyan mucho, saben que lo he pasado mal y han estado conmigo. Tampoco le voy a dar más vueltas, son cosas del fútbol y a lo mejor estaban pensando en otras cosas en ese momento. Lo importante era meter el gol y sumar los tres puntos. No creo que haya jugadores que quisieran que no lo marcara.
¿Cómo es tu relación con las nuevas estrellas?
No me llevo mal con ninguno, pero es una etapa diferente. Eso sí, con los 25 no puedo estar igual, porque cada uno tiene su carácter y yo el mío. Pero me llevo bien con todos.
¿Te has sentido solo en este tiempo?
No, porque gracias a Dios tengo compañeros que me quieren y a mí familia que me apoya en todo momento. Si alguien no me quiere, no puedo hacer nada. Por eso no le doy importancia.
Mucho se ha hablado de lo acontecido en el descanso del Sevilla-Málaga, ¿qué paso realmente?
Quiero dejar claro que no le falté el respeto a ningún compañero en ningún momento. No me peleé con nadie. He estado dos meses tragando que le falté el respeto a gente, todo el mundo echándome mierda y yo callado sin poder decir nada y quiero dejar claro que no le falté el respeto a nadie. Se han dicho muchas cosas que no son y versiones que no eran verdad. El berrinche fue conmigo mismo porque vi que las cosas que no iban bien. Muchas veces me lo planteo: si te mosqueas es malo porque te mosqueas, y si no te mosqueas porque pasas de todo. No me arrepiento de lo que pasó porque fue un enfado conmigo mismo, repito que no le falté a nadie.
Tu reaparición fue contra el Madrid, ¿premio o castigo?
El míster puso a los jugadores que creía que podían ganar el partido. Sí que es verdad que llevaba mucho tiempo sin convocar, pero jugar contra el Madrid fue bonito y me puse muy contento por volver. El míster me dijo que iba a jugar un par de días antes y no me lo esperaba.
¿Cómo es vuestra relación ahora?
Con Pellegrini, bien. Nos trata a todos igual y conmigo es como con todos los compañeros. Yo ahora juego algo más, pero no me siento contento del todo porque quiero jugar todavía más. Para eso trabajo, para convencer al míster.
También se dijo que llegaste tarde a un entrenamiento porque no tenías ánimos.
Yo soy claro y lo digo todo a la cara y que yo no fuera a entrenar porque no tenía ánimos es mentira. Me quedé dormido y no llegué a la hora que estábamos citados en el vestuario, pero sí al entrenamiento. Yo no engaño a nadie e, igual que quiero que me digan las cosas claras, yo lo suelto.
En este tiempo ha salido el nombre de Granero y que el club busca un mediocentro. ¿Te inquietó?
No, porque yo entreno el día a día para intentar mejorar. Se han escuchado muchos nombres, pero es algo normal porque al Málaga se le vinculan ahora muchos. ¿Salir en invierno? Uno nunca sabe lo que pasa, si te digo que no, te engaño y que si te digo que sí también. Ahora lo que pienso es entrenarme bien y jugar lo máximo posible. Se escuchan rumores de que hay ofertas, pero yo ahora mismo estoy en el Málaga. Lo que pueda pasar no lo sé. Yo trabajo para intentar jugar aquí. Si no juego y hay que buscar otra solución, se buscaría.
¿Estás a gusto, te marcharías en invierno?
Me gustaría jugar más, pero no estoy incómodo. Esta es mi casa, tengo grandes compañeros y amigos y eso es importante. De cada cosa se aprende. Sobre irme, yo no descarto nada. El fútbol es así, lo importante es jugar y yo hago todo lo posible por jugar aquí, en el Málaga.
Fuente: http://www.eldesmarquemalaga.es/agenda-malaga/26691-apono-se-sincer-qme-han-echado-mucha-mierdaq
Partiendo de la base de que yo a Apoño no le veo con dos dedos de frente para decir cosas de tapadillo (me gusta como jugador, pero dudo que su CI sea muy allá) saco las siguientes conclusiones:
1º-que en el vestuario, como imaginábamos, no son todos amiguitos del alma. Lo cuál es normal, no creo que ninguno lo sea y seguro que en todos hay piques. Mientras eso luego no se refleje en el campo de juego no le doy más importancia. Y por cierto, creo que no tiene por qué ser exclusivamente culpa de Apoño, si no también de los nuevos que venían con la vitola de estrellas.
2º- Me creo que Apoño estuviera cabreado con lo del Sevilla. Me creo que soltara alguna burrada en caliente. Pero no me creo que odie en particular a nadie o que se enfrentara con alguien ni recriminara nada. De hecho sinceramente si Apoño insultó a alguien me creo que lo diga en público. Para mí que Pellegrini le vio demasiado enrabietado y decidió darle una bajada de humos importante.
3º-Y volviendo a lo que dije antes, Apoño es tonto. Es que no hay más, tiene la ocasión de quedar de
4º-Lo del penalti espero que no de más de sí. Y me da a mí que entre Demichelis y Apoño sí hay algún pique fuera del vestuario que, de nuevo, mientras no genere en una batalla ni joda al equipo me la pela bastante. Tienen todos los huevos negros (menos los canteranos, Isco, Camacho o Rondón) para saber portarse y no hacer el tonto.
5º-Viendo cómo se las gasta Pellegrini espero que Apoño no se arrepienta de algunas de las cosas que ha dicho. En cualquier caso el jugador está claro que lo que le importa por encima de todo es la opinión del míster, y así tiene que ser.
Ale, agur!!