El presidente se muestra satisfecho por la trayectoria del equipo, pero hace un llamamiento a la prudencia: «No debemos olvidar de dónde venimos»
La excelente trayectoria del Málaga, en todas sus vertientes, obliga a sus dirigentes a prolongar la alegría después del ascenso a Primera de hace algunos meses. El equipo mejora cada semana en su juego y en la clasificación (ahora es séptimo), lo que deja en el aire dónde está su límite. El propio Fernando Sanz hizo ayer un llamamiento a la prudencia en el programa 'Tribuna Sur' de Punto Radio, aunque reconoció abiertamente los méritos de los blanquiazules en la primera vuelta del campeonato: «Hay pocos equipos en Primera que jueguen como el Málaga».
El presidente blanquiazul recordó que él y la secretaría técnica confiaron desde el comienzo en la plantilla que se confeccionó para el regreso a la élite. «Sabíamos que los nuevos iban a tener un buen rendimiento, sobre todo por su compromiso, algo que teníamos garantizado. Esto lo pasó la gente por alto, pero nosotros no. Se desviven y no quieren fallar. Es difícil encontrar a gente leal», señaló.
Gran momento
El dirigente, que atraviesa por uno de sus mejores momentos desde que se hizo cargo de la entidad, insistió en que el único objetivo del equipo «es la permanencia», aunque llegó a decir que, tras enfrentarse a todos los componentes del campeonato, no ha observado grandes diferencias. «Ninguno de los rivales ha demostrado ser superior a nosotros, ni el Barcelona», comentó, a la vez que elogió el trabajo del entrenador, Antonio Tapia: «Me gusta que se hable bien del míster. Habría querido que se le valorara desde el principio, cuando recibió algunas críticas por varios resultados negativos».
Fernando Sanz también comentó la importancia que tienen en el club otros aspectos distintos al deportivo. «La situación era insostenible. No podemos olvidarnos de dónde venimos. Hay que tener siempre presente esa fotografía. Con la experiencia que tengo ahora, igual no hubiera cogido la entidad. Nuestros contratos con los jugadores ahora están ajustados a las posibilidades del club, por eso no tenemos la necesidad de vender; el que quiera a alguno tendrá que pagar la cláusula de rescisión», destacó.
Se mostró, asimismo, especialmente satisfecho por el cambio de imagen que ha experimentado el club en los últimos años. «Desde que pasé al otro lado, al dejar de ser jugador, he observado muchas cosas. Siempre se decía que el club estaba de espaldas a la ciudad y a la provincia, pero eso ha cambiado. Hemos hecho un trabajo precioso. Creo que mejoramos muchas cosas en los últimos meses», explicó.
El presidente no se olvidó de la cantera, que debe ser la base del primer equipo en algunos años. «Siempre dije que lo segundo más importante que quería hacer, después de sanear la entidad, era la Ciudad Deportiva, por encima del ascenso a Primera. Debemos tener unas instalaciones dignas para nuestros niños. Estamos en el buen camino, pero no sé cuánto tardaremos en tenerlas. Vamos a ver. Nuestro futuro debe estar en la cantera», subrayó el presidente.
www.diariosur.com
La excelente trayectoria del Málaga, en todas sus vertientes, obliga a sus dirigentes a prolongar la alegría después del ascenso a Primera de hace algunos meses. El equipo mejora cada semana en su juego y en la clasificación (ahora es séptimo), lo que deja en el aire dónde está su límite. El propio Fernando Sanz hizo ayer un llamamiento a la prudencia en el programa 'Tribuna Sur' de Punto Radio, aunque reconoció abiertamente los méritos de los blanquiazules en la primera vuelta del campeonato: «Hay pocos equipos en Primera que jueguen como el Málaga».
El presidente blanquiazul recordó que él y la secretaría técnica confiaron desde el comienzo en la plantilla que se confeccionó para el regreso a la élite. «Sabíamos que los nuevos iban a tener un buen rendimiento, sobre todo por su compromiso, algo que teníamos garantizado. Esto lo pasó la gente por alto, pero nosotros no. Se desviven y no quieren fallar. Es difícil encontrar a gente leal», señaló.
Gran momento
El dirigente, que atraviesa por uno de sus mejores momentos desde que se hizo cargo de la entidad, insistió en que el único objetivo del equipo «es la permanencia», aunque llegó a decir que, tras enfrentarse a todos los componentes del campeonato, no ha observado grandes diferencias. «Ninguno de los rivales ha demostrado ser superior a nosotros, ni el Barcelona», comentó, a la vez que elogió el trabajo del entrenador, Antonio Tapia: «Me gusta que se hable bien del míster. Habría querido que se le valorara desde el principio, cuando recibió algunas críticas por varios resultados negativos».
Fernando Sanz también comentó la importancia que tienen en el club otros aspectos distintos al deportivo. «La situación era insostenible. No podemos olvidarnos de dónde venimos. Hay que tener siempre presente esa fotografía. Con la experiencia que tengo ahora, igual no hubiera cogido la entidad. Nuestros contratos con los jugadores ahora están ajustados a las posibilidades del club, por eso no tenemos la necesidad de vender; el que quiera a alguno tendrá que pagar la cláusula de rescisión», destacó.
Se mostró, asimismo, especialmente satisfecho por el cambio de imagen que ha experimentado el club en los últimos años. «Desde que pasé al otro lado, al dejar de ser jugador, he observado muchas cosas. Siempre se decía que el club estaba de espaldas a la ciudad y a la provincia, pero eso ha cambiado. Hemos hecho un trabajo precioso. Creo que mejoramos muchas cosas en los últimos meses», explicó.
El presidente no se olvidó de la cantera, que debe ser la base del primer equipo en algunos años. «Siempre dije que lo segundo más importante que quería hacer, después de sanear la entidad, era la Ciudad Deportiva, por encima del ascenso a Primera. Debemos tener unas instalaciones dignas para nuestros niños. Estamos en el buen camino, pero no sé cuánto tardaremos en tenerlas. Vamos a ver. Nuestro futuro debe estar en la cantera», subrayó el presidente.
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