El año se estrenará con la prohibición de fumar en todos los espacios públicos cerrados
Los hosteleros acogen la medida con miedo a perder clientes y los médicos dicen que salvará muchas vidas
Se acabó el cigarrito con el café o la copa en los bares o el puro después de las comidas en los restaurantes. Las sobremesas estarán libres de humo. A los fumadores les van quedando cada vez menos zonas en las que poder encender un cigarro. La calle se va a convertir en su refugio. Y es que el cerco contra ese hábito nocivo se estrecha con la finalidad de proteger la salud de la población y salvar vidas. El año se estrenará con la prohibición histórica del consumo de tabaco en todos los espacios públicos cerrados y en algunos al aire libre como parques infantiles, patios de los colegios o recintos sanitarios. La norma, que entrará en vigor pasado mañana domingo, afecta especialmente a los establecimientos de hostelería, ya que no autoriza fumar en bares, restaurantes, pubs y discotecas, lo que supone un endurecimiento respecto a la ley anterior.
Los que vulneren la normativa se enfrentarán a sanciones que van de los 30 euros, en los casos leves, a los 600.000 euros, en los muy graves. Los inspectores de la Consejería de Salud serán los encargados de velar por el cumplimiento de la ley. También podrá hacerlo la Policía Local en caso de ser requerida por los ciudadanos. Este giro de turca contra el tabaco ha sido muy bien acogido por los no fumadores y ha indignado a los que tienen ese hábito. El sector de la hostelería teme perder clientela y ver reducidos sus ingresos. Los médicos, por su parte, dicen que el tabaquismo es la primera causa de muerte prevenible, por lo que aplauden la medida. En Málaga, una de cada tres personas fuma. A partir del domingo ese tercio de la población lo tendrá más difícil.
El principal arma de batalla se produce al vedarse el tabaco en los establecimientos de hostelería, sitios donde los cigarrillos forman parte de la rutina diaria. Esa costumbre tendrá que dejarse en el olvido. De no hacerse, los infractores deberán pagar las consecuencias en forma de multa. «Siempre parece que los culpables de todo lo malo que ocurre en España somos los hosteleros por permitir fumar en nuestros locales. Como si no estuviésemos bastante afectados por la crisis, ahora el Gobierno prohíbe el tabaco en todos los locales», dijo el presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Málaga (Aehma), Rafael Prado. A su juicio, ese hecho, de entrada, va influir negativamente en sus negocios. «Los fumadores están muy enfadados y tememos que dejen de acudir a los bares y restaurantes», aseguró Prado.
Incertidumbre
Añadió que hay una gran incertidumbre en el sector de la hostelería. «Esta ley nos va a hacer daño y perderemos clientes. Eso en una época tan nefasta como la actual nos dejará aún más tocados de lo que ya estamos. El Gobierno, hace cinco años, obligó a los bares y restaurantes de más de cien metros cuadrados a realizar un importante desembolso para acotar un área para fumadores, y ahora eso ya no sirve para nada. ¿Quién me devuelve los 45.000 euros que gasté en ese acondicionamiento? La respuesta es clara: nadie», se lamentó Prado. Respecto a querer proteger a los camareros de que inhalen el humo, señaló que la mayoría de esos profesionales son fumadores. «Estamos entre la espada y la pared. Si no respetamos la ley nos multarán, y si la cumplimos perderemos clientela», señaló el presidente de Aehma.
Por su parte. Salvador de Oña, especialista en medicina preventiva y experto en la deshabituación del tabaco, se mostró a favor de la ley, porque «soluciona un problema social que no estaba resuelto». Argumentó que el tabaco causa problemas al que lo consumo, pero también al que no lo hace y tiene que tragarse el humo de otros. «Nunca hay que olvidar que esa adicción produce cáncer y es la causa de muchas muertes evitables. La ley lo que hace es defender a los no fumadores, que no tienen por qué inhalar una sustancia cancerígena. Se trata de salvaguardar sus pulmones», subrayó.
Para el doctor De Oña, la ley se ha trasladado de forma incorrecta a la opinión pública y a los hosteleros. «Los empresarios no se han visto tutelados». Este experto citó otras actuaciones que deberían acompañar a la nueva norma para lograr que más personas dejen de fumar, como advertir con más contundencia en las cajetillas el riesgo del tabaco, limitar aún más la publicidad indirecta, subir los impuestos con que se grava a ese producto y seguir favoreciendo medidas para ayudar a superar la adicción tabáquica.
ASPECTOS DE LA LEY
Locales de hostelería. No se podrá fumar en bares, pubs, restaurantes, salas de conciertos, casinos y bingos. Ya no habrá zonas reservadas para fumadores. Los locales cerrados deben garantizar que se respira en ellos un aire sano. Los establecimientos tienen que indicar que está prohibido el tabaco.
Terrazas. Se permitirá el tabaco en todas siempre que no tengan ninguna cubierta o techo. Como máximo podrán estar rodeadas por dos paredes, muros o paramentos.
Aeropuertos. Ya no habrá lugares habilitados para los fumadores. Para encender un cigarrillo será forzoso salir de la terminal.
En los domicilios. Son espacios privados y fumar o no dependerá de la responsabilidad de los habitantes de la casa.
Habitaciones de hoteles. La ley prevé que los hoteles reserven hasta un 30 por ciento de habitaciones para fumadores y que sean siempre las mismas.
Estadios de fútbol y plazas de toros. Son lugares al aire libre y se permitirá el tabaco.
Pabellones de deportes. Al ser espacios públicos cerrados el tabaco estará vedado.
Parques infantiles. Se prohibirá fumar en los sitios al aire libre con equipamientos o espacios de juego para menores.
Centros educativos. Tampoco se permitirá en los patios de recreo ni en las puertas de los colegios. Si podrá fumarse en los campus universitarios al aire libre.
Recintos hospitalarios. Se consideran espacio libres de humo incluso a la intemperie.
Sanciones. Las leves, como fumar donde no se debe, se multará de 30 a 600 euros. Las graves implicarán un castigo de 601 a 10.000 euros, como habilitar en los bares o restaurantes, zonas para fumadores. Las muy graves oscilan de 10.000 a 600.000 euros. En ese caso se incluye la publicidad, la promoción y el patrocinio del tabaco en cualquier medio o ámbito.
http://www.diariosur.es/v/20101231/malaga/estrenara-prohibicion-fumar-todos-20101231.html