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Sin un 'nueve' puro y con un jugador más goleador que actúa por detrás, el Málaga y el Betis emplean un modelo similar en su sistema ofensivo
La fuerza, verticalidad y capacidad realizadora de Achille Emana es la gran preocupación del Málaga en su próxima cita (domingo, 17.0 horas, PPV) en el Ruiz de Lopera. El camerunés es, junto al medio centro brasileño nacionalizado turco, Mehmet Aurelio, el alma del Betis, un equipo que calca de alguna manera el modelo de ataque de los blanquiazules, sin una referencia clara en punta y con un segundo jugador por detrás que es el que mejor se aprovecha de los espacios libres para ver puerta.
Después de haber protagonizado una sobresaliente actuación defensiva contra el Sporting de Gijón, al que se le negaron las opciones de contragolpear, así como de disfrutar de jugadas a balón parado cerca del área de Goitia, ahora el peligro se llama Emana, sus potentes arrancadas con el balón hacia el marco o sus apariciones al espacio libre en zona de remate y desprovisto de vigilancia.
En el Betis el 'nueve', Sergio García, es, como en el caso del malaguista Adrián, un futbolista con enorme dinamismo en sus movimientos, que abandona su posición en el área para desplazarse a las bandas -de hecho, la pasada campaña la jugó como extremo en el Zaragoza- y que aguanta el balón para dar tiempo a sus compañeros. Curiosamente, el atacante verdiblanco tenía que cumplir un partido de sanción como consecuencia de su expulsión en Almería, pero tuvo la oportunidad de hacerlo anoche, en el partido copero contra el Real Unión de Irún.
Del buen trabajo táctico de Sergio García, que no es un delantero centro puro como puede ser el argentino Pavone, habitual suplente, se aprovecha Emana, que lleva la friolera de sesenta y tres disparos (diecisiete de ellos a puerta) en sus dieciséis partidos disputados en la Liga con el Betis. Con seis dianas, ya casi iguala sus cifras la pasada campaña en el Toulouse, en el que marcó siete tantos.
Similar a Baptista
Dotado de un buen disparo de media y larga distancia, sus características de juego recuerdan mucho a otro de los mejores jugadores foráneos que ha pasado recientemente por un equipo hispalense, el brasileño Baptista, ex del Sevilla y ahora en el Roma. Lolo, que ha de ser el teórico encargado de su vigilancia, tiene así una misión primordial que añadir a sus habituales coberturas defensivas a los laterales o su apoyo para sacar el balón jugado desde atrás.
El concurso de Emana y del medio centro Mehmet Aurelio son fundamentales en el Betis. Sin ellos y sin el otro acompañante por la zona central, Capi, el Betis cayó casi sin plantear casi oposición frente al Athletic (0-1) en su último partido como local.
Se da el caso también de que el Betis utiliza en ataque a un jugador a banda cambiada, el ex canterano del Málaga Juanma, que entra por la izquierda a pesar de ser diestro, como hacen indistintamente por la derecha Duda y Eliseu. La principal diferencia es que Emana no es un delantero que se mueve como segundo punta, como Baha, sino un volante con mucho gol, como ha demostrado en su carrera como jugador y en la selección.
Por último, a diferencia de lo que han hecho la mayoría de conjuntos que compiten en la Copa, el Betis no reservó a muchos de sus jugadores titulares, la mayoría de los volantes y atacantes, en el partido de octavos de final de anoche en Irún. A pesar de ser un rival de Segunda B, se ha impuesto el interés en el club de brillar en la Copa, torneo del que fue campeón en 2005, máxime con una actuación liguera de momento discreta.
www.diariosur.com
La fuerza, verticalidad y capacidad realizadora de Achille Emana es la gran preocupación del Málaga en su próxima cita (domingo, 17.0 horas, PPV) en el Ruiz de Lopera. El camerunés es, junto al medio centro brasileño nacionalizado turco, Mehmet Aurelio, el alma del Betis, un equipo que calca de alguna manera el modelo de ataque de los blanquiazules, sin una referencia clara en punta y con un segundo jugador por detrás que es el que mejor se aprovecha de los espacios libres para ver puerta.
Después de haber protagonizado una sobresaliente actuación defensiva contra el Sporting de Gijón, al que se le negaron las opciones de contragolpear, así como de disfrutar de jugadas a balón parado cerca del área de Goitia, ahora el peligro se llama Emana, sus potentes arrancadas con el balón hacia el marco o sus apariciones al espacio libre en zona de remate y desprovisto de vigilancia.
En el Betis el 'nueve', Sergio García, es, como en el caso del malaguista Adrián, un futbolista con enorme dinamismo en sus movimientos, que abandona su posición en el área para desplazarse a las bandas -de hecho, la pasada campaña la jugó como extremo en el Zaragoza- y que aguanta el balón para dar tiempo a sus compañeros. Curiosamente, el atacante verdiblanco tenía que cumplir un partido de sanción como consecuencia de su expulsión en Almería, pero tuvo la oportunidad de hacerlo anoche, en el partido copero contra el Real Unión de Irún.
Del buen trabajo táctico de Sergio García, que no es un delantero centro puro como puede ser el argentino Pavone, habitual suplente, se aprovecha Emana, que lleva la friolera de sesenta y tres disparos (diecisiete de ellos a puerta) en sus dieciséis partidos disputados en la Liga con el Betis. Con seis dianas, ya casi iguala sus cifras la pasada campaña en el Toulouse, en el que marcó siete tantos.
Similar a Baptista
Dotado de un buen disparo de media y larga distancia, sus características de juego recuerdan mucho a otro de los mejores jugadores foráneos que ha pasado recientemente por un equipo hispalense, el brasileño Baptista, ex del Sevilla y ahora en el Roma. Lolo, que ha de ser el teórico encargado de su vigilancia, tiene así una misión primordial que añadir a sus habituales coberturas defensivas a los laterales o su apoyo para sacar el balón jugado desde atrás.
El concurso de Emana y del medio centro Mehmet Aurelio son fundamentales en el Betis. Sin ellos y sin el otro acompañante por la zona central, Capi, el Betis cayó casi sin plantear casi oposición frente al Athletic (0-1) en su último partido como local.
Se da el caso también de que el Betis utiliza en ataque a un jugador a banda cambiada, el ex canterano del Málaga Juanma, que entra por la izquierda a pesar de ser diestro, como hacen indistintamente por la derecha Duda y Eliseu. La principal diferencia es que Emana no es un delantero que se mueve como segundo punta, como Baha, sino un volante con mucho gol, como ha demostrado en su carrera como jugador y en la selección.
Por último, a diferencia de lo que han hecho la mayoría de conjuntos que compiten en la Copa, el Betis no reservó a muchos de sus jugadores titulares, la mayoría de los volantes y atacantes, en el partido de octavos de final de anoche en Irún. A pesar de ser un rival de Segunda B, se ha impuesto el interés en el club de brillar en la Copa, torneo del que fue campeón en 2005, máxime con una actuación liguera de momento discreta.
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