Muchos regalos para Mourinho
PEDRO LUIS GÓMEZ | .-
EL Málaga respondió a la absurda ofensa de Mourinho con un montón de regalos. El primero, la alineación cargada de suplentes; el segundo, los clamorosos fallos que dieron lugar a los dos primeros goles locales. Una pena, pero así fue. Discrepo de quienes piensan que había que resguardar jugadores para los partidos venideros, porque era renunciar a la sorpresa en el Bernabéu. Es cierto que con los puntos del Barcelona y del Real Madrid no se cuenta, pero que se lo digan a Osasuna o Sporting, por ejemplo. Critiqué con dureza la decisión de Muñiz de sacar suplentes en Valencia la pasada temporada, y ahora se lo reprocho a Pellegrini, sobre todo cuando hay una afición de por medio deseosa de 'venganza' tras las palabras de desprecio del portugués, el mismo que dice que jamás entrenaría al Málaga, decisión compartida por muchos malagueños: no tenemos ni la más puñetera gana de verlo por aquí, ni siquiera de vacaciones. Desde luego la 'experiencia' malacitana con los entrenadores portugueses (el defenestrado e innombrable Ferreira y ahora Mourinho) es para llorar. En fin, que con un equipo plagado de suplentes era difícil restañar la honra herida, aunque hay que reconocer que en los primeros 25 minutos el Málaga mantuvo el tipo de forma incluso sorprendente, pero después llegaron los fallos, especialmente el gol que propició el 2-0, con dos 'cantadas' monumentales de Eliseu y Manolo, y las escasas ilusiones se fueron al garete. Al final nos metieron muchos. Nunca es bueno hacer el ridículo.